Doloroso Amor "Editando"

13

Cuando Sofía se fue, dejando a su marido parado con la mano en el pecho ella solo saca las llaves de su bolso, toca el botón de los seguros y se abre dejándole abierta la puerta para que comience a manejar hasta el centro comercial donde conoció al chico de ojos verdes.

Aparcando el carro en el estacionamiento se baja y bajando los seguros y con su bolsa en mano entra a su destino que sería primeramente la pastelería donde venden su pastel que más le gusta.

Caminando lento por los grandes pasillos siente que le tapan sus ojos unas grandes manos que al simple tacto reconoce, volteando sus ojos los manda directo a la mirada del contrario y acertó era Luciel.

— Hola bella dama que gusto encontrarte aquí — Sofía sonrió ante tan bella manera en que le hablo.

Una sonrisa cargada de nostalgia se posó en su rostro, Luciel por supuesto que ni pasó desapercibido esto y lo usaría a su favor para enamorarla rápido.

— ¿Qué pasa bella dama?, ¿Por qué esa mueca de tristeza?, Sabe que las princesas como usted no deben de tener eso verdad.

Mentira, mentira, me tira todo lo que le decía Luciel pero ella no se dio cuenta no se daría pues Luciel es muy buen actor para hacer caer cualquiera a sus pies y ahora ese cualquiera es nada más que Sofía.

— Oh no pasa nada Luciel.

Dijo aquella mujer con el corazón recientemente roto por tanto ajetreo que ha sufrido hace algunas horas.

Luciel solo hace una mueca de que entiende, pero es todo lo contrario por dentro de regocija por el sufrimiento de la chica, no obstante, cuando la ve derramar una lágrima y que sus ojos perdieron el brillo de cuando la conoció días atrás no pasó desapercibido el movimiento de sus entrañas al ver el rostro de la chica todo rojo.

Mas solo se voltea a otro lado para no confundirse y no hacer más difíciles las cosas para que su plan se lleve a cabo, no, no puede arrepentirse no ahora que ya han llegado lejos y no lo va hacer no cederá ante ese extraño sentimiento que se comienza albergar en el pecho con solo ver el rostro de Sofía.

*****

Por otro lado, esta Ernesto aun con la mano pegada en el pecho, aun el tonto no entiende porque Sofía le altero de esa manera si él tiene novia y tendrán un hijo, debería estar feliz ¿no? Tendría que estar saltando de felicidad por la noticia que le dio Rosa.

Pero es todo lo contrario, cuando esta le contó la noticia lo que quería era que fuera una total mentira o una broma de ella y no si sangre cayó al piso junto con sus ganas muy repentinas de estar junto a Sofía.

Su corazón le dicta que corra tras Sofía, le exige que valla y la detenga antes de que se valla, pero es tarde escucha el rugir del auto ya no puede hacer más que ir a su cuarto donde le espera una mujer embarazada sin saber la verdad tras todo este embrollo.

*****

En un lugar lejos de Sofía y la casa de Ernesto se encuentra un tipo observando unas fotos revientes de la chica donde se encuentra con Luciel platicando antes de que se enterará de que su esposo, seria papa y el niño no sería de ella.

Aquel tipo misterioso es quien ha tenido en la mira a Sofía junto con Ernesto en él se alberga un odio tan profundo a él más que nada por quitarle a la persona que ama, se volvió loco cuando se enfrió de que Sofía contraería matrimonio con un tipo que no era él.

Su rostro se encontraba totalmente obscuro, no se veía cual era la forma de este, sus facciones eran distorsionadas por la obscuridad en su oficina.

Su cabeza se llenó de recuerdos donde pedía a gritos que no era verdad de que se casaría, lloro por días enteros llorando por qué no lo escogió a él si era guapo, con dinero, mucho dinero no espera para dar el siguiente paso, la siguiente bomba, pues ara que el matrimonio se destruya se desmorone y el entrara en acción, no es preferible que actúe mezclándose entre ellos aún está pensando dicha estrategia no quiere ser descubierto.

Muchos le han dicho que está enfermo, pero no él está sano según él, su identidad aún no es descubierta ni siquiera los que trabajan para el incluyendo a Rosa y Luciel, pero se dejara ver, no aun no es tiempo.

Concentrado en ver y fantaseando asiendo en su cabeza pensamientos impuros con respecto a Sofía le llaman a la puerta asiendo que soltase un gruñido de insatisfacción y molestia con sus empleados.

Gruñendo solo acata a decir

—Pase — su voz sonó rasposa y ronca.

Un hombre vestido de traje junto a un maletín.

— Tome asiento y cuente lo que sabe.

— Bueno — hablo el tipo con buen porte — solo sé que han tenido unas fuertes discusiones últimamente es lo único que tengo sabido.

El hombre sólo asintió moviendo la cabeza y le indicó que se fuera y así lo hizo, a paso un poco apresurado camino a la salida mientras hombres del tipo le tapaban la cabeza con una bolsa de plástico y lo sacaban fuera del lugar.

El tipo ya fuera de ahí, el hombre que se encontraba aún hay bajo la obscuridad volvió a recargarse en el respaldo de la silla, y este tomando la fotografía de Sofía entre sus manos pálidas y huesudas y soltando un suspiro solo se atinó a decir.

— Serás mía Sofía de una o de otra manera, aunque sea lo último que haga.

Al termino de decir aquello soltó la fotografía, abriendo uno de los cajones de su escritorio buscando una caja, encontrando dicho objeto lo saca de ahí.
Abriendo esta con lentitud dejando ver su contenido cigarrillos pero no cualquier tipo de cigarrillos no sino puros, tomando uno y llevándoselo a la boca y con un fósforo que se encontró hay lo encendió llevándolo al puro.
Dándole una calada y tirando el fósforo toma de nueva cuenta la fotografía soltó el humo y continuó diciendo.

— Pronto nos encontraremos juntos amor mío.