Tú, la más linda coincidencia

Capítulo 18 - ¿Aún están ahí?

Vayamos un poco hacia atrás, yo diría exactamente unos treinta cinco minutos desde que el segundo orgasmo de Piper no tardaba en llegar y mucho menos el de Alex. Pero en la misma fiesta a tan solo unos ocho metros de distancia, que era la diferencia que había entre la habitación de la rubia y el lavadero, encontramos a alguien más gimiendo. 

Recordemos un poco que Amy quedó sola y abandonada en el medio de la pista y nuestra querida Nicky nunca dejaría a alguien sin consuelo. Ambas pelirrojas y de igual estatura; con diferencias claves entre ellas. Nichols tenía su pelo perfectamente despeinado, un par de gemelas importantes, de esas que cualquier mujer alguna vez deseó tener (no importa si en el propio cuerpo o entre las manos o entre los labios, esos detalles puedo dejárselos a ustedes) y sobre todo un gran carisma. Los rumores dicen que nunca había sido pasiva, pero creer eso a esta altura me genera algunas controversias. Volviendo a Amy, su don principal no estaba por delante, sino por detrás y eso era algo que a Nicky le gustaba demasiado. Era algo más atlética, porque de chica fue una aficionada por el gimnasio, pero ella siempre decía que el setenta por ciento de su fibra se lo debía al azar y la genética.

¿Quién estaba gimiendo más? Me costaría definirlo, resulta que con una sola mirada Nicky ya había llevado a Amy al lavadero y al cabo de cinco minutos sus manos no daban a basto. Era una lucha constante sobre quién mantenía el poder y eso las llevó a tocarse el mismo tiempo. Las dos estaban al borde del precipicio, sus respiraciones estaban agitadas, chocaban una y otra vez contra sus labios y muchas veces terminaban en mordidas que desde afuera parecían bruscas, pero que se sentían demasiado bien. El dedo indice y el del medio de la mano derecha de Nicky se metía con gran agilidad entre las paredes de la otra pelirroja, que tenía su mano izquierda con los mismos dedos dentro de su ahora, compañera sexual. Ninguna de las dos quería ceder, se sentía demasiado bien estar así, las contracciones involuntarias que apretaban sus dedos, la respiración incontrolable, la adrenalina de ser descubiertas por no haber puesto el seguro, producto del apuro y sobre todo esa inexplicable sensación de bienestar que generan las dopaminas. Pero alguna debía ceder y acabar primero. Quisiera decirles que Nicky ganó, pero Amy llevó el pulgar a su clítoris y de una manera tan precisa que no era ni suave ni demasiado fuerte tocó esa fibra necesaria para que Nichols jadeara casi cayéndose por el ripio, sin retorno alguno. 

Sin embargo su ego, ese que era grande y necesario no la dejaría caer sola, mordió el cuello de Amy como último recurso y luego de una lamida lenta pero precisa hasta el lóbulo de su oreja, consiguió lo que quería. La electricidad recorrió sus cuerpos, el sostener un orgasmo tanto tiempo hacia que la descarga de sienta aún mejor y más placentera para ellas y sin querer verse afectadas porque las piernas pedían sostenerse y la pared ya no era suficiente, terminaron ese primer acto de la forma menos pensada. Abrazadas, intentando ocultar la respiración tan acelerada y rogando por dentro que ese solo sea el primero de muchos.

***

Diez días después de la fiesta Piper y Nicky se encontraban en el hospital. Urgencias no habían llegado y tampoco se veían cirugías programadas en la pizarra. Con los pies sobre la mesa del frente la pelirroja comía frituras otra vez y la rubia miraba intensamente un punto fijo del piso mientras se llevaba algunos sorbos de café a la boca. Mañana aburrida, más cuando tenían diecisiete horas sin dormir.

-:¿Estás triste porque Vause aún no llegó? - preguntó con ese tono irónico tan característico.

-: Hace una semana que no hablo con ella - dijo sin dejar de apreciar el piso

-: Lo sé, pero al menos se veían, me parece raro que hoy no haya venido

-: La que sí vino es Amy, todavía no sé que hacés hablando conmigo cuando podrían estar follando cual conejas

-: Empiezo a pensar que es demasiado tóxico, no se si quiero volver a hacerlo

-: ¿En serio Nicky? Me dijiste que el sexo era increíble con ella

-: Y lo es, pero es demasiado desgastante... la muy maldita lo hace bien, demasiado bien... y lo sabe.

-: ¿Y el problema? Lo sigo buscando y no lo encuentro - dijo revoleando los ojos sin mirarla

-: Que no puedo hacerlo a ese ritmo con este trabajo, llevo no se cuantas putas horas sin dormir y esa mujer me quita hasta las últimas energías.

-: Ay, nunca pensé que iba a escucharte decir eso, por fin encontramos a alguien que disfrute más coger que vos - dijo fingiendo un entusiasmo demasiado falso

-: Yo no dije que lo disfrute más que yo, solo que ahora sé que espera mucho de mí, que no puedo darle un simple orgasmo moviendo mi lengua y ya, Amy es demasiado activa para eso...

-: ¿Te estás venciendo Nicky?

-: Nunca - dijo y se paró de un salto - pero siempre hay alguien que llega y es capaz de hacerte reflexionar algunas cosas o volverte incluso una maldita mojigata - terminó diciendo mirándola a los ojos con ironía y diversión y se alejó de ella porque Alex acababa de entrar a la cafetería. Algo iba a pasar, los ojos verdes de la jefa solo buscaban a su rubia favorita y solo Nicky podía notar algo así.

La rubia se quedó sorprendida mirando a Nicky irse y fue cuando la melena revuelta desapareció de su vista que sintió como la acosaban visualmente.

-: Doctora Chapman - dijo segura y convencida, mientras que sus manos se movían algo nerviosa.

-: Doctora Vause - contestó mirándola fijo, con un claro mensaje de reclamo.

-: Tiene guardias hoy, mañana y el miércoles tiene el día libre

-: No, tengo guardia hoy, mañana libre y el miércoles guardia otra vez - dijo totalmente confundida y sin entender a que venía esa conversación.

-: Solo quiero acomodar su agenda para que pueda acudir a su cita - sonrío de lado mientras su ceja derecha se elevaba tan solo un poco

-: No tengo ninguna cita el miércoles doctora Vause - contestó ya algo enojada por esa charla sin sentid.

-: Si la tienes, paso por ti a las ocho treinta - y dejando a la rubia completamente descolocada se retiró luego de guiñarle el ojo, aflojarle las bragas y dejándola perdida en un limbo como cada vez que Alex la miraba fijo y le sonreía.

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Hola a todxs ! Antes que nada perdón el retraso... acaba de comenzar mis vacaciones y aquí estoy como se los prometí. Sé que el capítulo fue corto, pero prometo actualizar pronto. 

Ahora me atrevo a pedirles algo: 

Para aquellas que hayan leído mi otro fic (y si no lo hicieron aún, pueden encontrarlo en mi perfil) les quiero preguntar que fue lo que más les gusto de esa historia. ¿Las razones? Simple, les tengo una sorpresa, pero para eso necesito algo de colaboración.

Muchas gracias!

Nos leemos pronto (esta vez es en serio)

Tams !

Ps: los reclamos de mi ausencia también pueden llevarselos a ella NataliaSarmiento178 les juro que no me deja tiempo para escribirles... 😁🤷‍♀️