KIM
Abro los ojos despacio, me encontraba en una habitación de hospital, eso era obvio, el dolor de mi cabeza era constante y me daba miedo enfrentar mi realidad.
Tenía una bolsa de suero conectado a mi mano, lo cual no me permitía levantarme e irme. El lugar era completamente blanco y creo y eso empeoraba el malestar que tenía.
La puerta se abre, un médico de aproximadamente unos 55 años ingresa junto a Dean.
¡Oh Dios!
Muerdo mi labio mientras evito el contacto de nuestros ojos.
—Señora Williams —habla el hombre de blanco.
—¿Sí?
—Su pareja nos ha dicho que encontró una prueba de embarazo, le hemos hecho unos exámenes de sangre. Felicidades, presenta un embarazo de 3 semanas.
Es en ese preciso momento en el cual no sabes que decir ni hacer. Había recibido esta noticia 2 veces, y nunca me sucedió lo que ahora mismo pasaba. Estaba pasmada y no lo asimilaba, porque mis otros hijos se habían formado en la base de un hogar, y ahora... era difícil de describir.
—¿Señora Williams?
—Necesito un momento.
—Entendemos. Llámeme cuando esté dispuesta a conversar.
—¿Kim? —pregunta Dean.
—Solo... necesito unos minutos.
Finalmente cuando los dos salen me derrumbo, las lágrimas caen en cascada. ¿Por qué me pasan estas cosas a mí? Nos estábamos cuidando, él lo hacía, yo también. ¿Y otra vez? No quería pasar por esto de nuevo, no... estaba bien con tres hijos, nunca planee un cuarto. Iba a ser complicado, era empezar de nuevo... nadie me podría ayudar al cuidado de 4 hijos...
Y ya podía escuchar las palabras de mi madre.
Irresponsable.
Estúpida.
¡Jesús! Ahora mismo me sentía así, Dean y yo no habíamos hablado de ningún futuro, ahora sin verlo venir esta noticia nos caía como un balde de agua fría.
Y en la empresa me odiarían, desde ya podía escuchar los rumores: "La descarada que se embarazó del jefe para obtener un mejor puesto" Si ya me habían acusado de cosas peores, sentía la furia de ellos.
—¿Kim? —Limpio mis lágrimas con las palmas de mis manos, Dean me observa desde el filo de la cama. No me había dado cuenta que entró.
>>¿Quieres hablar?
—No lo sé.
—No... no quería que las cosas pasen así.
—Tampoco yo.
—Pero ya está, Kim. Somos adultos, lo manejaremos.
—Un bebé no se puede manejar, Dean. Es un bebé, se tiene que hacer mucho.
—Bueno, no sé qué decir. ¡Esto no es común para mí!
—Solo estás o no. Ese es el punto.
—Estoy, Kim, pero ¿Tú lo estás?
Lo veo furiosa.
—Tengo que estar, Dean. Está en mi panza, no en la tuya.
—Esto no está resultando bien. Debemos calmarnos.
Respiro con pausa, el me pasa un poco de agua y la bebo despacio.
—Tengo miedo, Dean. No quiero empezar de nuevo, tengo tres hijos ya.
![](https://img.wattpad.com/cover/173076883-288-k367824.jpg)
ESTÁS LEYENDO
JEFE, QUÉDESE CON NOSOTROS
RomanceQuedarse viuda y con tres hijos resultó ser lo más difícil que jamás imaginé. Llevaba un estilo de vida que no sabía era existente, apenas dormía lo suficiente como para decirle a mi cuerpo que soportaría otro días más. Entre ser mamá, trabajar, aca...