Once.

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No tardaron mucho en volver al departamento de los lobos.
Stiles fue el primero en entrar, caminando mucho mejor que antes, aunque Derek no dejaba de seguirlo por si acaso. Isaac, por su parte, cerró la puerta tras ellos luego de asegurarse de que nadie venía siguiéndolos.

– Tenemos muchas cosas de qué hablar – mencionó Isaac mientras caminaba al living, ahí en donde Stiles y Derek ya estaban sentados sobre uno de los sofás –. Mejor dicho, Stiles tiene mucho qué explicar – cruzó los brazos.

El nombrado asintió en silencio, y cuando estuvo a punto de decir algo un quejido le arrebató las palabras. Derek había puesto su mano sobre la hematoma de Stiles para comenzar a extraerle el dolor poco a poco con sus habilidades de lobo.

– ¿Por qué carajos te alejaste de nosotros? ¡Ése no era el plan! – agregó el beta luego de un rato –. ¡Teníamos que ir hasta el área de sustos para devolverte a tu mundo, Stiles! ¡No meternos en un lío con el tío de Derek!

– ¡No fue mi intención! – respondió Stiles en cuanto Derek terminó con su labor –. ¡Me perdí, ¿Sí?! ¡Y lo lamento!

– ¡Lamentarlo no basta!

De pronto, Derek alzó una mano para pedir que ambos guardaran silencio.

– Los culpables de esto somos todos, no sólo Stiles – argumentó el alfa, poniéndose de pie –. Todos sabíamos que era un gran riesgo llevarlo a la planta.

– ¡Pero el plan iba perfecto hasta que Stiles se perdió! – contradijo Isaac.

– Peter pudo encontrarnos más adelante, o en el área de sustos, quién sabe – Derek se encogió de hombros –. Pero las probabilidades de que alguien nos encontraría eran muy altas.

El beta frunció los labios.

– Tal vez Isaac tiene razón – apoyó Stiles, apuntando al de rulos –. Si yo no me hubiera ido...si yo no me hubiera encontrado a Peter...

– Cállense los dos – demandó el azabache, cansado de oír la misma alegata –. No sirve de nada que estén diciendo esto justo ahora, cuando ya todo pasó.

Se notaba que Derek era el alfa, pues los otros dos chicos se quedaron en silencio luego de oír sus palabras.

– Estamos metidos en un gran problema, eso es obvio – habló Derek después de un rato –. Conozco a mi tío lo suficiente como para saber que no va a detenerse hasta que...– sus ojos se posaron en los de Stiles, y con eso fue suficiente para hacerle saber el castaño cuáles fueron las palabras que le hicieron falta pronunciar.

– Precisamente por eso es que estoy...asustado – admitió el beta, pasándose las manos por el cabello –. Tu tío es un hijo de perra, casi como tú, Derek.

Derek alzó las cejas.

– Peter es peor – ahora Isaac imitó el gesto de Derek al escuchar a Stiles decir eso.

Derek apretó los labios, imaginando lo peor ante las palabras de Stiles.

– ¿Por qué dices eso? – susurró el azabache, volviendo a sentarse junto al humano para ponerle toda la atención que necesitaba –. ¿Qué fue lo que te hizo mi tío como para que digas eso de él?

– No lo dije porque me haya hecho algo a mí, sino porque hará algo...– Stiles se miró las manos y tomó una bocanada de aire –. Me contó...el plan que tiene en mente.

El interés de Isaac aumentó después de oír eso, por esa misma razón él se sentó del otro lado de Stiles, mirándolo fijamente.

– ¿Qué plan? – preguntó Derek, poniendo su mano sobre las de Stiles inconscientemente, haciendo que el chico alzara el rostro y lo mirara a él, y nada más.

Parallel encounters -Sterek-Donde viven las historias. Descúbrelo ahora