Boruto estaba emocionado porque sería tío y hasta ahora era una de las mejores cosas que le sucedían desde que estaba hospitalizado y en especial, desde que Sarada se había alejado. Ver a su hermana formando una familia le hacía pensar en su futuro y en qué debería hacer con su vida diaria, ya se había acostumbrado a convivir en el hospital, pero sentía que había cosas que todavía no experimentaba y gracias a esa pasante lo estaba haciendo. Cuando Himawari le contó sobre su embarazo, no sabía cómo reaccionar, no conocía tanto a Kawaki como para decir que podía ser un excelente padre ni tampoco, sentía que conocía a su hermana como debería: ¿qué tanto había sucedido en los últimos meses? La veía como si fuera otra persona. Estaba cambiada.
—Me alegro muchísimo, Hima—dijo sonriendo.
—Por cierto, ¿y dónde está Sarada? —hizo una mueca pícara—. ¿Ya has avanzado en su relación?
Boruto emitió un sonido extraño y enseguida bajó la mirada, sujetó las sábanas mostrándose frustrado, tampoco estaba con ganas de hablar sobre ella. Ahora mismo trataba de olvidarla, pues sus síntomas no habían mejorado.
—Ella se fue del hospital—dijo con voz ronca—. Le quitaron su pasantia.
—¿Acaso fue por haberte hecho la fiesta? Creí que papá habló con Yanagi para darle el permiso de...
—No. Estoy seguro que lo hizo por mi—suspiró—. No quiere tener problemas con sus superiores.
Himawari se sintió pésima al escucharlo. Jamás lo había visto tan alegre con una chica y ella parecía ser la ideal, ¿por qué tuvo que irse de la nada? Además le caía bien y hubiera querido pasar tiempo juntas. Ahora ni siquiera sabía cuándo volverían a verse. Bajó la mirada buscando consuelo en el suelo y su hermano la sacó de sus pensamientos, preguntándole por el campamento militar y la guerra. Solo le contó lo que podía, en ningún momento le dijo que fue por su salud ni por nada de eso, porque si lo hacía sus superiores la regañarían; así que prefirió no hacerlo.
En el transcurso del día, se pusieron al corriente de los últimos meses, incluso le contó cómo se había puesto de pareja con Kawaki. El pelinegro los observó casi en silencio, sin saber qué decir, solo disfrutando de la forma en la que hablaban. Se notaba que lo quería demasiado y que era capaz de hacer cualquier cosa por él. Sonrió débil, viendo el estado de su salud deplorable, se daba cuenta porque no quería que fumara. Boruto tenía problemas respiratorios y trataba de evitar que otros lo tuvieran, ya que entendía a la perfección lo que significaba padecerlo.
Kawaki pensó que lo mejor sería regresar a su departamento y en eso estaba pensando, cuando salió del baño y se cruzó con la peliazul en la puerta, quien le enseñó una mirada complaciente. No entendió su gesto hasta que notó sus párpados decaídos y acto seguido su rostro se transformó en uno de repugnancia. Se apartó con brusquedad hacia un costado dejándole el paso para así aterrizar en el inodoro y expulsar todos los males. La miró con preocupación. De alguna manera lo ponía nervioso. ¿Cómo la ayudaría en sus nueves meses? No tenía idea.
—Hima, ¿necesitas algo?
—Agua, un poco de agua—pidió descompuesta.
Kawaki buscó un poco de agua de los dispenseres. Y regresó con el vaso lleno para dárselo, la chica se hincó y bebió de un solo trago, sin pausa. Se sentía peor que cuando salieron del campamento. No sabía cómo actuar con respecto a su embarazo y por ahora, solo Boruto lo sabía. ¿Cómo se lo explicaría a sus padres? Kawaki la ayudó a pararse y acarició sus cabellos para calmarla, conteniéndola:
—¿Adónde quieres que te lleve? Porque ...
—Kawaki, ¿tu departamento es grande?
—No tanto, solo tengo una habitación—suspiró—. ¿Por qué?
ESTÁS LEYENDO
Siempre A Tu Lado (KawaHima)
FanfictionHimawari se enamora de su vecino Kawaki. Está por ser ascendida a Teniente y tiene muchos pretendientes, sin embargo, prefiere seguir a ese chico que la vuelve loca, es descuidado y es difícil de domar. Lo que no sabe es que cuando dejen de verse...