Capítulo 10

8K 1K 13
                                    

Tony sentía sus piernas temblar por la intensa mirada del rubio.

Había algo familiar en ese Alfa.

Su aroma y sus ojos eran el misterio mismo para el castaño.

—Buenas noches. —La voz ronca del hombre enfrente suyo hizo que su Omega se alterará.

—Buenas noches. —Aun así, se irguió orgullo y habló lo más claro que pudo— ¿Eres el Alfa que Jarvis contrato?

Había sido una pregunta tan estúpida, pero era tan extraño ver a un Alfa Alto Rango... Ahí.

—Por supuesto. —Una sonrisa con ligeros tintes burlones le fue regalada—. Estoy a sus servicios esta noche.

Asintió vacilante mientras escapaba de la vista del rubio. Quería algo fuerte.

Encontró una botella de Whisky e inmediatamente se sirvió un trago.

—Bien... —Sus ojos castaños capturaron la figura fuerte del sujeto—, hay que conocernos.

—¿Lo cree necesario?

—Claro. —Dijo Tony—. Me gustaría saber a quien le abriré las piernas.

El hombre de ojos azules se mantuvo serio esta vez. Al parecer no le hizo mucha gracia lo que había dicho.

—Pertenezco al ejército. —El más alto, se acercaba con sigilo, como si lo estuviera acechando.

—¿Al ejército? —Anthony frunció el ceño— Si perteneces al ejército ¿Qué ganas con estar aquí? ¿Tienes deudas?

—Mis intereses van más allá de lo monetario. —No supo en que momento paso, pero el rubio ya estaba oliendo su cuello—. Tu celo esta comenzando.

Partes borrosas llegaban a su memoria; Tony juraría que había visto esos ojos en otro lugar.

—¿Cuál es tu nombre?

—Steve Rogers.

Y su boca fue tomada con necesidad.

PreludioDonde viven las historias. Descúbrelo ahora