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Celos
Del latín zelus 'ardor, celo', 'emulación', 'celos' y este del griego zêlos, derivado de zeîn 'hervir'.

Pov's Helena.

-Así que ella era la mujer que te tenía como idiota.

-Ya vas a comenzar, Angelo.

-¡No me llames así!

Afrodita y DeathMask intercambiaron algunas palabras ofensivas antes que él cangrejo se marchara molesto.

-Es un idiota, ¿Cómo pudiste fijarte en él,  Helena?

-Ni yo lo sé. Deberíamos informar al Patriarca sobre el espectro.

-Dejamelo a mí. Si le contamos la verdad nos va a colgar por fugarnos del Santuario.-Me bajó de sus brazos con una sonrisa.- Ahora hay que saber como entrar a tu habitación sin ser vistos.

-Tengo una idea.-Lo jalé del brazo en dirección a la torre sur, donde estaban las cámaras importantes.

-Fiore, te recuerdo que no tengo alas. No soy Aioros.

-No, tonto. Observa.

Caminé entre las enredaderas hasta llegar a un grabado de piedra que ilustraba dos alas.

-Tempo.

La pared comenzó a moverse dejando una abertura que daba acceso a la fortaleza.

-¿Cómo lo haz echo?

-Creo que yo los construí. Tal vez era para una ruta de salida para Athena, aún mis memorias no estan tan claras.- Continuamos por el pasadizo a oscuras mientras nos tomabamos las manos. Dita se quebaja gracias al polvo y las telarañas que nos topabamos.- Si mal no recuerdo esta puerta lleva a la sala principal del Patriarca y esta a la camára de Athena.

-¿Y dónde esta la tuya, querída? Me quiero largar a darme un buen baño.

-¿La que dice Nike te da una idea?

-Fiore, yo no sé leer griego antiguo. No soy Camus.

Bufé desesperada y entramos a la puerta que decía mi nombre. Levantamos un montón de polvo al abrir la puerta que daba a mi prador. Había sido una buena aventura pero la presencia de ese espectro en especial me había movido los nervios.

-¿Primero Milo y ahora Afrodita? Ya fue suficiente de tus salidas secretas, Helena.

Cerré los ojos al escuchar de la voz de Shaka, estaba enfadado.

-No eres una prisionera como para fugarte de esa manera. Nos tuviste preocupados.

Esa era la voz de Mu, abrí mis ojos para toparme a las dos pasivas de la Elite con el ceño fruncido y los brazos cruzados. 

-Solo fuimos a las cascadas termales, no esta lejos de aquí. Exageran.-Hablo Dita poniendose enfrente de mi.

-El problema es que no avisa donde esta.-Mu habló más calmado encarando al peliazul.- A la próxima que quieran salir pidan permiso al Patriarca.

Shaka empujo levemente a Dita para tomarme de la mano arrastrandome de vuelta a mi probador. Cerro la puerta con seguro para acorralarme.

-Si gritas te quito tus sentidos uno por uno.

-Que manera tan pendeja de hablarme.

-Gracias a Shura puedo compreder tus palabras, Helena, y te aconsejo que te comiences a comportar como lo que eres "la señorita Nike".

-Ya vas a empezar.-Rodeé los ojos ante su reproche, siempre tenía que seguir el protocolo.

-Es la verdad. Ya no eres una humana común y corrientes ahora que sabes tu verdadera naturaleza hay una responsabilidad en tus hombros. Sin mecionar la próxima guerra santa. Deja de comportarte como una niña.

¡Victoria! |Saint Seiya|Donde viven las historias. Descúbrelo ahora