8- without me
8-sin mi–Ya deja de jugar con eso–dijo Dariush dirigiéndose a Alex, quien jugaba con un cubo rubik.
–No puedo–el pelirrojo estaba nervioso... o ansioso; tal vez ambas. A diferencia de Bri, Alex si mostraba lo que sentía, incluso a veces exageraba. Su respiración era rápida y arrítmica, su cuerpo se movía de lado a lado en la habitación, y sus dedos no dejaba de mover el cubo.
–No entiendo por qué estás tan nervioso–dije mientras me apoyaba en el escritorio de la habitación. En ella solo habían dos camas, una para Gabriel y otra para su madre. Obviamente estaríamos incómodos para dormir, pero encontraríamos la manera de arreglarlo.
No obtuve respuesta, ya que el ruido de la puerta llamó la atención de todos. ZhenZhen estaba entrando en la habitación con un pijama rojo. "¿De donde diablos sacó eso?" No era algo común para decir verdad, yo jamás me lo pondría; pero a la chica asiática no le quedaba mal. Dirigí mi vista hacia los chicos y pude ver cómo Alex la miraba. No era una mirada cualquiera, era distinta. Él la miraba con anhelo y asombro. El pelirrojo estaba embelesado con aquella chica, y a juzgar por como ella lo miraba, el sentimiento era mutuo.
–¿Quien va a dormir conmigo?–preguntó la recién llegada, a lo que los chicos y yo intercambiamos miradas. ZhenZhen se recostó en una de las camas esperando su respuesta, pero no habíamos debatido quién dormiría con quien aún.
–A la cocina–ordené, pero ellos no reaccionaban–, los tres–me obedecieron y se retiraron de la habitación conmigo cerrando la fila.
Cuando los chicos estuvieron dentro de la cocina, cerré la puerta y me volteé.
–¿Po-por qué nos trajiste aquí?–preguntó el chico nervioso.
–Hay que decidir cómo dividimos las camas.
–¿Y qué hay de ZhenZhen?–él siempre pensando en ella.
–No creo que le importe mucho.
–El pelirrojo tiene razón, por lo menos hay que preguntarle–Dariush salió de la cocina y entró a la habitación, de la cual se escuchaban susurros–. Si, dice que no le importa–confirmo el chico al entrar.
–Max y ZhenZhen deberían dormir juntas ¿no?–sugirió Alex a los demás. Yo no tenía problema en compartir la cama con ella, pero podía notar en la voz del pelirrojo cuanto quería él tomar mi lugar. Alex no creía lo que dijo, él quería ser el que se acostase junto a ella.
–No lo tomen a mal, pero prefiero no dormir con alguien que conocí hoy–no era del todo una mentira. Además, yo quería dormir con otra persona.
–Yo ofrezco mis servicios–dijo Dariush–. Soy el que tiene más experiencia.
–¿Con los rechazos?–era gracioso que las primeras palabras de Bri en esta conversación habían sido un insulto hacia el chico de color– Alex debería dormir con ella–parecía que me leía la mente. La otra persona que había sido insultada lo miró confundido–. Tienen una conexión.
–¿La tenemos?–preguntó asombrado el chico que había sido nombrado. Fue completamente ignorado y la conversación continuó.
–No seas un obstáculo–intervine.
–Está bien, no seré un obstáculo–gracias a Dios, pensé que tardaríamos mas tiempo en convencerlo–. Se libre–dijo mientras miraba entre las piernas del pelirrojo.
–Eso no era necesario–dije.
–Entonces, ¿los tres dormiremos en la misma cama?–preguntó Gabriel, a lo que yo asentí. Las camas no eran muy angostas, y si dormíamos los tres de lado entraríamos tranquilamente.
Dariush y Alex se retiraron de la habitación; supuse que para cambiarse, así que Bri y yo habíamos quedado solos otra vez. Como en los viejos tiempos.
–No creas que no sigo enfadado contigo–¿quien se creía que era? Él no tenía ningún derecho a estar enojado. El arma y mi seguridad eran mi responsabilidad y Bri no tenía por qué meterse en ninguno de los temas.
–Pues yo también estoy enfadada–levantó sus cejas, no se esperaba esa respuesta de mi parte–. Tu no tienes por qué meterte en mis cosas. Puedo cuidarme yo misma.
–Estás siendo egoísta, ¿no lo ves? Solo piensas en ti misma–"¿y ahora qué le pasa?"–, ni siquiera te detienes a pensar en mi.
–¿Qué estas-
–Déjame terminar–me interrumpió–. ¿Qué me pasaría si te lastiman? ¿Como crees que me sentiría?–no obtuvo respuesta. Siempre creía saber las repuestas a todo; desde el paradero de alguien hasta una fórmula matemática. Cuando éramos niños Bri desafiaba a todo el mundo, y jamás se quedaba conforme con nada. Cuando él me hacía una pregunta y yo se la contestaba, mi amigo cuestionaba mi conocimiento, y estábamos horas discutiendo quién tenía la razón. Este día, una vez más, Bri me estaba desafiando. Él había encontrado una pregunta a la que yo no tenía respuesta. Él había ganado–¿No sabes?–otro silencio–Yo tampoco.
Me puse a pensarlo ¿que haría yo sin él? En este instante estaría perdida, rondando sin rumbo intentado encontrar a mi familia e intentado escapar de la invasion. ¿Qué habría echo en el pasado? Seguramente yo sería otra persona si él no habría aparecido en mi vida. Bri llenaba mis recuerdos, estaba presente en todos ellos; ya sea de manera física o en mi mente. Ese era el problema; él influenciaba todo lo que yo hacía. ¿Que haría en el futuro? No podía siquiera imaginarme una vida si él. Sin ver su rostro todos los días, sin tocar su cabello grasoso, sin escuchar su risa, sin sentir su presencia junto a mi. Me devastaba. El simple echo de pensar en no verlo nunca mas me comprimía el corazón. Sabía que apesar de su ausencia el siempre seguiría en mi cabeza; jamás lograría deshacerme por completo de él. Eso era un alivio. El saber que de alguna manera u otra siempre lo tendría conmigo.
–No-no quiero pensar en eso.
–Tampoco yo, es por eso que necesito que te deshagas del arma.
–Se que esta es tu manera de protegerme, pero el arma es la manera que tengo yo de protegerte a ti–Bri se acercó hacia mi y tomó mi mano; ahora los encontrábamos a centímetros de distancia.
–Max, prométeme que vas a cuidarte.
–Te lo prometo–concluí mientras apoyaba mi frente en la suya.
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No quedó tan largo como pensé que iba a quedar, pero creo que quedó bien.
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Save me
FanfictionEl terror reinaba tras la alerta de evacuación. La ciudad entera estaba intentando evacuar y, como es de esperarse, todo se convirtió en un caos. Max había ido a la comisaría de la ciudad a visitar a su mejor amigo, cuando una alerta de evacuación...