My Straight Boy (COMPLETO)

Afrontando La Verdad ✔

Cuando todos han estado alguna vez a tu favor, sabes que es fatal que de un momento a otro. Todos parecen estar en tu contra. Quienes alguna vez te dijeron que siempre estarían ahí, ahora desaparecieron. Solo supiste lo buenos que eran cuando la dicha estaba presente. Ahora sabes que son buenos pero no para este momento de tu vida, tal vez simplemente ya no en tu vida. Prometieron ser un escudo ante tus problemas, pero ahora sabes que un escudo no sirve si tiene filtraciones por todo lado. Que dejan entrar y salir lo malo. Tus peores miedos no solo han cobrado vida, se han desarrollado, mutado porque como todo virus, encuentran la forma de superarte. ¿Quién dijo que estarías solo?
Los peores se han ido, sí. Pero los mejores siempre han permanecido ahí, ocultos. Esperando por el momento indicado. Tendiendo la mano cada vez que lo necesitaras, sin importar si luego ignoras su existencia por los falsos eternos.
Porque ellos, no te prometen nada, ellos están.
Si a estas alturas no hay nadie, se han alejado. Por su bien mental. Pueden estar incondicionalmente, mas son humanos. La paciencia no es infinita, y la suya se ha agotado. Viendo desde lejos tu venturanza y solo apreciando tu presencia en tus desencantos.
La soledad es aterradora, pero es aún peor si es la verdadera.


17 de diciembre de 2016, 18:53 

1, 2, 3

Inhala

1, 2, 3

Exhala

Repitió el procedimiento un par de veces, hasta que la respiración se tornara más sencilla. Aunque en un principio estaba bastante determinado a hacer aquello, en su interior seguía reacio a la idea de continuar.

Sin embargo, respiró profundamente para tomar un poco de valor antes de enfrentar lo que había postergado por mucho tiempo. Porque era justo, era necesario.

Abrió la puerta del auto sintiendo toda su zona segura desvanecerse en un segundo, comenzando a sentir los dedos adormecidos aunándose con el sudor frio que recorría tanto su espalda como sus palmas.

Comenzó a caminar rumbo a la puerta azul que no veía desde hace mucho, sintiendo que cada pisada se sentía como andar descalzo sobre vidrios molidos. Tocando el timbre con los nervios haciendo estragos en su estómago, se contuvo las ganas de correr para poder evitarlo.

Escuchó pasos acercándose, hasta que la puerta finalmente se abrió revelando a una bella rubia que al percatarse de quien se trataba hizo una mueca para después dejarlo en la entrada. Se esperaba esa reacción pero no lo mucho dolería, tal vez sí, pero de todas formas se sentía como la misma mierda.

Tal vez se lo merecía, pensó, después de todo ella era la primera a la hora de negar los rumores sobre su sexualidad frente a aquellos que decían o sospechaban sobre su relación con Harry.

Ingresó a la morada, cerrando la puerta antes de escuchar la dulce voz de su madre, de nuevo, los latidos incontrolables estaban por llevarlo a un ataque al corazón. Se sentía como un niño pequeño que había hecho una travesura terrible y estaba por enfrentar las consecuencias.

—¿Quién era cariño?... Louis.

Podía ver algo distinto en los ojos de su mamá. Temía que fuera decepción. Sin embargo su corazón se amplió cuando ella le regalo una sonrisa suave.

Podía ver algo distinto en los ojos de su mamá. Temía que fuera decepción. Sin embargo su corazón se amplió cuando ella le regalo una sonrisa suave.

—Cielo, ¿cómo has estado?

—Yo... —lágrimas nublaron su vista y pronto estuvo en los brazos de su progenitora—Lo siento... Lo siento... En realidad él y yo... Lo siento...