La mujer que tenía al frente mio mantenía el perfil bajo, su rostro describía lo arrepentida y preocupada que se encontraba. Quería acercarme para decirle que sí, que el beso fue parte de nuestra jugada; sin embargo, no podía engañarme. No me atrevía a decirle lo encantado que estaba por tenerla cerca, el poder tomar de su cintura, acariciar su cuerpo que para mi era un privilegio. Me encamino en su dirección para tomar de su mano, pero lo aparta enseguida y en lo más profundo de mi sentir logro reconocer el rechazo que esperaba.
—No...¿Me vas a responder o no?—dice ella en un tono gélido.
—Lo hice por nuestro plan...no lo tomes enserio.—lo primero que digo es lo primero que hago, no podía decirle que si, que me atrae tanto que no he dejado de pensar tanto como en otras personas. Que me estaba dejando la palabra en el aire cada vez que pronuncio su nombre. No, no podía hacerlo.
—Si es así, esta bien. Pero trata de que no se vean tan...
—¿Empalagoso?—trato de sonar sarcásticamente burlón.
—Exacto. Vamos, otro baile más, luego tomaremos otro par de los deliciosos vinos y molestaremos a Emily y su...acompañante. Eso sera más divertido.—vuelve acercarse sujetándose de mis hombros. Sin desviar la mirada la sigo ante sus pasos, no me sentía bien de este modo.
Me veía controlado por mis actos y mis sentimientos. Quería irme, pero sé que la mujer que anhelo sería carne fresca ante la mirada de muchos sujetos ricos, quienes no dejaban de observarla cada cinco minutos. Solo pido paciencia para mis alborotados afectos.
⚜
—Enton...ces, llego el día en el...que nuestra...queri...da Emily se cayó en el segundo acto de Mari...—no pude evitar verla cada segundo, me era imposible. A penas se le entendía lo que decía con narrar las devastadoras victorias del ballet en la vida de Emily y el de ella. Todos no paraban de reírse.Estábamos sentados en uno de los sofás para compartir mientras el centro del evento estaba repleto de personas que aun seguían bailando. Yo ya no podía tomar más vino ni otro alcohol, hasta mi propio chófer cayo en un estado irreconocible.
—Creo que es momento de irnos...—espeto mostrando mi interés por retirarme, pero la mano de la castaña me detiene en seguida.
—¿Te iras? ¿Y me deja...ras... Aquí...?
—¿Quieres venir conmigo? Si lo deseas.—mi cambio de humor hasta a mí me había sorprendido, ella frunce su ceño y vuelve a lanzarme una mirada desafiante.
—Necio...amarrr...gado.—suelta de su boca maldiciones en tal estado mientras alistaba sus cosas. La comprendía.
—Señor..yo...pido un poco de tiempo...—habla mi chófer.
—No te preocupes, te pido un Uber para que vayas al hotel y descanses...acompañado si así lo quieres.—respondo sonriendo.
—Nosotros nos quedaremos, su chófer me cuidara bien, a penas ha tomado tres cócteles y ni siquiera se encuentra ebrio.
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AMAR PARA PERDONAR| Pasiones secretas N°2 (EDITANDO)
RomanceLe di mi cuerpo y mi alma, mis sueños más secretos y mis miedos más ocultos, todo para que al final se fuese sin despedirse. -Anónimo. Gabriella es una mujer que perdió la calma y la esperanza, dañada por el amor fraternal. El encanto de ser bailari...