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La silueta de una mujer se ve tras las cortinas de un baño, se observa como quita su ropa lentamente y camina descalza a la tina introduciendo poco a poco su cuerpo, pone en el agua jabón aromático que hace que su piel huela bien y le dé suavidad.

Esta mujer se da el lujo de tomar del vino más caro que se transporta desde el otro lado del mundo, su cara no muestra más que satisfacción, no puede estar más contenta con lo que ocurrió recientemente. ¿Por qué toma vino? Pues la chica está celebrando el pequeño triunfo que se le adquirió, solo falta que otro de sus cómplices cumpla con la otra parte.

Pues ella ya logro lo primordial hacer que su matrimonio se desmorone, se caiga tal cual pirámide de naipes.

Siente la alegría que se compara como el cuento de los tres cochinitos, por supuesto ella es el lobo que les derrumbó la casa de madera y paja haciendo que se les haga imposible volver a construir y una sonrisa burlona se posó en sus labios.

Y solo pensó, Solo es el comienzo.

*****

Por otra parte, en un baño de algún cuarto de la lujosa casa de encuentra Sofía en la tina del baño con sus ojos hinchados por el llanto.

Su cabeza de nuevo comenzó a doler, no le cabe la menor duda que lo mejor para ella es el divorcio, pero aún lo ama no soporta la sola idea de dejar al hombre que amo por las de 10 años, pero este no la ama y está comenzando a resignarse que ella no es a quien él desea no el ama y moriría por Rosa y ahora por su pequeño bebé que está por nacer, aunque debería de tomar cartas en ese asunto.

Ellos creían que Sofía era tonta más solo lo aparenta por su delicado porte, pero no se imaginan que detrás de toda esa facha hay una mujer con muchísima inteligencia; no por nada tiene su título en leyes y administración de empresas, tomara el poder en el bufet, pero necesita a su hermano para que él se haga cago de la otra porque no le dejara nada a esa arpía que se metió en su matrimonio.

Llevo sus manos a cubrir su rostro, un sollozó se atoro en su garganta no lloraría más por algo que ya no tiene reparación.

Quita sus manos de su rostro y se recarga en la tina pensando que es lo que va a hacer con todos estos problemas que han sido un embrollo.

Siente que su corazón duele, siente que ya no puede más, aventar la toalla, darle el divorcio, las empresas e irse donde no la conozcan, donde pueda hacer una nueva vida, pero no lo va hacer como le decía su abuela a tomar el toro por los cuernos, pues aunque los problemas la tenían hasta la garganta siempre veía como su abuela no se rendía de igual manera sus abuelos, así es como ellos le dieron un buen futuro a su madre y padre que ellos fueron quién levantaron el imperio por el cual ella vive.

Cierra sus ojos en la obscuridad de estos se refleja el futuro que ella soñaba volviendo a recordar una traviesa lágrima corre por su mejilla, otro recuerdo pasa por su mente cuando su hermano se fue al extranjero, cuando sus padres murieron en aquel accidente automovilístico, cuando el notario le llamó para darle a saber qué era la única heredera pues su hermano tuvo problemas con sus padres y no le dejaron nada, nadie sabe que tiene un hermano todo el mundo creo que es hija única, pero están equivocados, su hermano solo le dijo cuándo se fue "si necesitas algo no dudes en llamarme si ocurre un percance llámame dejaré de hacer lo que esté haciendo y vendré en tu ayuda solo recuerda no te dejare sola",

Con esas palabras cero la puerta dejando a una pequeña niña de ocho años en la sala con los ojos tan rojos que solo fue una de tantas, pero sus padres se encargaron de borrar todo de su hijo, la criaron en casa haciendo que se olvidará de su hermano y hasta este momento lo recuerda, no tiene odio ni rencor, solo los hará pagar con la misma moneda o con algo peor pues Ernesto solo es socio de un porcentaje, la mayor parte de la empresa es de ella y el bufet también solo que se encarga un amigo de Ernesto que es abogado y esa en su totalidad es de Sofía.

Abre los ojos, se queda un corto tiempo aún en la bañera y sale toma la bata que era a un lado colgada, toma la toalla y se la enreda en su cabello, saca el tapón de la bañera y sale del sanitario caminando a su cuarto.
Aquel cuarto que ha Sido testigo de toda lágrimas derramadas por un tipo que ni la merece, se posa delante el espejo de nuevo examina su rostro sus ojos ya ni muestran ese brillo, sus facciones se marcaron en su totalidad se ve sombrío sin emoción alguna, se volvió frío.

Todo es consecuencia por todo lo vivido, todo lo que le ha sucedido le ha hecho madurar más de lo debido, se dio cuenta que sus padres la mantenían en una burbuja que se encargaron de romperla lenta y dolorosamente.

Se aleja del espejo y busca en su armario algún conjunto para cambiarse a partir de ahora será una chica diferente, saldrá los fines de semana hasta llenar, tendrá nuevas aventuras, saldrá de viaje, pero ante todo será responsable y lo que ahora ara es salir a despejarse a ver si en esta salida se encuentra al chico de ojos verdes, tiene las ganas de encontrar de nuevo a Luciel ese hombre la intriga a querer saber más de él y lo hará esos ojos verdes le llaman.

Ya con el conjunto puesto y con algo de maquillaje sale de su habitación.

Caminando por los pasillos hasta llegar a las escaleras, baja lento, con gracia y glamur pues la chica antes era modelo de ropa.

Ella nació por decir en cuna de oro, padres con dinero, amorosos con ella, con buen cuerpo y no sé diga con unas facciones en el rostro que son de envidiar y a carácter pues es fuerte sus abuelos se encargaron de darle carácter y con ello humildad, sencillez, valores y todo eso.

Ya viajando el último escalón resbala, si no fuera por unos brazos que la tomaron de la cintura allá caído de lleno al suelo, voltea su rostro al que la está tomando, su rostro mostró preocupación, pero está no le tomo importancia y hablo.

— Me podrías soltar — dijo mientras hacía una mueca de desagrado.

— Lo siento — menciona Ernesto aún sin soltarla, escanea cada una de las facciones de Sofía, su corazón comenzó a palpitar como un loco y la soltó sin mostrar que lo alteró.

Suelta camino a la puerta sin darle alguna mirada, camina con toda la dignidad por delante y la detiene Ernesto.

— ¿A dónde vas? — Pregunto interesado haciendo que Sofía detuviera su paso.

— A un lugar donde no te importa así que no preguntes que no te voy a responder.

Dejando a Ernesto con la palabra en la boca camina a la puerta abriendo y saliendo de ahí dejando al tipo solo con una mueca de sorpresa tocando su pecho, para mas precisión el lugar donde va el corazón.

— Sofía que me estás haciendo — murmuró mientras tocaba el lado del corazón sintiendo su palpitar irregular sin percatarse de un par de ojos que veían la escena con coraje.

— Me las pagarás Sofía, todo lo que tienes pasará a mis manos como tú dulce esposo.

Y con una macabra sonrisa camino lentamente a la habitación donde comparte con el padre de su hijo.

Comenzó el juego Sofía

Se fue a recostar ideando como dar el siguiente paso.

Doloroso Amor "Editando"Donde viven las historias. Descúbrelo ahora