— ¿Están ricas? — Preguntó Yoongi al rubio que se mantenía comiendo sus alitas de pollo que había pedido.
Ya se encontraban en el restaurante, uno que Yoongi había escogido especialmente puesto que sabía que la comida que servían era exquisita.
— ¡Demasiado! — Respondió alegremente Jimin.
Yoongi no paraba de saltar internamente por la tanta ternura que aquel chico podía causarle, todo con acciones tan pequeñas.
— Te dije que te gustaría venir aquí. — Sonrió el castaño y el rubio asintió muchas veces.
— Gracias por traerme. — Dejó a la vista una sonrisa que Yoongi sabia, ahora era de él y sería parte de sus días, haciéndolo ser más feliz todavía.
Ambos disfrutaron de su respectiva comida hasta finalmente darla por concluido.
— ¿Y te quedarás con tu mamá hasta la noche? — Preguntó Yoongi después de minutos.
— Sip, si me dejan si, quiero acompañarla.
— Todo saldrá muy bien pequeño, ya verás que todo irá muy bien. — Estiró su mano para así, sobarla.
— Espero que si. — Sobó esta vez él, la mano del contrario entre la suya.
Sonrieron y llamaron al unísono a la señorita para que les diera la cuenta.
— Yo pagaré, ni te atrevas. — Le retó Jimin con la mirada. — Tú has hecho muchas cosas por mi.
— No, pagaré yo.
Jimin negó y entre sonrisas y ese pequeño dilema, Jimin terminó pagando por que se adelantó con la señorita.
——— 🍥 ———
— Entonces, ¿ya puedo pasar a verla?... ¿se encuentra bien cierto? — Preguntó Jimin al Doctor — Namjoon— que cordialmente le había recibido de vuelta.
— Así es, sígame.
Yoongi le prometió a Jimin que estaría allí para él, mientras que este, le prometió que saldría en menos de 20 minutos solo para asegurarle que todo estaba bien.
— Te miro al rato. — Yoongi sonrió, haciendo que aquella sonriera fuera de fuerza para el rubio.
Jimin asintió y siguió al Doctor, para así poco después ingresar a la habitación asignada de su madre.
Su madre se encontraba pálida, más sin embargo su color poco a poco estaba recobrando y renaciendo nuevamente.
— Hola mamá. — Jimin sonrió con melancolía.
— Si necesitas de algo, estaré por estos pasillos. Hasta luego. — Mencionó el Doctor mostrando ligeramente entre una sonrisa, sus hoyuelos.
Jimin asintió mientras hacía una reverencia.
— Si, gracias.
El doctor ya se había ido y Jimin ya se encontraba dando pasos lentos hacia su madre la cual con mucha fuerza, se mantenía despierta.
— Hola... cariño. — Su mamá sonrió y lo invitó a acercarse más para que ella pudiera tocar su adorable mejilla.
— Mamá...
Sin poder evitarlo, la caricia que ahora yacía en su mejilla, lo hizo nublar la vista y soltar pequeñas lagrimas que fueron resbalando sin detenerse por ambas mejillas.
— Está bien... cariño... estoy... bien. — Acariciaba con sumo cariño y melancolía a su hijo.
— Perdóname... yo... yo debí de haberte cuidado más. — Lagrimeó más mientras sollozaba.
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My Savior [Yoonmin]
Romance🍥;; Jimin es un chico que sufre de falta de autoestima debido a su físico, con un pasado que abrió paso a la agonía y soledad. Con tantos problemas que suceden en su vida con el paso del tiempo... él solo quiere ser feliz nuevamente, no más insegur...