Día 3

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Corro por el pasillo se me ha hecho tarde, tengo que firmar mi calificación con la maestra Kagura, estoy que hecho fuego por la boca, enserio estoy jodido, de nuevo esa maestra me ha arruinado todo, esta mañana durante el desayuno.

-padre recuerdas que el sábado me voy de viaje con mis amigos- le digo comiendo mis huevos revueltos.

-te l has pasado mencionándolo todos los días- dice y rodo los ojos- sin embrago, espero hayas guardado dinero para ello, porque después de ver el 6 en tu calificación, ni creas que te daré algo para gastar.

- ¡QUEEE! -grito exaltado- pero padre no he reprobado.

-en efecto, pero de 9 y 10 que siempre te dedicas a tener ahora que tienes novia de repente bajas la calificación- me dice sin levantar la vista.

-Rin no ha sido la causa, es todo culpa de esa maestra- me quejo dejando de la mala gana el tenedor en el plato.

-la maestra no es quien hace la tarea Inuyasha- responde mi padre sin alterarse- mis amigos y yo siempre intercambiamos las boletas, sabes qué vergüenza me he llevado al enseñar la tuya en esta ocasión.

- ¿enseñas mi boleta? - pregunto sorprendido.

-eres mi orgullo Inuyasha, me gusta presumir lo excelente hijos que tengo- me dice y por vez primera en toda la mañana me mira.

-yo, no sabía- digo algo apenado, si mi padre supiera que todas esas calificaciones han sido compradas, trago saliva.

-es tarde, sino se apresuran no llegaran a tiempo- dice mi madre Izayoi.

-me darás dinero cierto- pregunto por última vez.

-no- me dice firme y sé que no cambiara de idea.

Ahora que demonios hare para obtener dinero, ni que me vaya con mis amigos y pretenda que ellos me paguen todo, será humillante para mí, subo la escalera a prisa, cuando escucho una voz, es de ella, la maestra Naomi, me detengo y la veo hablar por teléfono.

-señor Chan apenas salga de mi trabajo depositare el dinero, si ya tengo todo, bien 10 mil como quedamos- escucho decir.

Subo corriendo y paso a su lado, ella me mira ceñuda pero no le doy importancia, llego al salón donde están ya firmando, espero mi turno y paso, salgo al patio, ya a estas alturas no tenemos clases, al día siguiente se termina el curso, sonrió cuando me siento en la mesa con mis amigos.

-y bien chicos están listos- dice Rin sonriendo.

-la maleta la tengo preparada, el sábado nos encontraremos muy temprano en el aeropuerto- menciona Sango.

-muero de sed, me acompañas-pregunta a Sango- quieren ustedes algo chicos- pregunta, pero negamos.

-tienes una cara amigo- me dice Miroku.

-diablos mi jefe me niega darme dinero para ir al viaje- digo fastidiado.

-y entonces, pero si no reprobaste- me dice sin comprender aquello.

-pero tuve 6-digo- utilice mis ahorros para comprarme el boleto y pagar mi parte del viaje, no me queda nada.

-tranquilo nosotros te apoyaremos- me dice dándome un golpe en el hombro.

-acaso crees que se verá cool que mi novia me pague todo- digo realmente molesto.

-entonces que podemos hacer, de donde sacamos mínimo 10 mil para pasarla en grande- me dice y sonrió al pensar en la estúpida maestra por la que estoy metido en este embrollo.

-se lo merece por maldita- murmuro y Miroku sonríe al contarle mi plan.

En la sala de maestros Naomi deja su bulto mientras sale con Kagura a comprar algo en el comedor, los alumnos corren de un lado a otro, algunos ya ni se presentan, otros prefieren irse de pinta, las maestras compran y están regresando cuando Rin corre a ellas.

-maestras por favor ayuda, mi amiga se acaba de desmayar- dice preocupada.

Mientras tanto en la sala de maestros Inuyasha se mete a escondidas por una ventana, el lugar esta vació, llega al cubículo que le pertenece a la maestra Naomi y sin remordimiento saca el dinero que se encuentra en un sobre amarillo, lo tomo y sale del lugar sin ser visto.

-lo tienes- pregunta Miroku ayudándolo a bajar.

-tendremos que brindar por la maestra Naomi por patrocinar nuestras fiestas- sonrió y nos vamos de ahí.

Las maestras dejan a Sango en la enfermería y regresan al salón de maestros, por la tarde una vez que el timbre suena la maestra, camina sonriendo por el pasillo, Inuyasha y sus amigos desde el tercer piso la miran subir a un volcho blanco, arrancar y alejarse del lugar.

-lo hicimos bien- sonríe Rin besando a Inuyasha.

-fue genial, estamos listas para actuar en novelas-menciona Sango y se abraza a Miroku.

-entonces este verano tendremos las mejores vacaciones- tercia Miroku-gracias a la maestra Naomi.

-excelente vacaciones- sonrió de medio lado y sacudo el sobre en mi mano.

Nunca nos percatamos del par de ojos que nos miraba desde la puerta, escuchando nuestra platica.

Continuara…

Diario de un joven enamoradoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora