[Especial]

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|WinWin|

El mismo sueño se repetía constantemente cada noche. Una cosa, o más bien una persona no dejaba de mirarme, a su alrededor esparcía oscuridad. Nos separaba una línea la cual llame línea del ángel, de mi lado el piso, las paredes y el techo eran de un color blanco que por más raro que fuera irradiaba luz, pero del otro lado donde se encontraba aquella persona no era más que solo obscuridad y colores muy oscuros. Cada noche cuando ese sueño se hacía presente solo me quedaba parado observando que movimiento llegaría a hacer esa persona y nada. Noche tras noche ninguno de los dos movía un solo dedo, solo nos quedábamos mirandonos fijamente como si desconfiaramos de lo que podría llegar a hacer la otra persona.

Una noche decidí hacer el primer movimiento y cuando me empecé a acercar a él parecía como si hubiera cobrado vida, como si ubiera estado paralizado todo este tiempo. Sonreí, había estado esperando mucho tiempo para saber lo que pasaría a continuación, todo era nuevo y la adrenalina recorría todo mi cuerpo. Cuando pise la línea del ángel aquella persona sin más fue desapareciendo mientras yo me quedaba viendo como todo quedaba completamente blanco, ya no había ni una sola pizca de obscuridad y eso me calmaba.
Luego de lo que parecían ser minutos me fui despertando, mi alarma me había despojado de aquel sueño. Mire la hora, era demasiado tarde, tenia que estar en la nueva escuela temprano para poder anotarme y anotar a mi hermano en ella.

Corrí cómo pude, era demasiado tarde, las inscripciones cerraban a las 10:30 y eran las 10:20. Trate de no perderme mientras corría, miraba las calles para saber si era el camino correcto y mientras me fijaba para poder memorizarlas un muchacho se puso frente a mi.

-¡CUIDADO!- Le grité a aquella persona pero tardé en gritarle y él en reaccionar, los dos ya nos encontrábamos tirados en el piso.
-¡¿PODRIAS MIRAR BIEN POR DONDE VAS?! ¡CASI ME MATAS!- Me gritó el chico furioso.
-En serio lo siento, no quise lastimarte- Me disculpe mirando el piso, me daba pánico dar la cara a una persona la cual atropelle por mi torpeza.
-Ya que- Suspiró el chico aun con un tono molesto -¿Por qué corrías?- Me pregunto mientras se paraba.
-No es de tu incumbencia- Le conteste aun mirando al piso levantándome de este, tenia que llegar a la escuela, no había tiempo para una charla con un desconocido.
-Acabas de tirarme al piso, mínimo quiero saber el porqué- Me dice pasando sus manos por su ropa tratando de limpiar la suciedad que había en ella.
-Perdón, pero tengo prisa- Le dije volviendo a correr, el chico tenia razón, le tenia que contestar aquella pregunta pero como dije no tenia tiempo, era hablar con él y perder mi oportunidad de estar en una de las mejores escuelas del país o dejarlo con la duda e inscribirme en la escuela.
Llegue justo a tiempo antes de que se cerraran las inscripciones y me inscribí a mi y a mi hermano menor, mañana iba a comenzar las clases en el salón 110. Estaba muy emocionado después de casi medio año sin ir a la escuela, era un nuevo comienzo y esta vez tratare de ser más sociable, en mi otra escuela me la pasaba solo al final de la sala en una esquina.

| Actualidad |

Cuando Yuta y Taeyong sé fueron de la casa subí a mi habitación y me acosté en mi cama, todo había pasado tan rápido que parecía como si lo hubiera soñado, acaso yo... ¿estaba por tener relaciones con Yuta? ¡Dios! recordarlo hace que se me erice la piel, fue tan... uauh, ahora que lo recuerdo bien Yuta me estuvo mordiendo el cuello o más bien ¡todo el cuerpo!.
WinWin sé dirigió al baño donde tenia un espejo para poder verse el rostro.
-Yuta... voy a matarte- Amenace en voz baja, el muy hijo de su madre me dejo con marcas en todo el cuello y no pienso ver como esta el resto de mi cuerpo. Suspiré y me dirigí nuevamente a mi cama, me acosté y en pocos minutos ya estaba completamente dormido.

Un ángel, mi ángel     •ΔYuWinΔ•Donde viven las historias. Descúbrelo ahora