The Name Of The Game

Capítulo XXVIII

Esa noche, no pude dormir, me la pase pensando en que pasaba si me descubrían.

A la mañana siguiente me levante a las ocho de la mañana, me metí a bañar.

Al salir, me coloque mi ropa interior, una blusa de tirantes, un pantalón de mezclilla, mis tenis blancos. Baje a desayunar, este realmente sería un día largo.

-Buenos días- dijeron Clary y mi papá.

-Buen día- los saludé

-Sky, después de desayunar empezaremos con el entrenamiento- dijo sentándose en su lugar

-Sí, de hecho por eso me levante tan temprano- dije.

Los tres esperamos el desayuno.

-¿Y Sel?- pregunté

-Ella suele levantarse más tarde- dijo mi padre

-Oh- y comencé a comer la fruta que nos habían dejado.

Los tres estábamos desayunando tranquilamente, cuando llega Sel y a su lado Adonis.

¡MIERDA!

Cuando vi que entraron, corrí hacia la cocina con mi plato en mano.

Me puse a comer con las muchachas que atendían ahí.  Realmente era algo muy agradable y sin mucho lujo, solo una humilde plática.

Más tarde entró Clary.

-Sky, es hora de comenzar- dijo con postura firme

-Sí, solo me iré a lavar los dientes- dije y corrí hacia mi cuarto.

Después de hacer la limpieza bucal, bajé las escaleras.

-Bueno, vayamos a la biblioteca- dijo y comenzó a caminar por otro pasillo largo. Al llegar abrió dos puertas de madera. Y cuando entré se me cayó la boca al piso.

Fácil eran unos 10 estantes gigantes, que eran desde el techo hasta el piso y repletos de libros.

-Postura- soltó 

-¿Mande?- pregunté confundida

-Empezaremos con tu postura, a partir de mañana usaras un corset para enderezar tu espalda y ahorita caminaras con algunos libros en la cabeza para encontrar la posición perfecta.- dijo tomando en sus manos un libro grueso.

Y así empezamos, mientras yo caminaba, ella me leía acerca de la política y la monarquía del país, algunas leyes. Al terminar de caminar, propuso tomar un té. Aquí también me enseñó como tomarlo, como empezar una plática formal, la manera correcta de sentarme. 

Seguimos con otras lecciones, como la manera correcta de leer, como hablar en público, etc. 

Terminamos aproximadamente a las ocho de la noche y solo fue porque una de las sirvientas se acercó a decirnos que la hora de la cena se aproximaba.

Ambas nos fuimos a cambiar, yo opté por una falda de tubo, era color negro. Y una camisa blanca suelta.  Me puse unos tacones negros, como me había desmaquillado mi cara durante las prácticas, me volví a maquillar, me pinté mis cejas, una sombra café claro, delinee mis ojos y apliqué rimel. Mis labios los pinté de un rojo intenso. Mi cabello suelto.

Bajé a cenar y en cuanto abrí las puertas me arrepentí.

En la mesa se encontraban: Mi papá, Clary, Sel y Adonis. 

¡GRACIAS DIOS!

-Buenas noches- saludé

-Buenas noches, Sky- dijeron los tres en la mesa. Adonis estaba mudo.

Me senté a cenar y entonces empezó lo divertido.

-¿Quién es él, Selena?- pregunté

-Es mi prometido, Sky- dijo sonriendo.

-¿Ella quién es, Sel?- preguntó Adonis

-Ella es...- Sel no sabía que decir, hasta que me adelanté.

-Soy Scarlett, la mejor amiga de Selena- dije sonriendo con mis dientes.

-¿Y qué hace aquí?- preguntó.

-Ella vino a visitar a Sel, ya que no podrá venir al baile de compromiso- dijo Clary

-Que bueno que estés aquí- dijo sonriente. Hipócrita.

-Opino lo mismo- dije y continué cenando.

Todos cenamos tranquilamente, entre la cena platicábamos acerca de varios temas.

Cuando terminamos de cenar, ayude a las muchachas a levantar los platos.

-Buenas noches- me despedí de las muchachas y me fui a mi cuarto.

A mitad de camino, me topé con Adonis.

-¿Qué haces aquí?- preguntó con tono molesto.

-Ya te dijeron en la cena, mi mejor amiga me quería ver antes de la fiesta, ya que yo no estaré-  mentí.

-Eros y yo te buscamos como locos por toda Grecia- dijo haciendo gestos de molestia.

-Tu ni siquiera tendrías porque haberme buscado, y ya había hablado con Eros de que nada podría ser. Si me disculpas, me tengo que ir- dije y corrí como niña chiquita a mi cuarto.

Esto no podría estar peor.

Mi celular comienza a sonar, no de llamada, era de mensajes. Parecieran millones de mensajes.

Cuando paro de sonar el dichoso celular, fijé para ver de quien era.

Doscientos mensajes de Eros, todos diciendo que teníamos que hablar y lo más probable es que el chismoso de su hermano le diga que estoy aquí y ahora si todo se va para abajo.

A pesar de que los nervios me carcomían por dentro, esa noche pude dormir mejor que cualquier otra persona en este mismo castillo.

SUEÑO

¿Mamá?- dije al ver una sombra familiar.

-¿Sky? ¿Dónde estas?- preguntaba aquella voz

-Aquí, mamá- decía pero al parecer ella no me escuchaba

Ella se acercó hasta un espacio oscuro y sacó una niña, al parecer era yo.

La niña lloraba a mares, le decía que quería ver a papá, mientras que mamá le acariciaba el cabello y le cantaba.

-Escucha Sky, la vida siempre será difícil, tendrás cosas buenas y cosas malas. Sé que en muchas ocasiones no sepas que hacer, estés confundida y sé que encontrarás la verdad, sólo te pido que sigas a tu corazón y no pienses tanto las cosas. A veces pensar tanto te lleva a la desgracia- dijo acariciando mi cabello.

-Mami, ¿ te puedes quedar conmigo, por siempre?- preguntaba la niña volteando a ver a mamá.

-No siempre estaré contigo, pero el día que yo ya no este, Sky. Tú sabrás ser fuerte e independiente- dijo.- Solo busca más adentro de aquí- dijo y señaló el lado izquierdo del pecho de la niña.

Y ahí fue cuando mi madre me vio, finalmente.

Me guiñó un ojo y desapareció.

Me levanté con el corazón acelerado, sentía que algo grande estaba por venir, agradezco a mi madre por todo lo que me enseñó. Si tan solo supiera cuanto la extraño y quisiera tenerla aquí conmigo. Lavé mi rostro en el baño y después me volvía ir a dormir, ya que eran las tres de la mañana y necesitaba fuerzas para el entrenamiento.

Solo espero que eso que se venga sea a mi favor y no en mi contra.