Las völvas. Antiguas hechiceras nórdicas que eran las portadoras de la voz de Odín y fueron las que predijieron el Ragnarok en el Völuspá. El crepúsculo de los dioses.
Segun Coriander y Devendra eran probablemente las únicas que nos ayudarían, pero su hogar quedaba en las cavernas, junto a los túneles abandonados de minería. Afortunadamente la casa del brujo no quedaba tan lejos de las cavernas, tan solo a un día hacia el éste, casi llegando a la costa.
-Freya-dijo Daemonium-¿Me escuchas?
-No, lo siento, estoy algo perdida-ladee mi cabeza.
-Las Völvas son muy quisquillosas y odiosas, procura no hablar, a menos que te pregunten directamente algo.
-Aunque seguro te tratarán bien por lo que eres-dijo Cori.🍃🀄🍃
Estabamos casi llegando, Daemonium había intercambiado lugares con Devendra para poder descansar un poco y Cori seguía de copiloto. Todos estaban tratandome como a una estúpida quinceañera que no sabe hacer una mierda.
Finalmente paramos en el centro del bosque, a unos metros de las cavernas y seguimos a pie, luego de andar un rato a lo lejos entre la oscuridad se podía diferenciar una luz verde agua emanar desde el centro de las cavernas, de a poco las vigas de la minería comenzaban a hacerse presentes en nuestro camino, cada vez más corroídas y rotas. Devendra venía delante de todos, supuestamente él había decidido acompañarnos para hablar con las brujas y ayudarnos en lo que pudiera.
Ya estando parado frente la gran puerta de cristal él se acercó y la abrio lentamente, creando un suspenso que ni yo sabía que podia existir. A lo lejos se podía distinguir las figuras de tres völvas sentadas sobre una especie de escalón de piedra, frente a ellas habían rendijas en el suelo que emitían vapores hacia ellas. Muy mística la cosa.
-Los estabamos esperando-dijo la que estaba sentada a la izquierda.
-La hermana Heria predijo que vendrían por ayuda-dijo la de la derecha.
-Hermanas Völvas, necesitamos de su ayuda para contactar con el alma de un oráculo-dijo Devendra apoyandose en su rodilla.
-Su madre-me miró la del centro-Hay que traer el cristal Heria.
Ésta se paro de su pedestal y camino hacia la oscuridad trajo una caja de madera labrada y la abrió mostrandonos un pequeño cristal violeta, lo colocó en la cima de un espejo a un costado de nosotros y se acercó a tomarme la mano para llevarme con ella.
-Ahora entrarás al mundo del espejo, ahí estará tu madre-dijo la mujer del centro-Tu tiempo es limitado valquiria, procura no perderlo.
Asentí y camine hasta el espejo, estire mi mano para comprobar que podia atravesarlo, ya estando finalmente dentro mire a mi alrededor y noté que estaba en un laberinto cubierto de nieve, una silueta volo sobre mi cabeza al mirar vi un búho blanco, volví la vista al frente y había un árbol, el búho se paro en la rama y picoteo una manzana que brillaba de una forma particular.
La fruta cayó a mis pies y al tomarla apareció ella frente a mí.
-Madre...-murmuré sin aliento.
Estaba igual a como la recordaba, con su vestido blanco, sus labios rojos y su cabello negro.
-Freya... Ten cuidado de la gente con la que te rodeas, muchos estan contigo solo por conveniencia, te ocultan cosas, secretos... Dhalia no es lo que crees-negó.
-Mamá...-volví a la cueva.
-Tu tiempo se acabó-dijo la de la izquierda.
-Tienes en tu mano la solucion de tu problema-dijo Heria-Ese fruto te quitará tu bloqueo.
Devendra y Coriannder asintieron y comenzaron a avanzar hacia la salida.
Nuestro camino se había acortado. Pero Dhalia tenía algo que ver...
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UDØDE. [Impuros]《COMPLETA》
Paranormal"Hija mía, tú lo sabes del mismo modo que yo; no hay hombres, sino ideas; no hay sentimientos, sino interés."