Ecos Y Ruidos (Gary x Avocato)

38 - Espera

Universo A-1

Tal vez... Era normal que Gary y Avocato en cierto sentido, rechazaran lo que comenzaban a sentir el uno por el otro.

¿Cuando tiempo había pasado del último sueño de Gary?.

¿Cuánto tiempo había pasado que Avocato no se enamoraba en verdad?.

Muy probablemente, esos tiempo coincidían.

Y había pequeño obstáculos que daban pie a que el chico y el ventrexiano, en cierta parte, dudarán de sus sentimientos.

Y eso los llevaba a una misma conclusión.

"No, es una tontería pensar que soy correspondido, seguro solo lo estoy malinterpretado".

Y aún así, con sus dudas, con sus inseguridades de cada uno.

Había pasado una semana más sin verse y Avocato otra vez estaba en el universo A-1.

Y más inseguro que nunca.

El ventrexiano pensaba que tanto tiempo de no verlo, podría provocarle que el ya no lo quisiera más, que pensara que fuera raro.

Ahora a Avocato se le hacía demasiado raro.

Pero aún así, algo muy dentro de él le decía que necesitaba verlo una vez más.

Y así, con pasó apresurado, nervioso y su mente a punto de colapsar.

Avocato se dirigió rápido al edificio donde se encontraba el departamento del chico.

Subió las escaleras y antes de que diera vuelta hacia su izquierda. Un ventrexiano naranja más joven que él se puso justo frente a él.

-¿Papá?. -fruncio el ceño.

-H-hijo... -lo tomo por sorpresa.

-¡Papá! -Pequeño Cato se acercó a él y le dio un fuerte abrazo. -Pensé... Pensé que ya no te volvería a ver. -Se separó de Avocato mostrándole una gran sonrisa.

-Yo... -No podía negar que a él también le daba mucha felicidad ver a su hijo. -Por eso vine hoy hijo.

-¡Ven! -lo tomo del brazo y comenzó a caminar. -Iba directo al comedor.

-Si, si. Voy contigo. -Avocato volteo hacia donde quedaba el departamento del chico, pero no podía decirle que no a Pequeño Cato.

Y así, con sus ganas de ver a Gary, el ventrexiano acompaño a su hijo para que pudiera ingerir sus alimentos.

-Papa, ¿No quieres comer tu?. -Pregunto una vez se sirvió.

Pero el ventrexiano estaba distraído -Am... No Pequeño Cato, estoy lleno.

Después de eso, el ventrexiano y su hijo fueron a sentarse en una de las mesas.

Y mientras Avocato veía como Pequeño Cato comía, el le iba contando todas sus nuevas aventuras en la guardia Infinity (sin contar la misión de cuando fue a su universo claro).

-Pero, debo de admitir que todo es mejor gracias a Gary.

-¿Gary?. -Avocato interrumpió.

-Si, de no ser por el, muy probablemente sería un maldito amargado aquí, es como mi mejor amigo.

-Bien... -Avocato rasco su cabeza -¿Y... Como está el?. -trato de preguntar cómo si no le importara.

-Muy bien, por lo que me dijo, está feliz de que yo esté aquí, ya no se siente tan solo.

El ventrexiano esperaba que Pequeño Cato le dijera algo que lo involucrará a el, pero no fue así.

-Estuve una semana con el. -confeso sin pensarlo.

-¡Oh! Cierto, me contó.

-¿A sí?. -Sin darse cuenta, ahora estaba sonriendo.

Lo ponía feliz saber aquello.

-Si, me dijo que estuvieron vagando por ahí. Divirtiéndose. -Pequeño Cato apenas quiso tocar el tema por qué eso podía llevarlo a la razón de su ausencia y no inventó una excusa para la situación.

-Si... -Avocato cubrió su rostro y después río. -Conoces a Gary, el puede ser muy divertido además de ocurrente... ¿Sabías que es un total experto de las cartas?. Yo jamás había visto...

Y más biblia del ventrexiano sobre Gary empezó.

Sin darse cuenta, comenzó hablar otra vez del chico.

De un Pequeño Cato emocionado por relatar sus aventuras pasaron a un Avocato diciendo mil y un cosas de Gary.

Como si lo conociera de años.

-No se... -Avocato siguió -A veces creo que me gusta más este universo que el mío. -confesó con su mirada perdida.

-¿En serio?. - pregunto Pequeño Cato que en algún punto de la plática de su padre, se aburrió. -¿Pues como es tu universo papá?.

El ventrexiano suspiró -Bueno, definitivamente es más tecnológico y futurista que este. Muchas cosas que aquí siguen igual, en el mío cambiaron.... En tan solo 6 meses cambiaron muchas cosas...

-¿Y como es tu vida?. -Pequeño Cato vio la oportunidad de tal vez sacar un poco de información. -Es decir... ¿A qué te dedicas o que haces?.

Avocato bajo la mirada -Soy la pareja de la gran líder de toda una nación, hago misiones y cuando se trata de salir tengo que usar un ridículo traje que oculta mi verdadera identidad.

-Oh.. por supuesto -Pequeño Cato interrumpió -La prensa y el periodismo debe ser muy fuerte con todo lo que hacen.

-¿La prensa?. -pregunto su padre confundido -No. La prensa y el periodismo no existen. Está muy controlado por la autoridad.

Pequeño Cato dejo de consumir sus alimentos -Quieres decir que... ¿No hay avisos o información que las de un tercero como aquí?.

-No. -confirmo Avocato. -Eso no existe en mi universo.

-Pero... Las notas... -Esto último lo dijo en voz baja.

-¿Las que?... -Pregunto extrañado el ventrexiano.

Pequeño Cato se quedó en silencio, sus ojos claramente señalaban que se encontraba pensando.

Así permaneció por lo menos 15 segundos.

Después, sus ojos se abrieron considerablemente. Como si hubiera descubierto algo.

De un solo movimiento, Pequeño Cato se levantó -¡Papá, tengo que irme, nos vemos después!. -Y salió disparado del comedor hacia una dirección en la que Avocato no pudo deducir que es lo que había ocurrido.

Frunció su ceño y después levantó sus hombros.

Pequeño Cato ya no estaba.

Y si él ya no estaba, eso solo significaba una cosa.

La decisión de visitar a Gary quedaba en el aunque verlo, significaría llegar tarde con Quinn.

Y es que, el ventrexiano apenas recordaba lo que podía provocar el estar enamorado.

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Actualización el miércoles amigos :3 <3

Espero les haya gustado esta parte.

Nos leemos pronto UwU.

Bai.

Hasta El Último Día II: Ecos Y Ruidos (Gary x Avocato): Capítulo 38 (52), Temporada 2.