Clown ↔ MYG ff. (terminada) ✔️

20. you make my senses fluster

Finalmente estábamos a punto de partir hacia el tan esperado viaje el cual estaba ansiando que llegase pero a la vez no, en parte porque necesitaba un buen descanso después de tantas semanas de actividad y ajetreo en la agencia como parte de los entrenamientos pero también me inquietaba que el día de la graduación de Yoongi se acercaba cada vez más y eso era sinónimo de lo que obligatoriamente tendría que ser una despedida, ya simplemente faltaban pocas semanas para que nuestros caminos se vean divididos.

Desde que nos reconciliamos he intentado obligarme a no pensar en eso ni a contar los días que nos restan, pero además de que eso inevitablemente pasaría, justo el mismo día de su graduación, la empresa ha planeado la mudanza hacia un dormitorio privado mucho más cercano al edificio donde entrenamos para una mejor convivencia entre las otras cinco trainees y yo con quienes se ha formado el nuevo grupo. Era imposible no tener un calendario en mi cabeza las veinticuatro horas del día así como también estaba tratando de buscar la manera en que ambos acontecimientos no colisionaran y poder estar presente en ambos sin afectar al otro...

Pero cada día se estaba volviendo más y más imposible, menos y menos probable. No podía ausentarme a algo tan importante para Yoongi como lo era su graduación porque puede que sea ese el ultimo día en que nos veríamos y debía estar allí al menos para apoyarlo, pero tampoco podía pedir que postpusieran el día de la mudanza precisamente porque no era yo quien la planeaba sino la agencia, por lógica no debíamos causar ese tipo de retrasos en la agenda que el mánager que nos asignaron y el ceo han planeado meticulosamente. No quería causar problemas en la empresa, tampoco quería generar conflictos entre el grupo, quería lo menos posible ser un obstáculo para que las cosas funcionasen y estaba segura de que no me permitirían ausentarme ese día ni mucho menos detener los planes por algo que seguramente todos considerarían una nimiedad pero que para mí y para Yoongi era un día decisivo.

Él no tenía ni la más mínima idea de esto, desde el día que fui borracha a su casa él está contando con que yo asistiré a su graduación sin ningún pero de por medio y me aterrorizaba tener que decirle que seguramente no iba a poder estar allí, me dolía decirlo pero probablemente eso resultaría una desmotivación para él y ahora mismo, lo que menos deseo es que por mi culpa, él cambiase de opinión a estas alturas del partido. Cuando él está tan entusiasmado en poder comenzar a estudiar esa carrera por la que tanto sueña.

Pero hoy estaba dispuesta a borrar esa gigantesca cantidad de dilemas que revolotean en mi cerebro y estaba planeando pasar dos días de descanso en compañía de las personas que han hecho de mi adolescencia una era menos mierda como lo son Xiao, Saeron y Jungkook, y del chico que me ha movido el universo entero como lo es Yoongi. Los próximos dos días estaré obligándome a no pensar en todo lo que me atormenta y si lo hago, le diré a Xiao que me lance una chancla, debo aprender por las malas o no aprendo.

―Hija, me gustaría hablar contigo, ven aquí. ―detuve mi paso hacia la sala de estar donde todos me esperaban cuando la voz de mi madre habló a mis espaldas captando mi atención de inmediato y obligándome a soltar las dos maletas y el pesado bolso que iba a llevar al viaje escolar de este fin de semana.

Todos estaban seguros de que con solamente un bolso iba a poder sobrevivir un fin de semana en el campo, pero yo perfectamente estaba al tanto de que es mejor tener mis maletas y no necesitarlas que necesitarlas y no tenerlas, así que de alguna manera me llevaré todo lo que ya empaqué. No me llevo a Wiheom solo porque no se admiten mascotas pero seguro que lo hubiese traído conmigo también.

Me giré para encarar a mi madre quien estaba de pie en el pasillo que llevaba a la cocina con un semblante algo extraño para ser ella. ¿Ahora qué clase de paranoia se le habrá metido en la cabeza a esta mujer? Seguro que querrá que empaque otras dos chaquetas y compré un tubo extra de repelente de mosquitos, supongo, eso es lo que cualquier madre haría ¿No? Aunque pensándolo bien, esta señora nunca ha sido como cualquier madre, estoy entrando en paranoia yo también, joder.