-No debería molestarte que otros fracasen en apreciar tus habilidades, debería molestarte fracasar en reconocer las habilidades de otros.
-El hombre de sabiduría nunca tiene dos mentes. El hombre de benevolencia nunca se preocupa. El hombre de coraje nunca tiene miedo.
-La salida es a través de la puerta. ¿Por qué será que nadie usa ese método?
-Dale a un hombre un bol de arroz y lo alimentarás por un día. Enséñale a que cultive el arroz y le salvarás la vida.
-Ten la fidelidad y la sinceridad como tus principios principales.
-Mejor un diamante con una falla que una piedra sin ninguna.
-Para poner el mundo en orden, primero tenemos que poner la nación en orden. Para poner la nación en orden, primero tenemos que poner la familia en orden. Para poner a familia en orden, primero tenemos que cultivar nuestra vida personal.
-Para empezar, tenemos que poner nuestros corazones en el lugar correcto.
-Un león me persiguió e hizo que me subiera a un árbol, y yo con gusto disfruté la vista desde la cima de este.
-Ser rico y honrado en una sociedad injusta es una desgracia.
-Si tu plan es para un año, planta arroz. Si tu plan es para diez años, planta árboles. Si tu plan es para cien años, educa a los niños.
-Cuando el hombre sabio apunta a la luna, el necio se queda viendo el dedo.
-Si no se conoce la fuerza de las palabras, es imposible saber más.
-Es fácil odiar y es difícil amar. Así es como funcionan las cosas. Todas las cosas buenas son difíciles de lograr, mientras que las malas son muy fáciles de alcanzar.
CONFUCCIO