-Gracias tio por la ayuda con mi hermano, mazo gracias. Dijo Cris abriendo la puerta de su casa.
-Segura que no queréis más ayuda? Pregunto Rubén, en un intento para que Cris le diera atención.
-No gracias, de aquí me encargo yo. Dándole un beso en la mejilla a Rubén y después cerrando la puerta de su casa.
-Rubén siempre me pregunta por ti sis.
-Baja la voz Dani, que mamá se va a despertar y nos va a matar.
Abrió la puerta del cuarto de Dani y lo tiro a la cama como pudo y trato de hacer el menos ruido posible para no despertar a sus padres que dormían en el cuarto cercano.
Cris ya en su cuarto más tranquila pasa por el espejo que está en su pared y sigue en dirección a su cama, pero se detiene y se devuelve al espejo.
-Esta es la chaqueta de Joana, no se la he devuelto, joder.
Se lanzó a su cama ya lista para dormir pero los típicos pensamientos nocturnos que quitan el sueño la empiezan a rondar.
No podía sacarse de la cabeza lo que hubiera pasado si en verdad hubiera besado a Joana. Miro a su izquierda donde estaba la chaqueta de la chica, la tomó y como en señal de duda la olió, le hizo recordar el momento donde la respiración de Joana chocaba contra sus labios.
Su olor, no se lo podía sacar de su mente pero buscando mil excusas para no seguir pensado en esta chica decidió dormirse, dejo la chaqueta a los pies de la cama y se metió bien adentro como tapándose de todos los pensamientos que le agobian.
Joana acercándose a los labios de la rubia, sus respiraciones eran cada vez más rápidas pero ninguna se movía, las narices se rozaban suavemente, hasta que Cris decidió acercarse un poco más y rozando sus labios con los de Joana. Sintiendo su olor, sus tibios labios, se lanzó por el beso que tanto deseaba. Sus bocas fueron una sola. Los dedos de Joana entrelazados en el pelo rubio...
-CRIS! Son las 12 del día hija por dios, ya levántate y ayúdame con las cosas de la casa.
-Mamá deja gritar que me duele la cabeza, ya!
-Eso te pasa por llegar a las tantas de la noche a casa. Te levantas ya! Saliendo de la pieza y cerrando la puerta dice la madre.
Joder, que mierda acabo de soñar? Esto definitivamente ya no es culpa del alcohol. Esa puta chaqueta la meteré al armario hasta el lunes que se la devuelva a esta tia.
Al agarrarla para meterla al armario, la olio nuevamente y con eso se le vino el sueño nuevamente a su mente.
Cristinadetente! Esto no está bien a ti te molan los tios y esto fue producto de laborrachera del momento. Diciéndose a ella misma intentando convencerse de queya está, fue algo del momento y ya!