XXXII

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Culpa

La última semana de clases mantiene estresado a cada estudiante que circula por los pasillos de la universidad, con la obligación de aprobar las materias para luego disfrutar de las vacaciones de verano. Algunos se cuestionan en qué invertirán el tiempo libre, en si deben seguir estudiando para el próximo semestre, tomar un trabajo de medio tiempo o, simplemente, descansar. JungKook lo tiene claro, días atrás lo conversó con TaeHyung y, emocionados, acordaron viajar a Busan, permanecer una semana ahí sin nadie que los moleste. Sin embargo, el merecido descanso parecer estar lejos de ser lo que motiva a JungKook en esos momentos. Ni siquiera piensa en sus vacaciones ni en los resultados del examen que rindió durante la mañana. Alejado de todo pronóstico, JungKook se ve estresado no por los estudios, sino que por el revuelo que siente en su cabeza, en los problemas que lo han aquejado y que ahora, frente a la oficina de TaeHyung, siente que se desbordarán ante la inestabilidad de sus emociones.

Durante el almuerzo había conseguido hablar con JiMin, aunque no contaba con el hecho de que HoSeok estaría ahí, que JiMin había revelado su secreto y que HoSeok estaba a la espera de explicaciones. Se suponía que eran amigos y se contaban todo, reprochó HoSeok para luego agregar que no podía creer en su irresponsabilidad. Irresponsabilidad, saboreó JungKook aquella palabra y se sintió juzgado, incomprendido. Su relación con su primo no es un capricho y, explicarse, pareció ser un suplicio y a la vez una molestia porque el azabache alegó que no debía justificar su actuar, que lleva años enamorado de TaeHyung y que por más que había luchado por no caer ante sus sentimientos, hubo un momento en que no lo soportó más. Reconocía que fue terco y que debió reprimir lo que sentía, pero que al final de cuentas no pudo, que por más que deseó alejarse de su primo, éste ejercía en él una fuerza de atracción imposible de evitar. Luego, HoSeok intentó hacerlo recapacitar, que si su familia se enteraba todo terminaría en sufrimiento. Sin embargo, JungKook rebatió diciendo que está dispuesto a asumir las consecuencias.

¿TaeHyung está dispuesto a asumir las consecuencias?, fue la pregunta de JiMin a la que JungKook no supo cómo responder y, ahora que está frente a su oficina y a través del ventanal puede verlo conversar con YoonGi, todo en su estómago se revuelve y recuerda una y otra vez aquella pregunta ¿Está dispuesto TaeHyung? ¿Qué hará TaeHyung si sus padres se enteran de su relación? ¿Por qué justo en esos momentos YoonGi está ahí?



Enfadado, notoriamente celoso, JungKook cuenta hasta diez y toca la puerta para luego ingresar. No obstante, por más que quiere ocultar el malestar que le produce la presencia de YoonGi, éste no le hace la tarea fácil.

— Justo estábamos hablando de ti —es el de piel pálida el primero en romper el silencio y se pone de pie, al igual que TaeHyung.

— ¿Qué haces aquí? —pregunta JungKook para después golpear la mejilla con su lengua y cruzarse de brazos.

— Aconsejo a mi mejor amigo, ¿y tú?

JungKook frunce el ceño con la intención de no responder a su pregunta y, en cambio, observa a TaeHyung a la espera de una reacción por parte de él. La noche anterior habían acordado en reunirse para hablar acerca de la conversación que entablaría JungKook con JiMin, mas el castaño nunca esperó que el azabache llegara a su oficina.

— ¿Me vas a ignorar? —sonríe YoonGi.

— Suga... —TaeHyung hace el intento por detener a su amigo, pero es demasiado tarde.

— Imagino que has venido a cortar tu absurda "relación" con Tae.

— ¿Q-qué estás diciendo? —incrédulo, JungKook abre los ojos y alterna la mirada entre YoonGi y TaeHyung.

BAD BYE │KOOKV。o○.。o○.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora