Capítulo XIII

4 0 0
                                    

-Así que Nora, cuéntame algo de ti- preguntó Ethan.

¿Recuerdan lo de la cena?, pues en efecto, estamos cenando. Pero para mí el ambiente se puso algo incomodo desde que esos dos se están lanzando preguntas y se miran de una forma incomoda. Así que aproveche y terminé rápido de comer.

-...Me gusta viajar mucho por el mundo pero Grecia siempre ha sido mi hogar y estoy muy a gusto aquí, además aquí estoy desarrollando mi carrera muy bien- le comentó Nora a Ethan.

-Chicos, no es por interrumpirlos pero creo que yo me voy, es que me siento un poco mal- me formule esa mentira en menos de cinco segundos.

-Nosotros vamos contigo- dijeron ambos al mismo tiempo.

-No, no, no, no, disfruten la velada, además el hotel queda cerca y tal vez tomar aire fresco me ayude- dije y les sonreí.

Ambos me vieron mal, sabían lo que yo estaba haciendo. Pero sé que lo disfrutarían.

Salí del restaurante y comencé a caminar. Fui a la playa, sé que me traería paz, además quería estar un rato sola.

Me quité los zapatos de piso y comencé a caminar por la arena. ¿Les ha pasado a ustedes?, sentir esa satisfacción de la arena en los pies es demasiado agradable.

En lo que estaba caminando, las preguntas existenciales de mi vida llegaron hasta mi. ¿Será verdad lo de mi padre?, ¿Mi madre porqué tardó tanto en contarme la verdad?, ¿Qué ocupaciones tenía mi padre para no estar con nosotras?, ¿Y si mi padre estaba comprometido en ese entonces y solo se acostó con mamá?, ¿Porqué mi vida es tan complicada?.

-SCARLEEEEEETT- gritaron atrás de mi.

-¿Eh?- pregunté confundida y lo vi.

-Te he estado hablando, pero al parecer estas demasiado metida en tus pensamientos- dijo sonriendo. 

-Perdón, solo que fue día pesado- dije alzando mis hombros.

-Entiendo, igual me pasó. Por eso estoy aquí- dijo 

Ambos comenzamos a caminar por la playa, hablábamos acerca de nuestro día, de nuestra familia (bueno él), por el momento a mi no me interesaba tocar el tema.

-¿Te parece si nos sentamos?- le pregunté.

Al parecer mi mentira se estaba volviendo realidad, realmente me estaba sintiendo mal.

-Claro- nos sentamos en la arena.

-¿Te puedo contar algo? pero no le digas a nadie- lo miré directo a sus ojos.

-Dime- dijo volteando su cara para verme bien.

Me acosté en su hombro y miré hacia enfrente.

-Mi padre me ha contactado, quiere que lo vea. Yo...No tengo ni idea de que hacer. Realmente quiero conocerlo, verlo y abrazarlo, pero al mismo tiempo sé que al verlo de frente le comenzaré a gritar y a reclamar. Estoy llena de preguntas sin contestar- dije con la voz entrecortada y con algunas lágrimas saliendo de mi rostro.

-Llora lo que tengas que llorar, te hará bien. Sky te daré mi más humilde opinión aunque no me la hayas pedido. Creo que deberías verlo, preguntarle todas esas cosas que pasan por esa cabecita, si le puedes reclamar y decirle lo que tu quieras, dile como te sentiste todos estos años. Y al final lo puedes abrazar y decirle que te dio gusto conocerlo- me dijo abrazándome por los hombros.

-Lo pensaré, gracias por tu humilde opinión, creo que realmente la necesitaba.- dije soltando un suspiro.

Ambos nos vimos directo a los ojos y eso me hizo sonreír. Me levanté de la arena cortando el momento.

-Creo que ya tengo que irme- dije y él se levantó de inmediato.

-Te acompaño, Sky- dijo.

No decíamos nada, solo caminábamos en silencio.

-¿Puedo tomar tu mano?- preguntó volteando a verme.

-Eh...no sé, supongo- dije nerviosa

Tomó mi mano y comenzamos a caminar.

-¿Te estas quedando en el mismo hotel?- preguntó.

-Sí, en lo que arregló algo- dije, se me olvidó. 

Les explicaré, yo no quería que nadie se enterara de lo de la casa que mi madre me había dejado, pero aquí estoy, abriendo la bocota.

-¿Algo?,¿Has conseguido donde vivir?- preguntó

-Es algo secreto por el momento, prometo que después te contaré- dije.

Llegamos al hotel.

-Me dio gusto verte- dijo sonriendo.

-A mi también, me dio gusto verte- dije sonriendo.

Besó mi mejilla, soltó mi mano y se fue.

Estaba a punto de entrar al hotel cuando dos personitas me impidieron seguir caminando.

-Por eso te querías ir ¿verdad?- preguntaron

-No, me lo encontré en la playa- dije

Nora me vio con cara de "te atrapé" con una sonrisa pervertida. Mientras que Ethan me veía de una manera rara.

The Name Of The GameDonde viven las historias. Descúbrelo ahora