-Te voy a pedir que no te me vuelvas a acercar- dijo con mirada fría, eso me derrumbó.
-Harry, tienes que escucharla- dijo Danielle.
-No tengo nada que escuchar, Danielle ¡vámonos!- tomó a Danielle del brazo- haces mal trío aquí- me miró- igual que yo- se fue con Danielle.
Liam y yo nos quedamos solos, me senté a su par.
-¿Qué hora es?- dijo Liam.
-Mediodía- respondí sin fuerzas.
-Todo estará bien, Harry se dará cuenta de todo- tomó mi mano.
-Debo irme, de por sí ya tenemos problemas por no haber ido a clases hoy.
-Está bien- soltó mi mano.
Yo me levanté y salí del yate, el auto violeta que me había dado Harry seguía ahí, me fui en el hasta el departamento. No había nadie, seguro seguían en clases, no quería nada, fui a mi habitación y luego llegó Gemma. El día pasó muy lento hasta que llegó el día siguiente. Nada pasó, Harry no me hablaba, permanecía con Danielle, ella sólo nos miraba y siempre se quedaba perdida en el rostro de Liam, se notaba lo enamorada que estaba pero Harry no dejaba hablarle ni a él ni a mí. Estaba muy temerosa que algo le pasara a Liam, aunque después de eso tomamos distancia. Salimos de clases y yo me fui al departamento.
Narra Danielle:
Extrañaba mucho a Liam, todas las noches lloraba por él, deseaba llamarlo pero Harry no se me despegaba ni un segundo, él también estaba muy mal, se le notaba, ya no quería nada, no salía de su habitación. Ambos estábamos muy mal, pero mi mayor miedo era que le hiciera algún daño a Liam.
Estábamos en la casa, era de noche...fui a la habitación de Harry.
-Pasa- dijo desde adentro.
-¿Harry?- entré, la habitación era un desastre, no se miraba el piso de tanto reguero que había.
-¿Qué pasa?- Harry tenía los ojos hinchados.
-Hermanito- lo abracé y arrecosté mi cabeza en su hombro- no estés así.
-¡No estoy de ningún modo!- se levantó-¡Ni siquiera me enamoré de ella! Harry Styles nunca se enamora.
-Harry...soy tu hermana a mí no me puedes engañar.- Él bajó la mirada.
-No, Dani, a ti no- se arrodilló- La amo, y daría lo que fuera porque las cosas hubieran sido diferentes, no sé cómo viviré sin ella ahora.
-No tienes que hacerlo, búscala, arreglen esto- lo tomé de las manos.
-¡No puedo! Mi maldito orgullo no me lo permite, ella me traicionó y a ti también, ¿cómo puedes estar tan tranquila con ella?- se levantó.
-Es que las cosas no fueron como tú piensas, yo ya te lo expliqué- insistí.
-Eso fue algo que te inventaron.
-¡Maldita sea, Harry! ¡Nadie te inventó nada!- me levanté molesta y salí.
-¡Danielle!- me siguió Harry- ¿Qué pasa contigo?
-¿Qué pasa conmigo? ¿Qué pasa contigo? Te comportas como un niño, tú la amas, ella te ama y tienes la verdad frente a tu rostro pero tu maldito orgullo no te deja ver más allá, ¡Y no me importa si no quieres que esté con Liam! Ya estoy harta de que yo te malcrío con todas tus aventuras amorosas y tú me trates como una niña ¡Ya no lo soy! Que tú seas un patán drogadicto no significa que todos lo sean, ________(tn) te aceptó con tus defectos y tu pasado, todo lo que le has hecho lo pasó por alto, cuando estabas con aquella chica en el baño, que raptaras a su hermana, que la raptaras a ella, que le hicieras bromas pesadas, que te drogues, que mates ¡No le importó! Además te creyó todo lo que le decías y tu no puedes confiar en ella una vez ¿Qué clase de amor es ese? Y ni se te ocurra hacerle algún daño a Liam porque tendrás que pasar por mí primero, enójate todo lo que quieras ¡Yo amo a Liam y que tú no confíes es ________(tn) no significa que yo deje se querer a Liam- tome aire pues me había quedado sin él.
Harry quedó mudo, jamás le había contestado así, yo era muy tierna con él, pero no se podía interponer entre lo que sentía por Liam, me fui a mi habitación, cerré la puerta y me solté en llanto, todo esto era terrible, nunca me había puesto en contra de mi hermano pero no había de otra, ya no era una niña y debía defender mis sentimientos.
Narras tú:
Pasaban los días y todo era rutinario, sólo iba a clases y regresaba y así cada día, ya ni hablaba con Liam. A Harry y a Danielle los miraba muy distanciados, casi no se hablaban todo se miraba mal...en decadencia.
Ya habían pasado 15 días desde aquel día en el yate y mi vida cada día se tornaba peor. Era de noche, estaba toda hecha lágrimas en la terraza del edificio, recordando aquella vez que estaba con Harry...Me asomé por el borde y miré hacia abajo los autos y la calle se miraban lejos, el viento soplaba y la noche era oscura...se me ocurrió una idea locamente suicida.
