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Ya llevaba el último puño de expedientes, sentía mi libertad acercarse lentamente

- Déjame ayudarte con eso - sentí unas manos quitándome los expedientes
- Soy Gabriel - lo miré, lo habíamos saludado cuando mi madre me llevó a presentarme
- Gracias - respondí un tanto aliviada

- No vienes mucho por aquí ¿cierto? - comentó mientras íbamos hacia con Álvaro

- No, venía más cuando era pequeña - contesté, lo miré mientras caminábamos, también era lindo, no tanto como Alexander, además se notaba que era más joven

- ¿Cuánto tiempo llevas aquí? - pregunté, ya que a él no lo había visto nunca
- Muy poco, seis meses más o menos, sigo estudiando y aquí me dieron la oportunidad - sonrió de lado

- ¿Ya es lo último? - gritó Álvaro al vernos
- Si - regresé el grito, al momento me arrepentí ya que mis papás eran muy estrictos en cuanto al ruido que podía haber, pero al no escuchar reproche inmediato me tranquilicé

- Que caballeroso Gabriel, ya conociste a Lina, muy bella no crees? - miré curiosa a Gabriel para ver que respondía, pero un azote nos interrumpió
- Álvaro registra estos - todos volteamos y vimos a Alexander, parecía enojado
- Carolina, tus padres te buscan - completó, miré a Álvaro quien solo se encogió de hombros, me despedí de Gabriel y fui al privado de mis padres

- Mand..-
- Que te hemos dicho de gritar - resistí mi impulso de rodar los ojos, no quería que me regañaran aquí
- Perdón me dejé llevar - contesté seria para después sentarme

Malena
Muy bien, ya que no me has contestado empezaré a contarte el plan, tú y yo en mi casa, el viernes, pijamada, escape.
Se lo propuse a las demás pero lo del escape no les pareció mucho jaja

Carolina
Escape? A qué te refieres con eso?

Malena
Tú solo pide permiso para venir a dormir te traes un cambio para salir en la noche, acá te cuento lo demás ;)

Bloqueé mi celular, ok, Malena de vez en cuando hacía locuras, pero esta vez no tenía la más mínima idea de su plan

- Recoge tus cosas Carolina, ya casi nos vamos - dijo mi madre mientras guardaba unos documentos en un cajón, me levanté y tomé mis cosas.

Al parecer mi padre se iba a quedar más tiempo, ya que estaba muy concentrado en un asunto; me despedí de él y comenzó el recorrido de despedida, debo confesar que ciertas formalidades me enfadan.
Llegamos a cada uno de los privados, hasta que llegué al de Alexander, los lugares eran grandes , al entrar Gabriel estaba con el, tal vez estaba ayudándole

- Caro y yo nos retiramos - exclamó mi mamá cuando entramos, Alexander se levantó de inmediato, Gabriel solo se acercó, mi madre fue la primera en despedirse y seguí yo, Gabriel parecía nervioso, tal vez por la presencia de mi madre pero Alexander estaba tranquilo, me acerqué y tuve que pararme de puntitas para despedirme, lo que provocó que el pusiera una mano en mi cintura, me separé extrañada y el solo se aclaró la garganta

- Entonces discutiremos el caso hasta mañana - dijo para romper el silencio incómodo que estaba formándose, mi madre asintió y salimos.

El Bufete SáezDonde viven las historias. Descúbrelo ahora