Nubes Rojas

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De nuevo. Una vez más no podia evitar imaginar, aquel misterioso hombre que observa llegar y que no sería la última también, tanto desconocimiento y curiosidad es insuperable.

La torre se admiraba tan pequeña desde la gran distancia por el terrible clima de la lluvia, muchos rayos opacando el cielo entre la oscuridad. Tan bizarro sin la ayuda del Byakugan que detallaba a la perfección lo que ocurría en el interior.

—Konan-sensei —aparto la vista normalizando la mirada.

Tal orden no era capaz de comprender, no entendía por qué no podía estar allí junto a ellos, realmente creía que debía existir una gran razón y no la que le dio Pain-sama. No era difícil saber que era ella quien estaba detrás de eso y Nagato-niisan la apoyará.

Visualizar ese gran chakra en un cuerpo delataba ser muy fuerte, quizás por eso no era de agrado para Konan-sensei que como Pain-sama estuviera alli.

«Ademas está ese otro chakra. Ese otro chakra es distinto y oscuro»enfoco la vista siendo imposible ver más que la lluvia caer.

—Sin embargo esa identidad no aparecio esta vez como la anterior...

Una presencia fácilmente distinguible por sus dos extensiones atrapamoscas que envuelven la cabeza y su parte superior del cuerpo dan una apariencia vegetal.

«Es tenebroso»sacudo la cabeza quitando tales pensamientos negativos.

La escena donde ambos seres eran intangibles sonaba tan impresionante.
En definitiva no eran comunes ni aun entre ninjas.

«Demasiado fuertes»reconozco a punto de sentirme intimidada.

—Pain-sama está allí —recuerdo–. Además ese hombre...

La imagen de su apariencia mostraba seriedad y compromiso.

Pues distinguía a pesar de la distancia, la larga capa de color negro con interior rojo y cuello largo para cubrirles el rostro decorada con nubes de color rojo, el mismo uniforme del cual Pain-sama viste junto a Konan-sensei, por lo que compartir el mismo objetivo no lo hacía ver una mala persona sin importar el hecho de ocultarse tras esa sencilla mascara.

—Me pregunto si sabes el significado del vestuario —divago sabiendo que no son de aqui.

«Ninjas renegados, ninjas de un lugar desconocido o quizás tomados por muertos»mi conclusión respecto a ellos circulaba en esas opciones levantando los dedos.

Resuena de imprevisto un gran trueno solemnemente.

«En verdad que son demasiado fuertes»queda grabado su flujo de chakra en mí cabeza profundamente.

Sujeto las piernas frenando los movimientos de mis pies, la tentación de saltar era imposible debido a la cantidad de agua escurriendo como un río. Ahora mismo problemas era lo último que debía tener. Estaba de por más advertida.

—Okaa-san se molestará si tardo más...

Me alegraba que la mujer después de lo ocurrido no haya cambiado su comportamiento. En verdad me hacía sentir feliz.

Paro tras el cielo iluminarse por un relámpago secundado por otro trueno, observo unos instantes detrás a la torre.

«No importa si oculta quién es, yo puedo verlo todo»me recuerdo sin temor.
.
.
—¿Quiere que le ayude con esa bolsa Okaa-san?

Menea la cabeza en respuesta de nuevo.

—Permiteme que te ayude con esto al menos —replica—. Has hecho ya mucho por mi.

—No hay problema Okaa-san, el hecho de que me permitas estar en tu casa no es comparable a este trabajo. Al contrario soy yo quien está agradecida con usted.

Yo AkatsukiDonde viven las historias. Descúbrelo ahora