La tentación antes de llegar al altar

Fin de semana de playa (parte 2)

Meghan.

Había aprovechado para dejar mi maleta en el sofá de la habitación y tirarme a la cama, el día de ayer estaba molesta, molesta por el imbécil del novio de Charlotte y porque la rubia no había tenido la decencia de quedarse y despedirse, solo se fue con él dejándonos en el hotel, pero al verla llegar a la mansión apenada y triste, el que se haya quedado de madrugada platicando y el tonteo de hace un rato hacía que se me pasara el enojo, definitivamente la rubia me gustaba y ya no podía estar negándomelo. La tenía al lado, le había dado esa habitación con toda la intención era de las mejores y tenía vista al mar, bueno todas tenían vista al mar pero esa era una de las mejoras y ni mencionar el baño con bañera, joder solo de pensarla ahí todo se me olvidaba, definitivamente me hacía falta sexo, pero estaba en una especie de parón justo cuando conocí a Summer, habíamos repetido más veces y era casi tácito el acuerdo de mantener una exclusividad sexual sin llegar a ponerle nombre, no estaba lista para ponerle algo especifico y parecía que la pelirroja estaba de acuerdo porque no había puesto pegas en ningún momento y por mi parte me gustaba mensajear un par de veces al día, saber como estaba y que hacia, era algo que no había tenido hace mucho tiempo.

Aún así Summer no me atraía como lo hacía Charlotte, pero era un caso perdido porque sabía que estaba con Joseph.

No podía dejar de darle vueltas, por lo que decidí sacar a Chase, Max y Brice para ir a surfear, necesitaba despejarme y necesitaba a mis tres consejeros, así que me decidí y salí a la habitación de Chase.

- Rápido, surf ahora – le dije para qué alistara sus cosas.

- Joder ¿qué pasa?

- Reunión apresúrate voy por los otros dos.

- No hace falta estoy listo, vi venir esa reunión desde que llegamos – Max estaba en el marco de la puerta con una camiseta, bermudas y sandalias.

- Eres raro – lo moleste – pero me agradas, debe ser conexión de hermanos.

- Ve por el otro idiota, yo apresuro a este – dijo señalando a Chase.

Salí de la habitación a paso ligero y escuchando detrás de mi las quejas de mi mejor amigo por llamarle idiota, en fin si lo eran pero los necesitaba, hice lo mismo que con Chase, solo esperaba que mi hermano y su mujer no estuvieran haciendo cositas... aunque ver a Esther...pero mi hermano que asco.

- Te habías tardado, solo estoy preparando la mochila – me dijo Brice sonriente y metiendo unas toallas en esta.

- ¿Qué les pasa el día de ahora que no han necesitado que venga a decirles nada?

- Se llama intuición de hermano, lo supe desde ayer – dijo encogiéndose de hombros – por cierto las tablas están en la parte trasera del patio.

- Lo sé las pusimos nosotros ahí – le dije poniendo los ojos en blanco – ya estas viejo hermano estas teniendo problemas de memoria.

- Tu estas entrando a los treinta quiero verte – me reclamo resoplando – apresúrate, llevo ya todo listo.

- Si papá Brice, ¿llevas una toalla para mí?

- Siempre lo hago rockstar – me dijo riendo.

Nos reunimos con los otros dos al inicio de las escaleras y como tantas otras veces nos escabullimos rápido hasta llegar a la pequeña bodega donde estaban nuestras tablas, una Chubby Chedda del estirado de Max, una Hypto-Krypto del tarado de Brice y su manía con las tablas anchas y por supuesto las dos más hermosas Fun Divison Long de Chase y mía, las tomamos y corrimos como niños a la playa, los chicos se quitaron las camisetas y corrieron, dejándome atrás para quitarme la ropa y quedar en traje de baño, la verdad era bastante especial en ese sentido y no me gustaba dejar tirado todo en la arena, así que la doble y la acomode sobre los bolsos para que no se llenaran tanto. Corrí en su dirección y me adentre a la playa.