Cris caminó lento desde la casa Amira a la suya, sabiendo que al llegar una conversación un tanto incomoda con su hermano era totalmente eminente. Paso tras paso, la rubia se imaginaba muchos escenarios completamente distintos y unos un tanto trágicos, hasta se imaginó que la echarían de la casa.
Al llegar trato de no hacer nada de ruido y solo pasó por la habitación de sus padres para darles aviso que ya había llegado.
-Hija por dios, cuando te quedes en la casa Amira avisadnos por lo menos que nos preocupamos por ti. Dijo media dormida la madre.
-Sí, mamá lo siento es que se me ha pasado el tiempo. Dijo Cris bajito para no despertar al papá.
Cris al salir de la habitación se pensaba.
"Bueno, creo que Dani no les contó nada porque estaban muy tranquilos, que si este otro les hubiera contado ya me estarían esperando con mis valijas aquí mismo"
La chica se dirigió a su habitación súper sigilosa, tratando de no hacer ni siquiera hacer sonar los pies al caminar.
Al llegar solo se desvaneció encima de su cama, en forma de rendición y cansancio. Solo reviso el móvil, ya que había estado ignorando todo tipo de mensaje y notificaciones. Mientras la chica leía, sus ojos se cerraban lentamente y así fue como se durmió sin ni siquiera cambiarse ropa.
Al otro día supo que al levantarse e ir hasta la cocina por el desayuno. Sabía que su hermano estaría allí y no había manera de esquivar ese momento.
-Buenos días hija, queréis café? Pregunto la madre muy entusiasmada.
-No, gracias mamá, hoy no tengo mucha hambre. Dijo Cris un poco desanimada.
-Hija queréis que te lleve al insti? Pregunto el padre amorosamente.
En ese momento entró Dani a la cocina e interrumpiendo al padre dice.
-Hemos quedado en que yo la llevaba papá, no os preocupéis. Dijo el chico mirando a su hermana.
Cris al escuchar esas palabras, se puso muy nerviosa y tanto alterada porque sabía que en unos pocos minutos tendría que afrontar la situación.
Los dos hermanos se subieron al auto y pasaron unos breves minutos en silencio, hasta que Dani tomo la iniciativa de la conversación.
-Hace cuanto te gustas las chicas? Pregunto serio.
Cris al escuchar esas palabras se quedó helada, sin responder.
-Si hubiera sabido que te molaban las chicas que te presento a una amiga mejor que a Rubén ¿No? Dijo con una pequeña risa y golpeándole en el hombro a su hermana pequeña.
Cris no pudo procesar esa respuesta positiva ya que pensaba que su hermano no la iba a aceptar.
-No seáis un gilipollas Dani, esto no es un juego para mi. Dijo seria.
-Que no tia, que te lo digo en serio. No me puede importar menos a quien queréis, lo que me duele es que no me habéis contado además habéis pasado por todo esto sola, sabéis que podéis confiar en mí, siempre.
-Tenia tanto miedo de hablar contigo, pensé que me ibais a delatar con papá y mamá. Dijo Cris mirando a Dani.
-Es tu problema contarles hermanita, pero sabéis que se van a tener que enterar algún día y quizás su reacción no se tan buena como la mía.
-Me da pánico pensar que dirán, que pasa si me echan de casa tio y no me vuelven a hablar en la vida. Dijo apenada Cris.
-Que si te echan me voy contigo. Soy tu hermano en las buenas y en las malas.
Cris al escuchar esas palabras se le soltaron algunas lágrimas pero no quiso mostrarse tan sentimental cerca de su hermano pero sabía que él iba a estar con ella pasara lo que pasara y eso le daba una calma gigantesca.
-Te quiero hermanita. Dijo apretándole una mejilla.
-Lamentablemente yo también tio. Dijo Cris mientras se bajaba del auto.
Cris mientras caminaba hacia el instituto se sentía calmada y a la vez culpable de pensar que su hermano no la apoyaría en esto.
Ahorasolo tenía que hablar con Joana y explicarle porque había sido tan pesada ytambién poder explicarle por lo que estaba pasando.