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KyungSoo, con las ojeras marcadas y un dolor que le atravesaba la cabeza a causa de las cervezas de la semana, se encontraba en su lugar de trabajo. Había hecho un esfuerzo descomunal por mantener a Lu Han y a MinSeok fuera de su mente, pero al entrar en la sala de profesores, no pudo evitar buscar a su colega, ex esposo de la persona que le gustaba, sin embargo, no lo encontró ¿Dónde estaba? Con el ceño fruncido se acercó a otro compañero y tocó su hombro.

—¿Dónde está Kim MinSeok? —preguntó. Se trataba del profesor de Artes. —Tengo entendido que hoy tenía curso.

—Sí, así es, pero el director le dio día libre —Le respondió su compañero —Se enteró que MinSeok tiene un hijo, y el pequeño tenía campamento familiar en el área de las cabañas a las afueras de Seúl, y sabes que nuestro director tiende a dar días por esas causas.

KyungSoo, al oír esas palabras, se puso muy nervioso. Esa mañana, antes de dirigirse al trabajo, había pasado por la librería de su amigo con la intención de poder verlo, pero no lo encontró, en su lugar estaba el padre de éste, el señor ZiTao.

Su cabeza no tardó en atar todos los hilos. Lo más probable era que, tanto Lu Han como MinSeok, se encontraran juntos en el campamento al lado a su hijo... como una verdadera familia y como las escuelas generalmente lo requería.

—Dile al director que me disculpe, pero hoy no daré clases —KyungSoo no lo pensó dos veces, y antes de darse cuenta ya estaba fuera del colegio, arriba de su auto, manejando a toda velocidad, sin importarle la posibilidad de perder su trabajo.

Había estado pensando mucho en las palabras de su amigo, JunMyeon, y estaba decidido... Le diría a Lu Han lo que sentía por él. No podía permitir que la persona que le gustaba y a la cual planeaba confesarse pasara un fin de semana junto a MinSeok, eso era una desventaja.

No podía perder más tiempo. Iría hasta el campamento.

***

ZiTao, el padre de Lu Han, se encontraba atendiendo la librería junto a su esposo, YiFan, un hombre un poco más alto que él, de cabello rubio, ojos pequeños y labios finos rosas. Pero ZiTao no estaba prestándole atención, estaba demasiado preocupado y tenso para eso, y es que sabía exactamente donde estaba su hijo.

—¿Qué es lo que te preocupa tanto, Tao? —le preguntó su esposo mientras se acercaba por la espalda y lo abrazaba.

—El lugar del campamento de SeHun es...—YiFan soltó un suspiro y se agachó un poco para besar a su pareja. Normalmente le hubiera dado un golpe en la cabeza para que despabile, pero todo tema que involucre Lu Han era delicado.

—Lo sé, es el lugar donde vive el chico del que eres una especie de guardián ¿Verdad? El hermano de MinSeok, JongIn.

YiFan estaba al tanto de todo lo acontecido hasta aquel momento y de las sospechas de ZiTao, pero no le gustaba meterse mucho en esas cosas, ya que consideraba que sus problemas eran aparte, después de todo los chicos eran adultos y no tenían porque entrometerse, sin embargo, eso no quitaba que le doliera ver a su marido morderse el labio hasta lastimarlo.

—Sabes el porqué lo he ayudado todo este tiempo.... —Los ojos de ZiTao fueron a sus manos, un gesto que demostraba lo nervioso que estaba.

—Hay algo que no entiendo de todo esto y te lo he dicho ciento de veces ¿Por qué no le preguntas a tu hijo si ese niño es tu nieto o no?

—Mierda, Fan. Tengo miedo. Si ese niño resulta en verdad mi nieto... mi hijo de verdad seria un desgraciado ¡Es el hermano de MinSeok!

La razón por la cual ZiTao no exigía la verdad era simple, era un mísero cobarde. Por un lado, quería saber si el pequeño YiXing era o no su nieto, por otro, si lo era, significaba aceptar que su hijo había tenido un comportamiento más espantoso del que había pensado. Traicionar a alguien con su propio hermano era algo atroz.

Love Again [XiuHan/ LuMin]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora