Lunes en la mañana.
Hoy volvería al trabajo. De nuevo. Hoy volvería a ver a su sexy jefe. De nuevo.
Los sueños con su jefe eran cada vez más frecuentes y su conciencia poniéndole imágenes pervertidas todo el tiempo no ayudaban de mucho.
"Pero bien que las disfrutas Monserrat"
Y ahí estaba de nuevo.
Había estado pensado en la propuesta de su jefe todo el fin de semana. Tuvo la intención de llamarle y rechazar su oferta pero al ultimo no lo hizo. Una por que no sabía su número. Y dos por que no perdía nada con cuidar a un perro, claro si el perro la aceptaba. Pero si no lo hacia como quiera se quedaría con su trabajo, sin el sueldo doble claro. Teodoro tenía la última palabra.
Todavía sentía lastima por el pobre perro. Mira que llamarlo Teodoro, menudo nombresito. Se acordó de la película de Alvin y las ardillas, una de ellas se llamaba igual. Solo esperaba que el perro de su jefe fuera como la ardilla. Gordito y tierno. Pero recordó que Teodoro era un perro especial y dudaba mucho que el término "tierno" fuera una de sus virtudes.
Solo esperaba que no se pareciera a su dueño. Presumido y sinvergüenza. Pero como dice el dicho "las cosas se parecen a su dueño"
Pero habia otra cosa que la inquietaba mas: Charl. Su jefe había dicho que podría llevarla con ella pero le daba un poco de vergüenza. No se imaginaba a su Charl, a ella, a su jefe y al perro en la misma casa. Charl no conocía a su jefe y tenía miedo que no se agradaran. Gracias al cielo esa misma semana Charl se iría de campamento con sus compañeritos de clase. Así que estaba segura por ahora. Lejos de su jefe y su perro y los tipos a los que le debía dinero Lessley.
Ese era otro asunto que no la dejaba en paz. Lessley le había hablado el fin de semana preguntadole si ya tenía el dinero. Le tuvo que decir que no por que todavía no estaba segura si su jefe le prestaría el dinero. Pretendía pedírselo ese mismo día en el trabajo pero no quería presionarlo por si se arrepentía. Lessley le había recordado de nuevo que si no conseguía el dinero se llevarían a Charl de su lado. Le dijo sobre el campamento, al principio se alivió pero luego dijo que eso no detendría a esos tipos y que la buscarían hasta encontrarla.
No quería ser pesimista pero la actitud de Lessley no la ayudaba mucho.
Luego de haberse duchado, salió del baño en ropa interior. Busco en su armario y sacó una falda beige de tubo, la combinó con una camisa guinda y un saco del mismo color de la falda. Se hizo un moño desordenado dejando que unos mechones castaños le cayeran a los lados de su cara. Se maquillo levemente, sin exagerar. Sombras tenues, rímel, delineador debajo de sus ojos, un labial rosado y un poco de rubor. Su perfume con olor a flores silvestres lo esparció por su cuello y sus muñecas. Se calzo sus tacones beige y se miro al espejo. Simple pero linda. Más que perfecta.
"Cuando te mire tu jefe, te va a estampar contra la pared y te hará suya sin dudarlo. Espero que aproveches Monserrat" dijo su conciencia pervertida.
Monse rodeó los ojos. Esperaba que ese día no se apareciera por su mente jodiendola.
"No sueñes tan alto mi querida Monse" le respondió su conciencia con malicia
Adiós día tranquilo. Suspiro resignada y se dirigió a la cocina.
Charl la esperaba ya sentada en la sala con unos jeans oscuros, una blusa de Elsa y unos tennis también de Elsa. Monse no entendía la obsesión de Charl por esa película. Se sabía la película de memoria y también la canción. En inglés y en español. Hizo que Monse se la aprendiera también para que la cantara con ella. Veían la película una y otra vez hasta el punto que Monse a veces se encontraba cantando la canción mientras hacía de comer. Le gustaba la película. Creía que Disney por fin había hecho una película que se acercara un poco a la realidad. Pero verla a cada rato no era nada divertido. Pero eso hacia feliz a Charl y eso era lo que importaba. Si su Charl era feliz, ella también lo era.
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Virgen hasta el matrimonio
RomantizmMonserrat García una joven de 21 años con el sueño de terminar de estudiar en España lo que más le apasionaba, las finanzas, por fin cumple su sueño al ser aceptada en una de las mejores universidades de ese país. Pero su familia, extremadamente rel...