My Savior [Yoonmin]

🍥 30. Adiós definitivo.

A la mañana siguiente, después de haber ido a visitar a su madre — la cual se tomó todo con calma, sorprendiendo quizá un poco al rubio, accedió a todo brindándoles la ubicación de susodichos papeles — Jimin y Yoongi regresaron nuevamente a la casa. Para así, buscar rápidamente tales documentos y dormir, pues aquella tarde-noche había sido cansada para el rubio, después de haber visto a su padre, tratando de dar excusas... o "razones", que ya no le importaban, le afectaba.

Yoongi se encontraba profundamente dormido en el sofá, cuando golpes en la puerta llegaron instantáneamente a sus oídos.

Perezosamente, se dirigió con lentitud en sus pasos hacia las escaleras y tocar la puerta que se encontraba frente a él.

— ¿Hmm...? — Se escuchó detrás. Ligeramente audible.

— Están tocando... — Bostezó. — Creo que es tu padre... — Frotó sus ojos con sus tibias manos.

— Ah... si... uhmm... ya voy. — Contestó el contrario aún dentro de sus sabanas, para así irse levantando levemente, con toda la pereza del mundo. — ¿Oh?... — Resaltó para si mismo, para así abrir la puerta de inmediato. — Yoongi... — Llamó mientras frotaba sus ojos. — No creo que sea mi padre... recuerda... que le dije que llegara en la tarde.

Yoongi quien aún permanecía de pie, asintió pensativo, confirmando que tenia totalmente la razón.

Jimin en su lugar, empezó a caminar hacia la puerta de la entrada — con Yoongi detrás — y abrir lentamente para mirar de quien se trataba.

— ¡Buenos días! —Exclamó el contrario.

Yoongi detrás de la puerta, simplemente rodó sus ojos, tocó el hombro de Jimin quien se encontraba sonriendo aún con sueño, se hizo presente y finalmente lo observo, Taehyung.

— ¿¿Es que no puedes dormir hasta más tarde?? — Reprochó Yoongi, fulminándolo con la mirada.

Taehyung quien tenia todas las energías, sonrió mostrando esa pequeña y adorable sonrisa cuadrada. Riendo ligeramente ante como estos, se encontraban aún con sus pijamas.

— ¡Vamos!, son las 9 de la mañana, ¿hasta que hora más piensan dormir? — Le sonrió a ambos. — ¡Disfruten desde temprano sus días!. — Sin embargó su sonrisa alegre, cambió a una provocativa. — ¿O que?, ¿si los aprovechan ambos? — Subió y bajo sus cejas.

Jimin, ni Yoongi, podían entender como un cuerpo podía tener tanta energía en solo segundos. Sin embargo al escuchar lo ultimo, sus mismas mejillas parecía que iban a explotar.

— ¡Eres idiota! — Soltó Yoongi para así adelantarse, y golpear el hombro de su amigo.

— Calmado fiera. — Rió — Muévanse tortolitos, he venido para llevarlos a desayunar. — Dijo mientras que con la mirada y una enorme sonrisa, trataba de hacer que Jimin lo invitara a entrar. — ¡Vayan a cambiarse que se nos pierde la oferta de desayuno que vi! — Movió sus brazos para alejar a Jimin y Yoongi e incitarlos a que partieran a vestirse.

— Como friegaaas. — Yoongi alargó la ultima vocal con tono de reproche.

— Yo les invitaré, tómenlo o déjenlo. No tendrán que pagar nadita. — Comentó ya una vez pasando a la casa.

— Tae... no es necesario. — Dijo Jimin sonriendo, aún con sus mejillas coloradas.

— Claro que si, venga, ya cámbiense, necesito contarles algo. — Les guiño el ojo.

——— 🍥 ———

— Me voy de la ciudad.

Ambos estupefactos dejaron de masticar los waffles que Taehyung les había pedido.