save me / shawn mendes

« Elliot »

"Elliot"

2 años atrás.

Domingo, 4 de agosto.

1:08 pm

Los Angeles, California, Estados Unidos.

- Elliot, ¿podrías bajar la velocidad por favor? ¡Vamos a chocar! -le comente nerviosamente.

- Calmate Amber. -dijo el de la manera mas tranquila posible. - No es como que vamos a chocar contra un árbol nena, asi que solo toma mi mano y disfruta de la adrenalina. -dijo Elliot mientras me agarraba la mana y depositaba un beso en ella.

- Okay, pero si llegamos a chocar y sobrevivimos los dos, voy a decir que me secuestraste, y claro, presentare cargos. -dije con una sonrisa traviesa en mis labios.

- ¿ Qué tal si yo digo que tu me secuestraste y me violaste? Y después digo que me obligaste a conducir, y en el viaje, no parabas de gritarme y eso provoco el choque. -dijo el mientras reía. - No, espera, mejor aun. ¿Que tal si chocamos y los dos morimos? Y así, vamos estar en todas las noticias, "Adolescentes enamorados mueren en un choque". ¿Huh? -dijo orgullos de su idea.

- Lo que pasara es que Android será huérfana, y no pienso dejar a nuestra hija en manos de Charlie, ni muerta. -dije mientras me imaginaba a Charlie cuidando de Android.

- Cierto. -dijo mientras soltaba una carcajada. -¿Qué? ¡No! Se me esta a punto de acabar la gasolina y solo tengo, como 2 dólares. -dijo el preocupado.

-Tranquilo, estaciónate en la siguiente gasolinera y yo pago. -le dije para poder calmarlo y voltee a la ventana para poder ver los edificios.

Minutos después, ya estábamos en la gasolinera. Me ofrecí para ir a pagar dentro de la tienda mientras el se quedaba junto al carro.

Entre a la tienda y fui directo a las cajas. Mientras la señorita hacia la factura, yo agarre unos Kit Kat para Elliot y pague por ellos. Al salir, vi que dos hombres le estaban gritando a Elliot e intentaban sacarle cosas de los bolsillos de su chaqueta y pantalón.

-¡Ey! ¡Dejenlo! -grite mientras corría hacia ellos rápidamente. Ellos al notar mi presencia, me miraron alarmados, y uno de ellos saco una pistola. -¡No, no, no! ¿Quieren dinero? ¡Aquí esta! -dije mientras les daba mi bolso nerviosamente. El que no tenia la pistola, tomo mi bolsa rápidamente y ambos salieron corriendo, pero antes de que pudiera soltar un gran suspiro de alivio, escuche el disparo.

Voltee a ver a Elliot y vi que se estaba reincorporando en el carro mientras hacia presión en su abdomen. Sin duda, corrí los metros que me faltaban para llegar a el y lo sostuve en mis brazos.

-¡Elliot, Elliot, no! ¡Ayuda! -grite desesperadamente mientras las lagrimas caían por mis mejillas al verle al amor de mi vida muriéndose. -¡Elliot! ¡No te atrevas a cerrar los ojos! ¡No me dejes Elliot! -dije mientras lo abrazaba y salía la señorita que hace unos momentos me había atendido con un teléfono en sus manos y con la cara de espanto.

- Shhh, Amber.- dijo el débilmente mientras ponía un dedo en mis labios mojados por mis lagrimas para callarme. - Prométeme que vas a volver a encontrar el amor y que no te vas a aferrar a mi, prométeme eso. -dijo el, claramente estaba batallando para decir esas palabras. Le dolían, y no solo fisicamente, sino también psicológicamente.

-No, no, no. No necesita prometer eso, por que tu vas a estar bien. -dije mientras le agarraba las manos, que estaban un tanto frías ahora. Mis lagrimas no paraban de salir, parecía que no tenían fin. -Vamos a tener 10 hijos, vamos a vivir en una montaña alejados de todos, vamos a ser felices. -dije con el nudo mas grande en mi garganta.

-Sabes que no voy a estar bien tesoro. -dijo el mientras hacia una cara de dolor y salían las lagrimas de sus ojos. Sus latidos se volvían cada vez mas lentos y su voz se volvía mas baja y débil mientras decía: -Yo siempre te voy a querer, para siempre, por favor, siempre recuerda que, aunque no este aquí, siempre te amare, siempre y para siempre.

- Elliot, no me dejes por favor, no puedo vivir sin ti, por favor. -le supliqué, mientras lloraba en su pecho. Se dejaron de escuchar sus latidos y sus ojos habían perdido ese color. -¿Elliot? ¿Elliot? ¡No! No te puedes morir, ¡no puedes! -grite con un nudo en mi garganta y después intente hacer presión en su pecho, esperando el milagro de que el volviera, pero esto es la realidad. - No, no, no. -llore, incapaz de poder controlar mi respiración y sintiendo el vacío mas grande dentro de mi.

6 días después

Me pare de mi asiento y me dirigí hacia la tribuna, al estar ahí solté un suspiro de tristeza.

-Ayer en la noche, estaba extremadamente nerviosa. Me preguntaba, "¿Qué voy a decir mañana?". Estuve hasta alta horas de la noche enfrente de mi escritorio, una hoja y mi bolígrafo. Intentando pensar en algo, pero las palabras no venían a mi. Y entonces pensé que no necesitaba una hoja donde escribir lo que iba a decir, simplemente voy a decir lo que se me venga a mi mente. -dije a travez del micrófono.

- Conocí a Elliot cuando tenia 13. Estaba en clase de matemáticas, sentada a un lado de mi mejor amiga, Miranda, y a un lado de mi había un niño. Recuerdo que le reclame que ese era el asiento de mi otra amiga, Evelyn, pero el solo rodó los ojos y se volteo. -dije con una sonrisa al recordar ese día. - Minutos antes de que se acabara la clase, ese niño me pregunto mi nombre y yo estaba enojada con el porque se había robado el asiento de Evelyn, pero el si me dijo su nombre, se llama Elliot Sumers. Recuerdo que el paso toda una semana intentando saber mi nombre, y bueno, lo supo. Empezamos a juntarnos y sin darnos cuenta, empezamos a tener sentimientos entre nosotros. Se convirtió en mi mejor amigo, sabia todo de mi, y yo sabia todo de el. Un día de diciembre, cuando yo tenia 14 y el 15, estábamos viendo Shrek, me pregunto si quería ser su novia. Honestamente, me asuste, pensé que estábamos muy chiquitos para el noviazgo y que no iba a funcionar, pero al final, le dije que si. -dije mientras lagrimas salían de mis ojos.

-Desde ese día, me sentí viva, el me hacia sentir de esa manera, y si, éramos muy pequeños todavía, pero se sentía tan bien. Cuando cumplió 16 el, obtuvo su carro, y desde ahí no lo soltó. Iba con el a todo lugar. Recuerdo que siempre que íbamos en su carro, el ponía el disco de Coldplay y cada vez que salía "Yellow", el se emocionaba y subía todo el volumen. Me decía que el me dedicaba esa canción, pero no se por que nunca le daba importancia a eso. El miércoles, me puse a escuchar todas las canciones de un disco que el había hecho para mi. Fue algo masoquista a decir verdad. -dije mientras me sonaba la nariz y me limpiaba las lagrimas.

- Y ese día, cuando escuche la canción, recordé como el siempre me decía que nos íbamos a mudar a una casa en las montañas junto con Android, nuestra cachorra. Planeamos en mudarnos a la casa en las montañas, tener 10 hijos, jugar con ellos a las escondidas, acompañarlos a su primera clase de natación, escoger sus disfraces para Halloween, pero al parecer eso no pasara. Pienso en el, y tengo la imagen de un joven alegre, vivo, carismático, amable. Siempre decíamos que los dos íbamos a morir juntos, pero he me aquí.

-Lo ultimo que el me dijo fue que el siempre me iba a amar, no importa si no estaba aquí. Me hubiera gustado que el escuchara esas palabras antes de morir, pero no fue posible. Así que,-dije mirando arriba-en cualquier lugar que estés ahorita mismo, solo quiero decirte que yo siempre te amare. No importa donde estés. -dije mientras mas lagrimas caían de mis mejillas y me bajaba de la tribuna, para después lanzarme a los brazos de Miranda y desahogarme.

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N/A:

En este capitulo, como verán, explico que paso con Elliot:(

Perdón por no haber subido por casi un mes completo, ¡lo siento! Pero ya volví;)

Espero y les haya gustado el capítulo, voten y comenten por favor(:

-danny xoxo

pd: ¡Mas de 6K leídas, gracias lindas!😭💞

pd2: me medio inspire con una cancion llamada Forever & Always, esa cancion es oro:(