Daddy Issues

IX

Inmediatamente al salir del evento y asegurarme que no me haya visto ningún paparazzi conduje por la noche sin pensar.

Mi mirada aterrizó en la luz parpadeante que leía las 8:30 pm de la noche. Me aclaré la garganta, moviendo la cabeza en busca de un lugar para matar el tiempo, por supuesto ese lugar no es mi departamento donde estará Adam.

Aparecieron muchos lugares familiares y todas las luces encendidas como todas las noches en Londres. Aunque había tantos en los que era habitual, solo hay un lugar que me ha estado molestando para visitar.

Aparqué justo afuera de la pequeña cafetería de estilo victoriano, quitándome el traje y reemplazándolo con una simple camiseta negra del baúl de mi auto. Justo como esperaba, el restaurante todavía está lleno de clientes y las cosas parecen estar ocupadas. Sally me dio un saludo silencioso cuando entré e inmediatamente escaneé a la multitud en busca de cierta cabecita azul.

-"Él no está aquí."-
-
"Oh, ¿por qué no?"-

-"Ciel solo viene aquí de martes a sábado".- Ella dice, notando mis órdenes habituales en su pequeño papel de cuaderno.

-"¿oh, es eso así?"-

-"¿Más o menos? Él ayuda. Su madre solía trabajar aquí pero ella se enfermó, por lo que Ciel dijo que quería tomar el lugar de su madre. Sin embargo, no lo subestimes, él sabe lo que está haciendo".- Ella sonrió, lo que correspondí.

Aunque soy cuidadoso con él debido a su alegría y tendencia a actuar como un niño, sabía que hay un lado de él que comprende su entorno. Puede que no actúe así, pero hace todo lo posible para adaptarse y crecer a su manera. La mayoría de las personas simplemente no se dan cuenta de eso, o más bien, Ciel tampoco tiene la intención de que lo noten.

-"Además, él está en el médico".- Me atraganté con el agua, todas las posibilidades entrenándose en mi cabeza.

-"¿¡Que pasó!?"- Sally se dio cuenta de la preocupación en mi rostro y sacudió la cabeza.

-"Solo lo de la revisión general que hacen. Algo de terapia también".- Permanecí en silencio, mis propios pensamientos se calmaron. Sin embargo, justo cuando comenzaba a tragarme todas mis preguntas junto con la bebida, mi curiosidad se apoderó de mí.

-"¿Pueden pagarlo?"- me di cuenta que sonaba muy mal mi pregunta, quise retractarme-"Quiero decir ... no quiero ..."-

-"Está bien. Su padre envía dinero aunque ... aunque las cosas son complicadas".- Una sonrisa comprensiva se curvó en sus labios y asentí.

Ella debe estar pensando que no sé nada acerca de que su propio padre lo abandonó, así que pensé que tampoco era mi lugar hablar de eso. Bueno, la idea de que su padre dejara a su madre llorando en el piso con un joven Ciel con ojos llorosos es una forma de arruinar mi estado de ánimo.

-"Vuelvo en un minuto".- Sally se fue.

Me dejé caer en mi silla, completamente solo, sin que el pequeña niño que competía con el sol me animara y me molestara cada segundo.

Eché un vistazo a mi teléfono y vi un mensaje de texto de Alois, llamadas perdidas de Adam y mi ex novia y una de Claude. No pude luchar contra la sonrisa en mi rostro.

Ha pasado un tiempo después de todo.

Marqué su número y después de tres tonos lo escuché contestar, una voz profunda me saludó desde la otra línea.

-"¿Sebastian? Me estás llamando".-

-"¿Por qué no puedo?"-

-"Bueno, nunca lo haces, a veces lo haces por una broma o cuando te estás convenciendo frenéticamente de que estás a punto de morir de un solo rasguño. Entonces, ¿de qué se trata?"-