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Park Hayle.

No fue tan mala idea salir con Jungkook, había cambiado demasiado, y de un forma para bien, y cada vez que estoy cerca de el, aparecen muchas cosas, y dependiendo de la situación en la que estemos, Jungkook se apoderaba de mi pecho, como si lo tuviera en la mano, y lo agitada para que este se saliera de mi zona de confort. Me molesta mucho que me sonroje, siento que cada vez que estoy así, pienso que me veo como un tomate, o algo mucho peor.

La tarde fue buena, muy buena, y además conocí su casa, su cuarto, que era como el, muy frío, y lleno de fotos de sus bíceps. La madre de el era muy cariñosa, muy amable, y muy bonita, demasiado elegante.

Al fin había llegado a mi casa, ya estaba oscureciendo, la puerta estaba abierta, y había mucho ruido de música. —¿Hola? —entre un poco lento. Y vi como los pequeños de Baek, y Joul, y Jimin estaban bailando, muy graciosos.

Solté varias carcajadas, me dio mucho gracia verlos así. —¡Haaayle! —Baek corrió hacia mi, a darme unos besos en la mejilla, y sus manitas estaban llenas de suciedad.

—¿Qué haaaacen? —pregunte, y Jimin seguía bailando. —Mejor ven a bailar boba. —

Negué con mi cabeza, y subí a mi habitación, un poco cansada, abrí mi puerta y un gritó muy desesperado salió de mi boca. Mi cuarto estaba lleno de basura, de migas de frituras, y papel higiénico regado por todo mi cuarto, mi cama estaba destendida, y las sábanas llenas de chocolate, mis fotos estaban caídas, y había un olor muy desagradable.

—¡JIIIIIIMMMMMIIIIINNNM! te voy a matar. —baje desesperada las escaleras, para ahorcar a Jimin y a los pequeños.

Pero se habían ido, corrieron, y dejaron que yo limpie todo el desastre que habían dejado en mi cuarto.

...

—¿Qué tal te fue con Jeon, cariño? —todos estábamos sentados en la mesa para comer, los pequeños estaban un poco cansados, les había dicho que arreglen toda mi ropa, y así lo hicieron, y Jimin estaba callado, le había gritado mucho, y desordene su cuarto igual o peor como la había estado el mio.

—Bien, fue divertido. —sonreí y seguía comiendo.

—Es un chico muy bueno. —mi padre trago un poco de té—Lo conozco de muy niño, y es un buen chico.

—Si, claro.

Frunci mi ceño, lo alagan tanto, lo quieren más que a mi de seguro.

Agarre mi celular, y vi la hora. —¡Llegare taaaaaarde!

Agarre mi maleta, y salí corriendo de mi casa, gritando "Adiós familia" y me dirigía a la parada del autobús. Miraba a cada rato la hora, y sufría mucho cuando cada minuto pasaba, y el maldito autobús no llegaba, y si me hechaba a correr, nunca llegaría, no traje ningún centavo como para tomar un taxi.

Me lamentaba cada instante, ya tenía que estar en el instituto, la primera hora ya había empezado, y nada, mi celular sonó, era un mensaje de mi hermano.

Ogro de Jimin.

"Por no esperarme, papá me llevó al instituto, y tu llegaras tarde, boba"

La palma de mi mano se encontraba con mi frente, recibiendo un fuerte golpe con esta. Lo intenté pero ya que, el tonto autobús no llegaba. Camine para irme a mi casa, y dormir.

Di nos pasos, y escuche la bocina de un automóvil muy lindo. Mire un poco para ver de quien se trataba, y era la mamá de Jungkook, esta movía su mano para que me subiera.

—Hola Hayle, ¿no irás al instituto? —la mamá de el es muy dulce. —Si, pero llevo horas esperando el autobús, nada.

—Tranquila, tengo este día libre, te llevare al instituto.

Eso me alegro mucho, y me llevo al instituto muy bien, como lo había dicho ella es muy amable.

—¿Llegaste bien a tu casa?

—Si, muy bien. —sonreí.

Habíamos llegado, la madre de Jungkook habló con las autoridades para que pueda entrar, sin ningún problema.

—Muchisisisimas gracias. —le sonreí de oreja, a oreja, y entre corriendo para entrar al salón.

Estaba esperando a que la primera hora finalizará, y poder entrar en la segunda.

—¡Hayleeeee! —Alys se acercó a mi, a darme un abrazo. —Holaaa. —

—Eres un caso perdido. —Hoseok se acercó a mi, y movió su cabeza de un lado a otro. —¿Y ahora que hice?

—Nada, ese el problema no hiciste nada. Tendrás que quedarte después de clase para que recuperes el cero.

—Aaaah. —me queje un poco, y Cloe se rió por el sonido extrañó que hice.

—Y porque tardaste. —preguntó Jin, acomodándose el cabello.

—Pues—suspire—el autobús no llegaba, espere horas y horas, pero a la final, madre de Jungkook me llevó y listo. —sonreí.

—¿La madre de Juan? —dijo Hoseok.

—¿Juan?

—Jaja, es que me da risa decirle así. —soltó unas risas. —Si, el. —frunci el ceño.

—¡Wow! Jeon Jungkook cambio. —Cloe puso sus manos en mi hombro. —Y creo, que es por ti.

—Si yo también creo eso. —habló Alys.

—Neh.

—¿Y si le gustas? —Hoseok sonrió muy pícaro. —¿Qué yo? Jajaja, ni de broma.

—¿Y que hiciste ayer?, digo, ¿estabas con el no? —Cloe cruzo sus brazos.

—¿Cómo sabes? —tiene poderes mentales. —El lo dijo, preguntó por ti, porque no llegabas.

—Si, o sea, salimos un rato pero nada. —mi voz tembló un poco.

..

—Adiós chicos. — la maestra de Literatura se había marchado, las clases culminaron.

—Cloe, le dices a mi hermano que no iré, que debo recuperar la tonta calificación de matemáticas, ¿por favor?

—¿A-a tu H-hermano? —titubeos salían.

—Si a el, ¿pasa algo? —frunci el ceño.

—Es que a Cloe le gus..

Cloe no dejo que Jin acabará de hablar para taparle la boca. —Eh.

—Nada, yo le digo. Adióos.

Estaba completamente sola, era la única que se había sacado cero. Mire un rato mi celular, y vi las llamadas de mi madre, eran demasiadas.

Había pasado ya mucho tiempo, y el profesor nada que llegaba, di varias vueltas en el salón, un poco molesta, ahorita estaría comiendo, o jugando con los pequeños, pero no, estoy aquí perdido el tiempo, sin hacer nada.

—Hola. - ¡joder! esa voz.

Feelings. Donde viven las historias. Descúbrelo ahora