John Wells. Reencarnación.

Capitulo 55. Asociación de Esposas. Parte 2.

John Wells.

—Madre, ahora nos presentaremos —dijo Alessia, las chicas pasaron al frente y saludaron a mamá, haciendo una reverencia.

—Mi... mi nombre es Xenia... tengo 7 años, soy rubia de ojos azules... —dijo ella sin saber que más decir—. Seré buena esposa...

—Lo serás, aunque ahora eres pequeña —le dijo mamá con una sonrisa.

—Mi nombre es Aria —dijo la mujer lobo, solo se inclinó al igual que su hija, no dijo nada más, mi madre sonrió igualmente.

—Yo soy Clarissa —se presentó—. Vengo de un reino lejano, estuve comprometida con el príncipe de aquel lugar... como sabrá, lo rechace adecuadamente y espero ser una linda esposa —terminó Clarissa dándole la mano, madre aceptó el saludo.

—Mi nombre es Amanda Corvblack —dijo la vampiresa.

—Vaya, que linda eres, tú también eres pequeña, ¿qué edad tienes?

—Verdad que sí, aunque no soy joven, madre... soy un vampiro y he vivido más que la mayoría de ustedes.

—¡A que no! —respondió Latrodectus.

—¡¡¡Usted es la antigua Diosa de la Guerra!!!, usted no cuenta —dijo Amanda—. En todo caso, gracias por aceptarme, seré la esposa más fiel.

—Es un gusto conocerla, mi nombre es Anahí, exprincesa del reino destruido —se presentó ella con una reverencia—. Espero ser de su agrado.

—Mucho gusto princesa —dijo mi madre haciendo una reverencia.

—No, he dejado de ser de la realeza, por eso, tráteme como a cualquiera de sus conocidas, además usted será mi madre a partir de ahora.

Anahí le dio un abrazo a mamá para calmarla, parece que mamá aun no puede creérselo.

Todas son sinceras en eso, esto es muy entretenido, algunas están nerviosas, y otras no tanto, que divertido.

—Mi nombre es Byph, soy la futura líder de la horda; es un gusto conocerla suegra —se presentó la chica orco.

—Es un gusto, gracias por salvarnos en aquella ocasión —dijo mi madre.

—Mucho gusto... madre... mi nombre es Idrits... soy una aventurera.

—Se quién eres —dijo mi madre—. Muchas gracias por encontrar a mi hijo —mamá le hizo una reverencia, Idrits contuvo sus lágrimas lo más que pudo, así que tuve que alejarla de las demás y le di un fuerte abrazo.

—Yo soy Sarlynette, pero puede llamarme Sarly —se presentó la supermodelo—. Soy maestra en el uso de la espada, espero llevarnos bien —dijo inclinándose.

—Es un placer —dijo mamá.

—Estoy tan envidiosa —dijo Alina, una de las esposas de papá—. Yo también quiero tener un hijo.

Creo que ha perdido su oportunidad.

—Soy la primera esclava, Amy Redwells nombrada así por el joven amo, también deseo ser su esposa —dijo Amy.

—Si John te obliga a hacer algo malo, dímelo, yo lo castigare —dijo mamá.

—Es imposible, a pesar de como soy ahora... nunca me ha pedido nada, estoy dudando un poco de él —contestó Amy.

—No es que no quisiera —murmure esperando que nadie me escuchará.

—De cualquier modo, el joven Amo, nunca se aprovechó del sello de esclavo para abusar de mí.