48. Inked

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  ''¿Qué estabas haciendo con ese idiota?''


Brooklyn Reed


—Todavía no puedo creer que esto es para lo que necesitabas de nuestra ayuda.— Kelsey resopló, hundiéndose cada vez más en mi cama mientras miraba a sus perfectamente pulidas uñas rosa chicle con resignación.

—Nunca te pedí tu ayuda.— Jazzy replicó, girando en mi silla de escritorio mientras revolvía alrededor de mi vestuario. —En realidad, recuerdo pedírsela sólo a Brooklyn. Todavía no sé lo que estás haciendo aquí.

Oí a Kelsey jadear, ofendida. —Que violenta. Mueve a esta niña fuera de mi vista antes de que haga algo de lo que me pueda arrepentir.— Dijo, aunque se veía tan amenazadora como una ardilla. —O no.

Casi pude imaginar a Jazmyn poniendo los ojos hacia ella.

—¿Van a parar, por favor? Juro que sois como dos niñas pequeñas.

Salí del vestuario/armario, también conocido como el closet, con algunos vestidos de invierno cubriendo mi brazo, y un par de tops, aún en sus perchas, en mi mano libre.

—Lo siento, Brooke. Esta chica es demasiado para mí.— Jazmyn murmuró -deliberadamente con voz alta para que Kelsey la oyera- mientras me miraba fijamente.

—Lo mismo digo.— Kelsey respondió infantilmente, haciendo un gran espectáculo al sacarle la lengua a la hermana de Justin.

—Oh, Dios.— Tomé una respiración. —Señor ayúdame a salir de esto.— Dejé toda la ropa que había recogido en mi cama exhibiéndola a los ojos de Jazmyn.

Kelsey y Jazzy pueden ser muy inmaduras e infantiles, eso me ponía de los nervios. Sobre todo porque era todo falso -se gustaban, pero se negaban a admitirlo abiertamente. Su disputa es molesta después de la tercera discusión que tienen.

—Estos deben adaptarse a ti.— Le digo a Jazmyn, enderezando un vestido de lana de color marrón oscuro en la cama. —Aunque no dejo de pensar que sólo debes llevar tu propia ropa. Realmente, Caleb no parece ser el tipo de persona que se preocupa por esas cosas.

Miré a Kelsey en busca de apoyo, pero ella todavía se veía en posición de atacar.

—En serio, esa es la manera de llamarlo de Brooklyn a volverse-loca-para-estar-bien en una noche de escuela sólo para pedirle un vestido que puedas llevar a una cita con el pequeño hermano de Clara. — Kelsey resopló. —Por favor, los adolescentes en estos días.

Le envié una mirada de regaño. Claro que Jazmyn me había asustado cuando me llamó pidiendo ayuda el otro día - los pensamientos de todos los casos posibles habían brillado por mi mente: Justin herido o peleando con alguien o algo que les hubiera pasado a Pattie o Jaxon, incluso Jeremy- y, al final, era sólo miedo por una cita.

Jazzy sonrió dulcemente a Kelsey, pero sus intenciones eran todo menos dulces. Conocía esa mirada de verla en el rostro de Justin más de una vez. —¿Sabes, Kelsey? Si no cierras esa pequeña boca en este momento, voy a ser yo la que lo haga por ti.— Dijo con calma, mientras que apretaba los puños detrás de la espalda de la silla. Sin duda, una Bieber.

—¿Te atreves a amenazarme en la casa de mi mejor amiga, quien, de hecho, es hija de un policía? Increíble.— Kelsey negó con la cabeza de manera espectacular, sentada en posición vertical sobre mi cama.

—Bueno, ya basta. Me estáis dando dolor de cabeza.— Me froté las sienes. —O os calláis o os echo fuera a las dos.— Moví los ojos de una a la otra para asegurarme de que lo habían entendido.

B.R.O.N.X «j.b» Terminada «corrigiendo»Donde viven las historias. Descúbrelo ahora