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Ernesto

La sola idea de pensar que Sofía es quien toca mi cuerpo, un escalofrío recorre mi ser.

No puedo dejar que me toque, solo con verle hace que a mi mente lleguen los recuerdos de cómo ha hecho que me casará con ella.

Después de la boda me había llegado un vídeo donde veía a mi "prometida" que se besaba con otro tipo, me había hervido más la sangre en ese instante, pero como mis padres querían que me casara con ella. Con su cara de mustia de que no mata ni a una mosca y se fue a revolcar con otro mientras el matrimonio estaba a la vuelta de la esquina.

No me tuvo respeto alguno, por ello mi comportamiento con ella, pero creo que lo que más me enfurece son sus estúpidas formas para tratar de "conquistarme" ja que ni lo piense.

Solo es otra chica mimada que se le dio todo y vio la oportunidad de casarse conmigo no desaprovechó la idea de desplazarse a mis brazos y utilizando el pretexto de unir a las familias usando mis padres ¿no? Creería que le saldría más fácil no, pues estuvo y está equivocada.

Pero la idiota no sabría que firmó un pacto con el diablo.

No me importa en lo más mínimo, la que más me importa es la persona que me llena que es esta chica que está en mis brazos.

Es tan maravillosa, su color de piel, su ternura, su forma de ser, pero lo que me llama más la atención de Rosa es que es demasiado bella, su belleza en incomparable, pero lamentablemente esta esa chica que su presencia me es insoportable, me harta con solo escuchar su estúpida voz.

No sé cómo es que mis padres pensaron que aceptaría de buena manera esta unión, ni loco estoy cansado de ella solo quisiera pedirle el divorcio, que se largue, que me deje en paz para poder tener en mis brazos libremente a mi novia a Rosa.

Pero lo que me he dado cuenta es que en ocasiones ella es un poco distante; sé que solo es por su trabajo, me ha dicho que se estresa demasiado con sus subordinados que no entienden a la primera y la comprendo en ese aspecto, porque, cuando estoy en la empresa y no hacen las cosas como son las digo o las hacen mal o de plano no entienden les tengo que reprender y pues les regaño y eso es muy estresante.

Siento como se remueve algo al lado mío y es Rosa que está comenzando a despertar y no entiendo si son las 12:00 am necesita y es necesario que descanse.

—Mm —soltó el quejido cuando restregó sus ojos con las manos —¿Qué hora es amor?

Su rostro es tan bello que deja atrás a la perla más hermosa.

—Son las 12:00 cariño ¿Porque?

—No, por nada solo quería saber y no creer que esto es un sueño.

—Claro que no, esto es real esto.

No terminamos la conversación cuando nos dimos un beso hambriento, ella de mí y yo de ella.

Tanto fuel el placer de sentirnos uno de nuevo que no aguantamos y nos volvimos a entregar, nos dejamos llevar por los toques.

Toque tras toque, beso tras beso, caricia tras caricia, la temperatura comenzó a subir y como toda pareja de enamorados no nos negaríamos a hacer el amor.

Así ocurrió, sucumbimos y nos entregamos a la llama del placer, Rosa levanto su cabeza y me sonrió en ello mi mente me jugo una mala pasada y una imagen se Sofía apareció reemplazando a Rosa.

Por inercia hice a un lado a la chica, ella me mandó una mirada de sorpresa.

—¿Qué es lo que pasa mi amor?

Mi cerebro por fin envío lo que estaba viendo actualmente y verifiqué que no estaba soñando restregando me los ojos, suspiré al ver que si efectivamente era una mala jugada de mi mente.

Reaccionó ante la dulce voz de Rosa —Nada solo que, nada vamos a dormir —me volteé dándole la espalda con el asunto en mi cabeza me pregunte ¿cómo es posible que la allá imaginado a ella si la aborrezco?

Ya no pensé más y mejor cerré mis ojos para tratar de dormir y así evitar pensar en el asunto.

Al día siguiente no pensé más en lo ocurrido en la madrugada, sin perder más el tiempo veo el reloj; son las 6:30 am en media hora sonaría el despertador para el inicio de un nuevo día; no perdí tiempo y me di una ducha, saliendo del baño con una toalla enredada en mi cintura, verifique de nuevo el despertador y solo tardé cinco minutos en asearme así que me cambie lentamente, desactive la alarma para el día de hoy, solo esperaré a que sean las 7:00.

Di una mirada al reloj y eran ya la 7 en punto, veo que Rosa está dormida le doy un beso y una caricia en su rostro, salgo de la habitación.

Llegó al primer piso y está totalmente solo, vacío y silencioso no hay ruido alguno, me siento intrigado ¿por qué? no hay movimiento, ni siquiera en la cocina.

Pues se extrañó ya que siempre Sofía le tenía su desayuno a tiempo y calientito.

Hasta que escucho un ruido en la cocina a paso apresurado se dirige a dónde escucha el ruido y ve que no es Sofía sino es la cocinera.

No entiende porque sintió algo de decepción al saber que no era quien esperaba y se sorprendió ante aquel sentir de él.

Doloroso Amor "Editando"Donde viven las historias. Descúbrelo ahora