Al Estilo del Mal

El preludio

Capítulo 20

El preludio

.

.

.

- Sin deseos o miedo, ¿Qué más tienes?

- Bueno, creo...creo que hay muchas cosas, ¿Familia? ¿Uuh, como se dice...un legado? Mucha gente dice que mi legado será el Gungi, aunque no sé muy bien lo que eso signifique.

- Un legado- repitió Meruem, conociendo el concepto de la palabra pero suponiendo que para la jugadora de Gungi significaba otra cosa- ¿Eso es todo lo que esperas del mundo? ¿Qué otra cosa, a parte del Gungi, es preciada para ti?

- Disculpe, discúlpeme, rey, pero tantas preguntas hacen que mi cabeza pique, ¡Me hace preguntas muy raras! Le suplico me perdone si le subí la voz, es que no entiendo porque me dice estas cosas, debe saber que soy una bruta...

- Lo sé- Meruem jugo con la ficha entre sus dedos, dudando sobre qué hacer. Komugi le cambio su perspectiva con respecto al juego y la mente humana, ya no sabía que hacer o como seguir- Me preguntaba cuál era la visión de los humanos como tú.

- Aun no entiendo.

- El potencial desperdiciado, la voluntad puesta a una meta inalcanzable- Pensó en voz alta, mirándola fijamente- Dado que tú posees una mente simple, sé que puedes darme una respuesta simple.

- ¡¿Yo?! ¿Responder al rey? No, no, se confunde, con perdón de la insolencia, yo no puedo responder a nada inteligente.

- Responde- Mando, a lo que Komugi dio un respingo asustada- ¿Por qué los humanos se confortan con este mundo, tal y como esta?

De lejos, Pouf sentía el corazón estrujando en su pecho con tanta fuerza que podía sentir los trozos cayendo lentamente a su estómago, acumulándose en una hiel insoportable. Dejo de interesarse en el libro en su regazo cuando el Rey Meruem comenzó a interrogar a la mujer ciega, filosofando con esa tonta, el interés de oír sus opiniones...que chiste.

- No sé, la verdad no sé- respondió con sinceridad, recordando su propia vida- Es una pregunta muy grande para mí, que no entiendo de temas que usted seguro trata a diario...yo no...

- Dame tu opinión, la primera que tengas.

- Opino que...la gente vive, porque quiere ser útil para alguien.

- Suena a la cadena alimenticia, yo te estoy preguntando porque los humanos raros como tú y los ordinarios, creen y afirman que este mundo es suyo y luchan por él.

- Sera porque... ¿Porque no tenemos otro mundo en el que estar?- Komugi se rasco la cabeza, sin entender a donde quería llegar el rey de imperiosa voz - ¿Por qué todos querremos un hogar?

- Nacer en un lugar no significa tener derecho sobre él.

- ¡Ah, ya sé!- Ella alzo un dedo, emocionada por encontrar una respuesta antes de calentársele la cabeza del esfuerzo mental- El mundo es un beneficio que se debe aprovechar.

- No me esperaba un pensamiento como ese, viniendo de ti- afirmo Meruem, hasta hubiera tolerado que le hablara de la paz mundial, el amor y la justicia. Una vez más, Komugi resulto ser altamente impredecible.

- Es lo que decía el ex Líder Supremo, lo repetía mucho y todos aplaudían. A ver, la Tierra es un producto, la vida está completa con el sol, la tierra y la poesía. La gente tiene que extraer el jugo de ella...

- Coincido.

- ¡Usted si entiende! ¿Puede explicarme que significa eso? Nadie me lo aclaro nunca, decían que era cabeza dura, si le molesta contarme yo no...