7- argue with me
7-discute conmigoCuando salimos del baño, nos encontramos con los chicos sentados en una ronda al rededor de una linterna. Al lado de la luz se encontraba un plato con cinco sándwiches. "Gracias a Dios que hay algo para comer".
Me volteé y vi a Bri secarse las mejillas con el dorso de las manos. Sus ojos estaban menos hinchados y rojos de lo que estaban antes.
–¿Está todo bien?–que observadora era ZhenZhen, ella se había dado cuanta de que algo estaba mal.
–Si–yo sabía que no estaba todo bien, y a juzgar por la expresión de la chica, ella también sabía que mentía.
Los dos que estábamos parados tomamos nuestros respectivos asientos y comimos con los demás. A decir verdad, los sándwiches no estaban mal. Incluso Dariush encontró un jugo de uva en la heladera, así que estábamos teniendo una noche de "picnic".
–Lamento haberte pegado–rompió el silencio Gabriel, quien se encontraba acostado con la cabeza sobre mis piernas.
–Descuida–podía aceptar las disculpas, tal vez no era tan malo como pensé–. Me duele más ver esta porqueria en mis tenis nuevos–y ahí está el Dariush que conozco.
Los chicos y Zhen Zhen hablaban pero yo no prestaba atención. Estaba recordando todos los acontecimientos que nos habían llevado a este momento. Un golpe de cabeza, un encuentro en la comisaría, un abrazo lleno de recuerdos, el encuentro con militares, el escape de aliens... maldita sea, lo había olvidado. El arma y los cartuchos estaban en mi mochila, eran muy valiosos como para caer en manos de cualquiera.
–¿Recuerdan donde dejé mi mochila?–todos me miraron debido a la interrupción.
–La habías dejado en el sillón–dijo el muchacho cuya cabeza descansaba en mi regazo.
–Si, la dejaste ahí y la llevé a la cocina–dijo ahora Alex. Con esa información corrí gentilmente la cabeza de Bri y me incorporé dejando a los demás seguir con su conversación. Efectivamente, en la mesada de la cocina se encontraba mi mochila; solo esperaba que Alex no haya tocado nada. Abrí la mochila con el corazón en la boca, pero cuando divisé el arma de fuego y su cartucho, mi corazón volvió a su lugar. Suspiré de alivio y aproveché el momento para revisar el resto del contenido de mi mochila.
–¿De donde la sacaste?–"No puede ser" pensé.
–Se la saqué al soldado–le contesté al intruso.
–Sabes que no me gustan esas cosas–dijo sabiendo que él era mi punto débil.
–Si, lo sé–reconocí mientras me volteaba. Sentí un dejavú recorrer todo mi cuerpo al ver a Bri con los brazos cruzados mientras me miraba con reproche. Él y yo ya habíamos tenido esta conversación y no la íbamos a tener otra vez. Tomé el arma y los cartuchos y los guardé en la mochila. Si no los veía no le harían daño.
–Tienes que deshacerte de ella.
–No puedo. Tal vez nos sea útil.
–Si, o tal vez haga que nos maten–con cada palabra Bri se acercaba más.
–No quiero que caiga en manos equivocadas–su miedo por las armas de fuego era entendible, él había sufrido mucho a causa de ellas, pero su miedo lo estaba volviendo irracional.
–¿No te das cuanta que ya cayó en manos equivocadas?–estábamos frente a frente. Nuestras rodillas se rozaban y sus manos se posaron en el mármol detrás de mi– No quiero que salgas lastimada.
–Voy a estar bien–a pesar de lo que su cercanía me causaba, logré alejarme de Bri con el arma en la mochila, la cual colgué en mi espalda. Me senté en la ronda y Gabriel no tardó en imitarme.
–Que bueno que la encontraste–ZhenZhen sabía que ocultábamos algo, su expresión la delataba–. Estábamos por sacarnos una foto–explicó la niña mientras alzaba una cámara de fotos antigua; era de la mamá de Bri. Él y yo nos habíamos sacado decenas de fotos con ese aparato. Todos nos acercamos para entrar en la imagen, la chica apretó el botón y clic. Un recuerdo instantáneo.
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Este capítulo es más corto que el resto, pero no le vi necesidad de seguirlo. Me parece que es una buena cantidad.
El próximo capítulo me tiene muy emocionada, y seguramente lo suba mañana y sea más largo de lo usual para compensar este, así que estén atent@s.
Gracias por leer y no se olviden de votar💫
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Save me
FanfictionEl terror reinaba tras la alerta de evacuación. La ciudad entera estaba intentando evacuar y, como es de esperarse, todo se convirtió en un caos. Max había ido a la comisaría de la ciudad a visitar a su mejor amigo, cuando una alerta de evacuación...