XXXVIII

630 84 1
                                    

-Gracias señor Asano.

-Hasta mañana, Gakushuu-sensei.- Le dijeron los niños, mirando a estos irse a lo que me saludaron antes de salir de la guardería. Correspondiendo.

-Bye, bye, Seiya-kun.

-Adiós.- Respondí, antes de tomar mis cosas y arreglarlas en mis manos.- ¿Hoy no quiere que le ayude a recoger, sensei?.- Note como se quedo mirando a otro lado, haciendo lo mismo viendo al señor Satō con sus hijos y unos cuantos que se despedían de él antes de ir con sus madres. Regresando mi mirada a él, notando su sonrisa.

-Por hoy, esta bien así.

-Esta bien. Hasta mañana sensei.- Dije, despidiendo me, saliendo enseguida de la guardería, tocando mis lentes, sacandomelos enseguida para limpiarlos con el pequeño pañuelo que me dieron. Quitándoles el empañado y volviendome los a poner.

-Hola.

-¡Ah!.- Chille, girándome a verlo, observando al mismo chico azabache del que me aleje.

Tal vez quiere seguirse burlando, trague saliva, antes de irme corriendo. Escuchando pasos detrás de mi, de seguro me sigue, seguí corriendo, entrando a una habitación, pasando por debajo o arriba de las mesas para que no me atrape.

Oh. Agradezco tanto haber corrido y saber como escapar cuando robaba algo. Sin embargo tenia que estar pendiente de mis lentes, no quería romperlos el primer día, salí de la habitación, corriendo por los pasillos. Siguiendo así hasta que tope contra alguien, mis lentes se deslizaron por mi nariz y los tome justo a tiempo antes de que cayeran más abajo.

-¡Fijate por donde vas!.

-L- lo siento mucho.- Me disculpe, haciendo una pequeña reverencia, mirando al chico, al menos estaba cerca y podía verlo con claridad. Aunque solo era de un ojo. Me coloque los lentes, notando mejor su rostro enojado, sintiendo la incomodidad de nuevo.- Lo siento de verdad.- Volví a decir, se expresión se relajó un poco, pero luego fue reemplazada por una de seriedad.

-Parece que tenemos otro que se la pasa corriendo y chocando con quien quiere.

-No volverá a pasar. Evitare encontrarme con ustedes.- Dije.

-Eso espero.- Respondieron. Observando su rostro volviendo a ponerse molesto.- Pero si es Haru de nuevo.

-Callate Natsu, no te incumbe en nada.- Escuche que dijo, girándome observando al mismo chico que me seguía. Oh no, le eh dado tiempo de alcanzarme.

-Yo... Ya me voy.- Dije, saliendo de ese lugar, comenzando a correr cuando estuve un poco lejos para no molestar a nadie. Mirando hacia atrás, observando a ese tal Haru seguirme de igual manera, apresurando el paso cuando le vi acercarse.

Esto es malo, va a golpearme o algo peor. Pensé, sintiendo segundos después como me sostiene de uno de mis brazos, deteniéndome, mirándole, parpadeando por la cercanía antes de alejarme chocando con la pared.

-P- por favor no me hagas nada.... N- no era mi intención hacerte enojar.- Dije, cubriendo mi rostro en un intento de salvarme.

-Eres rápido....- Escuche que dijo, mirándole entre mis dedos y libreta, observándole jadear y respirar hondo.- Solo quería preguntarte algunas cosas.

-E- esta bien.- Dije, sera mejor no hacerle enojar, aun así intente hacer distancia entre nosotros, y solo me quede mirándole quedando un metro y medio separados. A pesar de que caminaba hacia mi, yo retrocedía.

-¿Porque Asano te pone más atención?.

-¿Eh?.... Yo, pues..... El sensei me pone la misma atención que los niños porque soy de nivel bajo de educación, a- apenas estoy aprendiendo.

-¿Te crees mi remplazo?.

-No, claro que no..... Solo.... Quería aprender, porque mi madre y yo somos de la calle.... Quería recompensar le todo lo que hizo por mi, por eso quería estudiar.

-¿Que hay de tu padre?.- Negué.

-No esta, murió en un accidente, intentamos denunciar al culpable pero.... La condena fue a nuestra contra y... Perdimos todo.- Solté un suspiro antes de decir lo ultimo, las cosas hubieran cambiado si mi padre no hubiera ido por unas medicinas mientras mi madre me cuidaba.

-Yo tampoco tengo padre.- Escuche que dijo, levantando la mirada para verle notándole más cerca.- Pero a diferencia de ti, yo si quiero uno. Pero no quiero seguir presionando a mi madre.

-¿Tu madre.... Quien es?.

-Satō, Satō Karma.

-¿E- el señor Satō?.

-Si, ¿porqué?.

-Él esta en la guardería, con la familia Asano.

-¿Que?.

-N- no te enojes..... Se ven lindos juntos.

-No, debiste ver mal, claro, con tienes lentes ni así puedes ver bien.- Agache la mirada, retrocediendo lo que él había avanzado.- Mi madre esta en celo, no puede salir de su cuarto y estar con alguien.

-.... El sensei es muy bueno, y además, están sus hijos ahí, ¿crees que haría algo indebido enfrente de ellos?.

-¡No hables como si le conocieras!.

-¿Entonces para que me hablas si te molesto tanto?.- Pregunte, intentando armarme de valor, su expresión cambio de enojada a una de confusión y sorpresa.- Busca las respuestas tu solo, que tengas rencor al señor Asano y sus hijos no me concierne. No sabes como Ikuya te ha empezado a odiar, como Saya se esmera tanto en que te gusten sus dibujos, y el señor Asano, creo que sigue esperando a que regreses, y tu madre se ve muy enamorada de él. ¿Porque tanto rencor?. Me contaron que él te rescato, no veo el porque odiarle.

-.... No te concierne.

-Pues.... No me involucres.- Le dije, dándome la vuelta para salir corriendo y alejarme de él.

Creó que nunca entenderé a la gente.

(O&B) Omegaverse Asakar (AU) Donde viven las historias. Descúbrelo ahora