Capitulo:57

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Mire el doctor entrar como rayo a la habitación de Michael.

Me sentía tan débil, de pronto sentí un gran dolor en mi vientre.

-Mierda...-murmuré. De pronto sentí una fuerte contracción, la cual me hizo gritar de dolor.

Unas enfermeras percataron el momento y se acercaron a mi sosteniéndome. Al instante supe que el bebé ya venía.

Ellas iban y venía de un lugar a otro, finalmente unos doctores se acercaron a mi, y me ayudaron a subir a una camilla.

Los dolores se hacían cada vez más fuertes,
Me llevaron a una sala de parto, a la cual no quería asistir sin Michael.

Mis lagrimas comenzaban a salir ahora con la ganas, sentía que mi vida se iba y el mundo se me venía encima. No podía guardar la calma, de pronto veo como entraban muchos doctores preparados

-Tienes fuertes contracciones, pero no se te ha roto la fuente-Dijo un doctor colocando muchos objectos en una pequeña mesa que me hacían estremecer-Por lo tanto, te tenemos que hacer una cesaría.

-Mi marido....-grite desesperada-No, el tiene que estar aquí.

De pronto el doctor que se había ido con Michael hace unos momentos me mira, se acerca a mi riendo, y toca mi frente.

*¿De que te ríes estúpido?-Pregunto en mi mente*

Sentí un gran dolor, que fue la gota que derramo el vaso.

-No podemos perder más tiempo-Dijo una doctora colocándome anestesia, pusieron una cortina en mi cara impidiendo ver lo que pasaba conmigo.
Mire como los doctores posaron mi mirada a mi vientre. Podía jurar que mi hijo ya estaba apunto de nacer

De pronto por la puerta entra Michael, vestido con la bata azul, y un tapabocas

Sentí que la vida regresaba a mi, sin creerlo, lloré.

-Michael..-Murmuré en llanto.

-A qui estoy conmigo!-Se recargo a la camilla tomándome la mano

Escuché el llanto de un bebé, Michael fijo su mirada atrás de la cortina, y unas lagrimas alumbraban sus ojos.

-Corte el cordon-Pidio un doctor a Michael

Pude sentir como lo hizo, los doctores enrollaron al bebé en una pequeña cobija de hospital, se lo entregaron a Michael y el vino hacia mi, poniendo a un costado

Estaba casando, y débil, pude sonreír y limpiar mis lagrimas

-Iremos a ver que el bebé esté bien, aún no espera más trabajo contigo (Tn)-Dijo una doctora,mientras salía con el bebé.

*
-Michael, por favor no me dejes!-Pedí mirando a Michael

-No lo haré-Tomo mi mano dando un pequeño apretón.

Mi Estúpido HermanastroDonde viven las historias. Descúbrelo ahora