En la mañana siguiente me he quedado una hora mirando hacia el techo y repasando las imágenes que rodeaban mi cabeza después de lo que paso anoche con David
Volvió casi a las tres de la madrugada tuve que entrar por la ventana de mi habitación para no causar mucha ruido
Ahora me estoy terminando el desayuno que consiste de un cereal de chocolate
Mis hermanos se han ido a la escuela, habíamos decidido que nos quedaríamos en casa pero la disque profesora jamás llegó a la casa ni siquiera tuvo el valor de llamar a mi madre
Desde que mi entrenamiento comenzó mamá ha sido más cariñosa, ya que dice que cada vez que hago esfuerzos un poco de amor no le hace daño a nadie
- Buenos días cariño - Llega mi madre a la isla de cocina y me regala un beso en la cabeza - ¿Dormiste bien?
- Si mamá, muy bien - Respondo con mi mirada en el cereal
- Hija, ¿Todo bien? - Me toma de la barbilla y con delicadeza me hace mirarle a los ojos, esta con su típica mirada llena de preocupación
- Si mamá, solo que ayer pase mala noche - Mentí , la idea de que sepa algo de anoche me llena de vergüenza
- ¿Por qué ayer entraste por tu ventana? - Escupi un poco de jugo de naranja que mi madre había servido para mi después de entrar a la cocina
Me atrganto y empiezo a toser como loca mi madre da unas palmadas en mi espalda mientras me mira ceñuda
- Pero que dices mamá!, ayer no sali - Trago saliva esta vez mirándola a los ojos esperando a que me crea
- No me mientas cariño, ayer vine a la cocina por un vaso de agua y cuando vi por la ventana trasera pude observar como mi hija entraba a su habitación a las tres de la madrugada por una ventana - Se sienta en una silla frente a mi posando sus manos encima de la isla entrelazando sus dedos esperando a que diga algo - Vas a decirme la verdad, no quiero ponerme seria contigo
- Salí con David - Dije en voz baja entrecerrando mis ojos ante la atenta mirada de mi madre que no tiene ninguna expresión
- ¿A dónde? - Pregunta llevándose el vaso de jugo a sus labios
- A un lugar a unos minutos de la casa - Respondo, me mira ceñuda estando insegura de mis palabras
- ¿Que hicieron? - Ahora siento que mis mejillas arden - Oh hija, dime que usaron condon - Levanto la mirada ceñuda, mi madre está con sus ojos bien abiertos sosteniendo el vaso con fuerza
- Que! No mamá! Solo fueron unos besos - Le dije, su expresión se notó más tranquila
- ¿Y besa bien?
- Mamá! - Digo sonriente, ella ríe encogiendose de hombros mientras da otros sorbos a su vaso de jugo
- Solo digo, ya que fue tu primer beso - Dice en tono de voz bajo mirándome con una ceja alzada
- Fue fantástico - Le contestó con mi mirada perdida en algún punto de la cocina
- Dame detalles - Dice emocionada dando un aplauso
- Bueno, fue algo bastante peculiar, estábamos en el río era media noche - La miró, tiene su mejilla reposada en su mano mirándome con atención con una sonrisa de oreja a oreja - Después de eso me contó la historia del porque el río cambia de color
- Ah si! La historia de la poderosa fundadora Karal, David ha sido un fanático de esa historia - Sonríe mirándome de la misma manera
- Me he dado cuenta, su mirada llena de admiración mientras contaba la historia, después de decirme la historia de esta nos miramos a los ojos y David me tomó de la cintura y me pego más a él, no sabía como reaccionar solo coloque mis brazos en su cuello, - De nuevo tengo la mirada perdida hablando con demasiada lentitud con mi madre dandome atención - Nos fuimos acercando más y más hasta que dijo algo que no puedo aún creerlo
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La Escuela de poderes
Teen FictionSolo soy una adolescente que acaba de mudarse de los ángeles para llegar a este pueblo llamado Breckenridge sin saber lo que me ocurrirá al pasar del tiempo Sin saber un secreto que voy a descubrir al llegar a mi nuevo hogar