Acercándome a Ti |Goku × Número 17| ¡Completa!

》Capítulo quince : Poder elegir |Final|+Por favor leer Nota de Autor ♡

Cuando se hizo de día se encontró nuevamente en la total soledad.
Por unos instantes,en los que intentó acomodarse sin éxito en aquel sofá,llamó débilmente por su companía nocturna,pero no tenía caso alguno.Estaba sólo otra vez en su casa.
Desistió al fin y se refregó el rostro con mala gana,para ver así con más claridad,a lo cuál no pudo dejar de notar por el rabillo de la vista a una hoja que descansaba en la mesita frente al sillón,también yacían allí las tazas de chocolate de la noche anterior,inertes y obviamente heladas.
El tono de su celular terminó por despertar del todo al somniolento Saiyajin,quien estiró su brazo derecho aún con algo de pesadez.Apagó el dispositivo,y su vista viajó nuevamente a ése papel.

Oh,por supuesto que imaginaba que era lo que podía hallarse escrito,y no quería verlo en realidad,la sensación de que todo su hermoso sueño moriría de una vez por todas, le despojaban del valor necesario para enfrentarse a su realidad.
¿Por qué rayos,de todas las personas en el mundo,tuvo que enamorarse de alguien que lo tenía todo?,él era el obstáculo en ésa pareja al fin y al cabo,en todos los aspectos de su vida.

Negó con la cabeza,en un burdo intento por cortar aquella línea de pensamientos que sólo le hacían daño. Se levantó por fin del sillón,aún estaba semidesnudo.
Se duchó y vistió rápidamente, luego bajó hacia la cocina para preparar algo rápido de comer,la semana comenzaba de nuevo y debía trabajar lo más temprano posible si quería seguir manteniendo sus buenos niveles de ventas,depués de todo ser el hombre más fuerte no lo excentaba de tener gastos como todos los demás.

-Es tarde,rayos-guardó la caja de bento en una bolsa de tela y buscó velozmente su chaqueta beige con negro y su bufanda blanca.
Cruzó el living apresuradamente, pero se detuvo abruptamente,la nota seguía intacta en la mesita.
Suspiró y apoyó sus cosas en el mueble,tomó por fin,el papel entre sus manos,temblorosas.
No volvería,lo sabía.Aquella nota de puño y letra perteneciente a Lapis no podía ser otra cosa más que una despedida,una muy coherente si iba al caso,pero no dejaba de doler como los mil demonios.

Él mismo le había advertido que,
si seguían viéndose las cosas acabarían mal,y se arrepentirían por aquello.
¿Cómo olvidaría acaso,a alguien como el ojiazul?,tal vez Goku era el mayor en la extraña relación,
pero no dejaba de sentirse inundado por todas las emociones nuevas que experimentó durante el último año.Había aprendido tanto de el menor en su companía, a su lado desaparecía la sensación de tener que aparentar,Lapis lo escuchaba sin juzgarlo,le enseñó muchas cosas y con toda la paciencia y amor que jamás creyó merecer.

Un último suspiro salió de sus labios antes de leer.

¿Estoy mal,Goku? Quisiera saberlo,¿Soy una mala persona?Es lo más seguro,aunque pienses que no.
De no ser así no estaría escribiendo en éste papel,en vez de decírtelo en la cara.Si lo intentara creo que no me iría jamás.
Debo entonces tomar una desición y sabes lo difícil que puede ser,pero también sé que me comprendes bien,tanto que doy fe en que ahora mismo debes estar detestándome por que estoy replanteándome mi matrimonio.Estás durmiendo de una forma tan tranquila que ni te has dado cuenta de todas las veces que me levanté de éste sillón y he ido y venido,pensando.
Te ves tan hermoso en sueños,demonios Goku estoy en problemas.Cada trozo de mis días que pasé a tu lado valió totalmente la pena,nada me había encantado más que me hayas vuelto a buscar,con tus excusas tontas,me hiciste feliz,me haces feliz.
Sólo el tiempo me va a demostrar si tomé la opción correcta,y cuando lo sepa,haré lo que sea.
Y tu también lo sabrás.

Releyó el texto escrito unas cuántas veces más,hasta que cayó en cuenta de que llegaría tarde a su trabajo,su corazón iba a mil por hora por la pequeña carta que aún sostenía de forma temblorosa,rió bajito y dobló la nota cuidadosamente,tal cuál tesoro. Esperaría,para bien o para mal,de todas formas no dejaría de quererlo.