Capítulo 16- Casualidad

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El Ángel del Rey

"Probé el fruto prohibido,

Y con mi palabra y orden...

Sólo puede ser mío..."

~°~

La ceremonia de inicio fue un fastidio, ni siquiera se molestó en estar consciente, despierto o tan siquiera presente. En su lugar se escabulló hacia los jardines, debajo de un árbol a descansar, pensando en lo que acababa de sucederle minutos atrás.

"El toque del ángel..."

Aún le dolía un poco su mejilla, ese golpe había sido bastante fuerte, pero seguía sintiéndose un tanto afortunado de ser tocado por él, aunque fuera doloroso y molesto. Definitivamente quería devolvérselo lo más pronto posible, si se hubiera tratado de alguien más, seguramente ese alguien ya no podría contarlo. Pero se trataba de su amado ángel, a quien le estaba perdonando varias cosas sólo por ser él, por ser tan malditamente adorable que le quitaba las ganas de romperlo a golpes y en su lugar lo hacía querer abrazarlo, tocarlo, mimarlo, acariciarlo...

"Besarlo..."

Esa sensación de suavidad seguía presente en sus labios. Era indescifrable, jamás podía terminar de describirla. Llevó las yemas de sus dedos hasta su boca, recorriendo ligeramente como si pudiera traspasar la sensación a las distintas partes de su cuerpo.

"Mágico..."

La curiosidad también seguía presente. Se había quedado con la ansiedad de tocar los labios ajenos. Si su piel se sentía así de mágica, ¿Cómo se sentiría besarlo directamente?

No lo sabía, no podría imaginarlo. Pero definitivamente lo averiguaría, después de todo no sólo estaban en la misma escuela, sino también en el mismo año.

~°~


Iba a asesinar a alguien. Su cuerpo contenía un nivel peligroso de rabia e impotencia en ese preciso momento. Alguien podría resultar gravemente herido...

—¡¿Cómo... —Sus puños estaban cerrados con tal fuerza que sus nudillos se pusieron blancos—. es que... —Temblaba del enojo y frustración. Las personas en el salón se mantenían alejadas de ese asiento y el aura oscura que desprendía—. no estoy en el mismo salón que Hinata?! —terminó por gritar, golpeando el banco en el acto y maldiciendo mentalmente a los directivos y a todo sujeto que se le cruzara. A veces la suerte no estaba de su lado.

El rey no había sido beneficiado por casualidades de la vida.

~***~

Bien, las cosas se están empezando a complicar. Estamos entrando a una parte que me da flojera escribir pero es necesaria :,D

Voy a seguir intentando mejorar el modo de escritura para hacer los capítulos más largos, espero que les haya gustado el de hoy. Fue bastante corto y simple, pero bue, vamos de a poco~ Saludos!

El Ángel del Rey [KageHina] Haikyuu!!Donde viven las historias. Descúbrelo ahora