Te confieso que sin ti no se seguir

10. Atacado por mis sentimientos

Podía haber estado así durante una eternidad, pero no, tuvo que llegar la pelirroja aguafiestas carraspeando. Al escucharla, Erica se levantó y me miró sonrojada. Yo me levanté y la miré y miré también a la pelirroja:

-Bueno... Erica, Camila, me voy-dije, enfatizando en el segundo nombre

-Si, va a ser lo mejor y ¡¡¡ME LLAMO KYLIE!!!-dijo con desdén lo primero y gritando lo segundo.

Antes de salir, miré a Erica. Seguía sonrojada y se había quedado helada. Viendo que no salía, Kylie me miró con una falsa sonrisa y me empujó hasta la puerta y, cuando consiguió que saliera, me estampó la puerta en las narices.

Bajé las escaleras y me encontré al padre de Erica, Matthew.

-Hola Robert. Que crecidito estas.-dijo con su acento americano. Matthew, en realidad, era de Estados Unidos pero, al conocer a Haley, se mudó aquí y formó una familia con ella.

-Ya me lo han dicho.-dije sonriendo

Abrí la puerta y me fui. Viendo lo que había pasado, ¿como iba a olvidar a Erica? Decidí ir a ver a Chad a su casa y contarle lo ocurrido.

Cuando llegué, me abrió el. En ese momento, estaba solo. Al parecer, su madre había ido a visitar a su padre, ingresado en el hospital por un accidente de coche.

-Hombre, el seňor yo-no-me-enamoro. ¿Como esta usted?-dijo, soltando una carcajada

-Ja ja ja, muy gracioso, seňor cómico de las narices. Lo que tengo que decirte no es gracioso.-le escupí

-Anda, entra y, tranquilamente, me cuentas lo que te pasa-dijo dejándome pasar

Entré y me senté en el sofá. Antes de llegar, al parecer, Chad había estado viendo una película y ahora estaba pausada. Cerró la puerta y se sentó a mi lado y, quien dice sentarse, dice repantingarse.

-Bueno, ¿me lo vas a contar ya o que?- me instó

-Ah, si. Lo olvidaba. Lo que pasó es que, para poder sacarme a Erica de la cabeza, fui a verla, pero estaba pintando y con ella estaba Kylie y...

-Espera, ¿fuiste a casa de Erica y viste que estaba con Kylie? Esa chica te odia-me interrumpió

-Si, estaba allí, y si, se que me odia pero, ¿y yo que sabía que la pelirroja esa iba a ser su amiga? Bueno, ¿Quieres que continúe, si o no?

-Vale, vale. Continúa

-El caso es que me he puesto a pintar con ellas y- abrió la boca para decir algo pero le callé-entonces, cuando hemos acabado, he dejado el rodillo en el suelo y Erica, al salir de la habitación, se ha tropezado con eso y se ha caído encima mía, provocando así un abrazo un tanto incómodo. Eso es lo que ha pasado

Echó la cabeza hacia atrás y pasó la mano por su pelo rubio, me miró y me dijo:

-Amigo, te entiendo pero, ¿a donde quieres llegar con todo esto, eh?

El sabía que pasaba pero quería regodearse en su victoria. Lo veía en su mirada.

-Lo que quiero decir es que podrías tener razón y yo podría sentir algo por Erica-suspiré resignado.