• XIII •

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🍃2 meses después

—No es normal.

—Si lo es. —responde Jimin tras rodar sus ojos.

—Para nada, sé honesto Park. No es algo normal considerando como son las cosas. —respondo, soltando un cansado suspiro.

—Es lo natural. —contrapone. —Jeon es él padre de tu hijo y también es tu chico. No veo nada extraño en eso...

—Jimin. —bebo un sorbo de jugo y vuelvo la vista hacia él. —Lo llamé a las dos de la mañana porque mi cuerpo lo necesitaba con urgencia. No puede ser normal estar así de necesitado por... —observo a mi alrededor pero soy interrumpido antes de siquiera poder continuar.

—Cariño, no es tu cuerpo, eres tú. Estás caliente y necesitas su polla adentro, fin. —guiñe un ojo y continúa comiendo su pastel. —Lo importante es que acude a tu llamado, yo me preocuparía si no lo hiciera.

—Seokjin me dice que cada vez será peor. Que mi libido irá subiendo a medida que pasen los meses y ¡Dios!, es que hasta su voz me lastima. —confieso justo en el instante en que logro divisar a Jungkook, ingresando en la cafetería. —Toda la semana se ha quedado a dormir conmigo...

—Lo último que debe hacer es dormir, si estás en llamas todo el tiempo, mi Tae. —se burla. —Pero está bien, es tu novio.

—No lo es. —niego. —No me lo ha pedido formalmente.

Jimin se atraganta con el trozo de pastel y luego bebe de mi jugo mientras golpea su pecho. —Pero están juntos, es tu pareja, prácticamente es lo mismo.

—Uhm... —murmuro. —¡Fin del tema! —golpeo con suavidad la mesa, cuando Jungkook se acerca a nuestro lado.

—¿Vamos?, no quiero llegar tarde a la cita. —interviene, alzando la mano para saludar a Jimin.

Asiento, tomo mis cosas y me levanto para despedirme de Jimin con un abrazo. —Te llamo a la noche. —menciono cuando nos separamos.

—Claro, debo ser el primero en saber todo lo que pase con ese pequeño. —agrega, en un tono  demandante.

Jungkook también se despide y le entrega a Jimin el dinero de nuestra cuenta. —Yo invito. —sonríe y luego me arrastra de la mano, fuera de la cafetería.

El camino en el auto se hace corto. Tanto, que en menos de lo que pienso, estamos en la sala de espera a minutos de que nos atiendan.

—¿Estás nervioso?

—¿Somos novios?

Preguntamos al unísono pero termino por soltar una carcajada nerviosa cuando los dos nos miramos sorpresivamente.

—Claro que estoy nervioso, estamos a un paso de la semana clave. —señalo tras ponerme de pie para frotarme la pequeña barriga que tengo.

—Yo estoy ansioso. —Jungkook hace lo mismo y luego camina a mi lado para abrazarme tiernamente mientras deja un beso sobre mi hombro. —Y si, soy el padre de tu hijo y tu pareja, si eso es ser novios entonces si, lo somos. Pero si quieres algo mucho más claro, puedo hacerlo mejor. —indica, liberando una de sus manos para arreglar mi cabello. —¿Quieres ser mi novio, Tae?

Suelto un bufido y luego llevo mis manos tras su cuello. —Si, quiero. —contesto, arrugando la nariz cuando él doctor nos llama. —¡Bien, galán! Vamos a lo que vinimos. —tomo su mano e ingresamos a la consulta.

Él doctor se ve más contento que en las veces anteriores, lo que lo hace mucho menos estresante a la hora de la revisión.

—Veamos que tenemos aquí. —acaricia mi barriga y estoy seguro que puedo sentir la intensidad abrumadora de la mirada de Jeon tras de mi.

Él obstetra hace un gesto para que tome asiento en la camilla mientras toma mi presión arterial tras descubrirme el brazo como de costumbre. Luego levanta mi camiseta y deja al descubierto el bulto que adorna mi ombligo, mientras me acuesto boca arriba.

Esparce el gel por toda la zona para comenzar con el ultrasonido. Sube el volumen para que escuchemos los latidos del corazón de nuestro hijo que, resuena como una dulce melodía.

Vuelve a mover el instrumento por todos lados y pregunta si estamos preparados, porque es posible que no sea necesario esperar hasta la siguiente semana para saber el sexo de nuestro bebé.

—Los ultrasonidos en 3D son mucho más visibles que el tradicional. Yo ya tengo la película clara muchachos, sólo espero su confirmación para decirles o esperamos hasta la próxima cita si lo desean. —él doctor monitorea un par de cosas más y luego imprime el resultado.

Jungkook se acerca a mi lado y coge mi mano, besa mi frente y sonríe con esa ternura que encandila. —Yo estoy listo, cariño. Toda mi vida he soñado con esto.

Muerdo mi labio y volteo mi rostro hacia él doctor para asentirle con la cabeza y en silencio. Luego aprieto fuertemente la mano de Jungkook y cierro abruptamente los ojos esperando que la respuesta me alcance.

—¡Felicidades, es una niña! —exclama en voz alta mientras intento abrir uno de mis ojos para intentar ver a Jungkook, quien ha soltado mi mano.

Tiene su rostro cubierto por ambas manos y no hay que ser genio para entender que está pasando. Así que mi cuerpo se mueve con rapidez para sentarme otra vez en la camilla y poder así abrazarlo.

—Serás él mejor papá del mundo. —le susurro. —Y el mejor novio que puedo desear. Te quiero...

Semana 20. Esto recién comienza.

 Esto recién comienza

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💜 La bebé 💜

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