Culpable (Ziam Mayne)

Capítulo 20: El Último Paso

Todo lo que sabía era nada. Nada de nada. Nada porque David ahora era absolutamente nada para él. Conocerlo pude haber sido el peor error que cometió en toda su vida. No sabía qué hacer con él, podría denunciarlo a la policía, pero luego de meditar recordó que era un socio de Big M. y denunciarlo, y llegado el caso de que lo capturen, estaría firmando un acta en la que le cede el permiso a Marlon de ponerlo a dormir. Para siempre.

No podría dejar todo como está, porque Liam lo odia, lo detesta y con toda razón. Liam era un hombre lastimado. Por más rudo que pareciera, él era débil, puesto que había sido lastimado innumerables veces, hasta que Zayn llegó. Zayn le dio amor, fuerza, autoestima y a alguien a quien amar de manera incondicional. Pero él no logró corresponderle, todo por la culpa de un aparecido de cabellos bronce.

Muchos dirían que lo que decidió era una locura, era llegar a un extremo innecesario o que no valía arriesgarse, pero no pediría la autorización de nadie, porque debía solucionar este asunto a cualquier precio.

-¿Estás loco, Zayn? – Pensó que era indicado decirle a Harry acerca de su plan. Se equivocó. – No formaré parte de esto, ni loco lo haría.

-Vamos, Harry –Trató de convencerlo, pero él no cedería. –, Él destruyó mi vida, todo lo que amaba y quería. No puede salirse con la suya así como así.

-¿Cometerás un crimen de tal magnitud?

Zayn lo pensó por un tiempo pues aún tenía la oportunidad de retractarse, pero en retrospectiva vio todo el daño que David le causó a él y a Liam. El recuerdo de las cristalinas lágrimas de su amado Liam fue lo último que necesitó para tomar una decisión. Ahora habló con seguridad.

-Sí, Harry. No hay duda.

-Piénsalo bien, Zayn. Te meterás en problemas. – Su tono se tornó de preocupación, pero Zayn seguía con el semblante siniestro, frío y maligno que había adoptado desde la revelación.

-No hay nada que pensar, Harry.

Si bien no han pasado más cuatro días, Liam extraña a Zayn. Lo quiere a su lado, aunque lo odie por hacerlo sentir despreciado y poco amado, pero simplemente no puede sacárselo de su mente. Sus besos, sus caricias, sus ojos, sus palabras, su cabello, su cuerpo, absolutamente todo acerca de Zayn lo atormentaba y lo hacía desearlo con fervor, a la par que recordaba cada palabra y se imaginaba todo lo que hizo aquella noche con David. Era imposible el no amarlo, así como lo era odiarlo.

Niall decidió aplazar un poco su viaje a Estados Unidos mientras Liam se recuperaba de su ruptura, si es que se le puede llamar así. Él sabía lo que se sentía ser traicionado por alguien en quien confiaba y prefería no hablar de eso pero ver a su mejor amigo, con el cual ha vivido por tres años juntos, simplemente le rompe el corazón.

Muchos dirían que Liam es muy dramático, o que se lo está tomando a pecho, pero esos no han experimentado el engaño de la persona que se ama de verdad.

-Quiero que tomes el siguiente vuelo, Niall. – Dijo mientras mordía una bolita de chocolate que estaba rellena de caramelo.

-No lo haré, Liam.

-Es estúpido que retrases tus estudios por mí. – Terminó el chocolate.

-Liam, sé por lo que estás pasando, y sé de qué podrías llegar a ser capaz de hacer. Lo que menos quiero es que en Nueva York me llegue una llamada o un mensaje diciendo que te has suicidado o algo.

Liam soltó una pequeña risa. Era la primera vez que le veía sonreír desde que Zayn había cambiado. Y se dio cuenta que ha de ser por eso que él había cambiado. Por el peso de la verdad.