Caminaba por una de las calles que, según Flor Habif es una de las más conocidas de acá y más transitadas ya que hay restaurantes, shoppings, heladerías y las típicas tienditas que venden de todo, tipo Todo Moda o Isadora de Buenos Aires. Agradezco haber llevado suficiente plata como para poder comprarme bastantes cosas. Entré a un restaurant y pedí pastas, fideos con salsa blanca y abundante queso y una gaseosa, si vieran esto lo de las leonas me matan. Pero creo que está justificado, me moví todo el día y recién llego de un vuelo se quince horas, necesitaba carbohidratos.
Una vez que terminé mi cena, a las 20:27, sí, super temprano, seguí caminando, me llevé la gaseosa grande que había pedido y mientras caminaba tomaba de la bombillita. Pasé por una de las tienditas que hablaba anteriormente, compré un par de cositas, sumamente innecesarias, pero siempre, Pía comprando cosas que solamente hacen bulto en la valija. Una remera que dice "Polonia" y un shot de tequila y un porrón de cerveza al lado fue lo que elegí para mí papá. Busqué algo para mí hermano y mí mamá, pero no encontré nada. Y cada cosa que veía me hacía acordar a él y lo poco, se ve, que le importé.
Miré un par de shows callejeros que había ahí, gente bailando, tocando instrumentos, comediantes (que no entendía nada ya que hablaban polaco y, tengo cero polaco), payasos que en vez de ser tiernos son espeluznantes y mimos. Una vez que sentí que todo lo que comí se había digerido, fui a una de las tantas heladerías de la zona a pedir un milkshake.
-Hi.- Digo con una sonrisa, pidiendo por dentro que porfavor hable inglés.
-Hello! what will you order?- Dice muy amablemente la chica.
-could you give me a vanilla smoothie.- Hasta que recordé que, acá no hay dulce de leche y casi me largo a llorar.- With cream, caramel sauce and cookies?- Le digo y mi pronunciación no me falló en este momento. Agradezco internamente
- Which are two please.- Dice una voz atrás mío que la conozco hasta hablando en sueco. Lo odio.
La chica asiente y anota todo en la computadora, me doy vuelta, lo veo, el me sonríe, como si nada hubiese pasado y yo me doy vuelta de nuevo para escuchar a la chica cuando me diga lo que tengo que pagar y poder esperar.
-Can you tell me their names?- Dice
- I'm Pía.- Ella no entiende, así que proceso a deletrearle letra por letra mi nombre.
- And i'm Julián.- También tiene que deletrearle su nombre.
- $17,89.- Dice la chica y yo le estoy por pagar pero una mano se interpone por atrás mío y le da más rápido que yo la plata.
La chica acepta y yo aprovecho y me voy. Salgo de ahí, su indiferencia, su forma de simular que nada paso no esta bueno.
-Pia, para.- Me dice él atrás mío.- Perdoname.- Dice al fin.- Vos viniste a verme a mí y yo no te di ni bola. Perdón enserio.- Levanto los pulgares en señal de "Esta bien" Cuando en realidad nada esta bien. Me siento en el sillón individual, esperando mí batido que, por suerte no pagué.- Eu, dale, no seas forra, viniste por mí, necesito besarte porfavor.- Dice y por dentro me derrito pero en realidad, por fuera, estoy como si nada hubiese pasado, como si no hubiese dicho lo que dijo. Pensaba que me iba a querer abrazar, pero no. Mi plan no era aflojar tan fácilmente. Había dolido eso. Agarré mí teléfono y abrí Instagram. Videos de gente crack maquillándose son mis favoritos.
- Pía.- Dice un chico polaco, lindo. Me llama y voy en busca de mi pedido, también siento con Julián se levanta del asiento y me sigue.- Thanks sweetie.- Ay me muero, mira que me va a decir gracias dulzura. Es un bebito.
- Thank u cute. Bye.- Le sonrío, agarro mí pedido y me voy sin esperar a Julián.
Hago el camino para el hotel de nuevo, sola por suerte todo el camino. Mañana tengo para recorrer y pasado mañana hay partido. Obviamente voy a ir, aunque sea a ver a Cris, Sosa, Pepo, Adol y Eze. Evitemos a Julián
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