15: cree en ti, pero no seas arrogante.

1.1K 102 31
                                    

Quisiera decir que de verdad tomé la advertencia de Evan en serio, me gustaría decir que me alejé de Roar Lance, que no me volví cercana a él tampoco, pero lo hice y no puedo sentirme mal por eso.

Él era un buen chico, amable y un buen compañero a la hora de completar alguna misión, no entendía como Evan le tenía esa animadversión, si, tal vez él tenía sus razones, incluso yo le seguí el juego un par de días, pero con el pasar de los meses, fue inevitable no formar un vínculo de amistad con Roar Lance.

— Oye, Charlie—el rubio me toca el brazo suavemente, sobresaltandome un poco ante su repentino tacto. Yo lo miro y sonrío de lado—. ¿Estás bien?, Te quedaste callada de un momento a otro.

Estábamos en su habitación, él, leyendo en la computadora uno que otro archivo de Shield que robamos en la última misión, y yo, afilando mis cuchillos.

— Ajá, estoy bien, solo estaba pensando—le digo y dejo mi cuchillo favorito recién afilado sobre la mesa, alineado con los otros cuatro.

— ¿Se pude saber en qué?—inquiere, alzando una de sus cejas. Pega los ojos a la pantalla del computador, pero sé que me oye a pesar que su mirada está en otro lado.

— Bueno, en tí—me sincero y él alza su mirada bruscamente, ganándose una carcajada de parte mía—. No me mires así, tú preguntaste.

— N-no entiendo—muerdo mis labios para no reírme, está visiblemente nervioso e incómodo.

— No es nada romántico, Rubio—le aclaro—. Es ésto del principio, ¿Recuerdas que era muy borde contigo?—Roar asiente, comprendiendo—. No entiendo como terminamos siendo...¿Amigos?

— Amigos—él afirma, sonriendo cálidamente.

— Sí—suspiro y me cruzo de brazos, observándolo—. De verdad eres un buen chico, tenía mis dudas en el comienzo, yo siempre desconfío de toda la gente, ¿Entiendes?, Pero contigo fue diferente, confío en ti.

— ¿Gracias?—le guiño el ojo y Roar hace lo mismo—. Yo no te juzgué cuando te conocí, oí de tí, me dijeron que eras unas de las mejores agentes...

—  Oh, bueno, solo tuve un buen maestro.

— En todo caso—dijo casi gruñendo y regresó su atención a la pantalla, fruncí el ceño confundida, ¿Por qué cambió tan rápido de humor?

— ¿Qué está mal contigo, Roar?—él se encogió de hombros, restándole importancia—. Vamos, rubio, dime.

— Nada, Charlie, solo estoy muy cansado—en eso, cerró la laptop y talló sus lindos ojos con los dedos.

— ¿Quieres que me vaya?—pregunto, si, un poco dolida por su cambio de actitud.

— Por favor.

Chasqueó la lengua molesta, odiaba cuando la gente se comportaba como idiota de un momento a otro, ¿No era mejor ser idiota todo el tiempo?, Así sería mas fácil llevarlo. Me paro y tomo todas mis cosas, los cuchillos los guardo en sus fundas, lo enrollo y los pongo bajo mi brazo.

— Bien, nos vemos mañana, supongo.

Me giro sobre mis talones dispuesta a salir, pero antes que pudiera poner la mano en el pomo de la puerta, Roar se levantó y agarró mi muñeca suavemente.

— L-lo lamento—se disculpo—. No s-se lo que me pasa, solo, creo que es el cansancio.

— Pues yo creo...—digo lentamente, soltándome de su agarre—. Que tienes algún problema con el soldat. Cada vez que lo menciono o sale en alguna conversación, tu genio cambia, ¿Qué es lo que sucede?

Has llegado al final de las partes publicadas.

⏰ Última actualización: May 03, 2019 ⏰

¡Añade esta historia a tu biblioteca para recibir notificaciones sobre nuevas partes!

Raven Of Crystal || Winter Soldier ||Donde viven las historias. Descúbrelo ahora