Sebastián Michaelis, el tan aclamado modelo y rompecorazones, sin piedad deshecha a sus parejas de turno, pero que pasará cuando caiga cautivado por cierto azulino?
AU moderno
Ya se que esto no es AoW pero...
**Dead dove: do not eat
Después de un tiempo logré calmarlo, ya no estaba desesperado por salir huyendo de aquí, ahora solo se encontraba un poco nervioso sobre mi regazo, lo arruyaba ayudandole a dormir, ahora son las 9 pm la hora en la que usualmente va a la cama.
Mis dedos se enredaban en sus azulinos cabellos mientras que quitaba algunos mechones rebeldes de su rostro, su pequeña narizita esta rosada, supongo por el frío por lo que lo acobijo más hasta el sus hombros. -"¿S-Sebastián...?"-sonó en apenaz un susurro. -"¿si, My Lord?"- -"¿me cantarias de nuevo esa canción? La que me contaste en tu departamento"- volteo a verme el rostro sonrojado hasta las orejas. -"yes, My Lord...cuando la lluvia cae, salgo a caminar..."- así hasta que cayó dormido, con cuidado salí de la camilla y le acomode en su almohada. Intenté encontrar una posición cómoda en aquel incómodo sillón de cuero a un lado de su camilla, pero por más que intentaba no lograba consolidar el sueño, mi mirada vagaba entre las paredes tapizadas con adornos infantiles o simplemente leer mis correos y mensajes desde mi celular.
Cuando por fin los primeros bostezos se hicieron presentes y un poco más cómodo cerré los ojos, pero escuche un frágil murmullo. -"¿mamá...?"- era Ciel. Quien se bajo de la camilla y con los pies descalzos caminó hacia la puerta -"¿Ciel qué te pasa?"- pero no me respondió solo abrió la puerta y salió de la habitación inmediatamente lo seguí de cerca -"¿mamá...?"- -"tu mamá no esta aquí, vuelve a la cama, pequeño"- lo tomé del hombro para que me pusiera atención -"pero me esta llamando, no la escuchas?"- solo el silencio nos rodeaba. -"no hay nadie"- dije con cautela -"p-pero..."- -"ven-" lo cargue -"mejor vamos a dormir juntos ¿qué te parece?"- y lo lleve de vuelta a su habitación pero esta vez toda la noche descansó sobre mi regazo y yo dormí mil veces mejor en su compañía que en aquel horrible sofá. Esa fue la única noche donde Ciel dijo haber escuchado algo, no me pareció importante decírselo a los doctores. .
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-"¡bienvenido de regreso, Ciel!"- gritaron todos los presentes cuando el azulino cruzo la puerta de la cafetería -"hicimos este pastel especialmente para ti"-dijo Finny enseñándole el pastel de chocolate, favorito del niño. La cara aniñada de Ciel se iluminó en felicidad por tal cálida bienvenida, era lo que el chico quería después de pasar casi una semana en el hospital.
Detrás de el venia un joven pelinegro y otra mujer. Aun que en un principio Sally entro en histeria cuando se enteró lo que le pasó a Ciel, Sebastián la pudo calmar, ella se dio cuenta, analizando el rostro del modelo y escuchando el cómo pasó todo, que solo fue un accidente pero que el pelinegro se culpaba profundamente de todo eso, la relación de Sally y Sebastián es un tanto compleja, no solo se quedan como amigos, hay una especie de relación maternal, cuándo el joven e inexperto Sebastian llegó a Londres y hastiado del acoso de los medios, cuándo solamente quería un lugar tranquilo, la vida lo puso enfrente de Sally, la que se terminó volviendo una segunda madre.
Ahora que nos ponemos a reflexionar, Sally no solo ha sido una segunda madre para Sebastian, sino también para Ciel y los demás empleados. Es como alguna vez lo dijo Ciel. 'Las personas que se preocupan por mí siempre serán parte de mi familia. Podemos parecer diferentes ... pero ... siempre nos cuidamos unos a otros y mamá dijo que para eso está la familia '.
Los adultos se sentaron en una mesa a parte mientras que los jóvenes (Ciel en compañía de Finny) estaban comiendo pastel, la cafetería se encontraba cerrada, así que no había que preocuparse por los comensales. -"¿Qué debería hacer ahora? Ciel no esta seguro conmigo, no soy capaz de cuidarlo"-se lamentaba -"Sebastián, solo fue un accidente, le harás más daño si te alejas de él"- desvío la mirada hacia donde estaba el menor jugando y comprendió que tiene razón Sally, él se volvió en parte fundamental de la bida de Ciel, igual que Ciel de la suya.
Al caer la noche, se le daría la noticia, ambos sabían que no sería para nada fácil, pero no podían seguir ocultando el sol con un dedo, las escusas se acaban y el niño era cada vez mas insistente. -"Ciel, necesitamos hablar contigo, pequeño"- dijo suavemente Sebastian -"uhmn? ¿para que?"- dijo extrañado -"acompañanos"-intervino Sally y caminaron a su oficina.
-"¿Qué pasa? Esto es extraño"- se removió incomodo en el asiento -"Lo que sucede, es que..."- no sabía como continuar -"el porque tu mamá no ha estado contigo, sabes que ella te habría ido a cuidar en el hospital que ella..."- -"la última vez que la vi fue antes de ir con mi amigo, fue el día de la feria"- volteo a ver a Sebastián. -"ella esta hospitalizada, ella en este momento no se siente bien"- El rostro del menor se transformo en preocupación pero no dijo absolutamente nada, así hasta que llegó la hora de dormir, Sebastian había intentado levantarle el animo pero nada funcionó el chico solo paso de largo 'solo quiero dormir, Sebas, por favor' había dicho y con eso el mayor se dio por vencido, pero al menos le brindo consuelo con su presencia y calor, conocia lo suficiente al niño como para saber que aunque no pudiera expresarlo (por su Asperger) con palabras sus ojos gritaban por consuelo por querer que alguien lo haga sentir seguro.
-"¿C-Cuando se sentirá mejor? ¿Cuando regresará a casa? ¿Se siente mal ...por mi culpa?"- lo último lo dijo en un susurro. Sebastian se apresuró a decirle lo contrario, el sabe mejor que nadie que para Ciel el unico culpable de todo lo que sale mal es el mismo, se culpo de que su padre lo abandonará a él y su madre, se culpa de no poder adaptarse a los demás y ahora se culpara de lo que le pasa a su madre. -"no pequeño, no es tu culpa, para nada, es solo un...resfriado pasará enseguida"- -"¡No me mientas, Sebastian!"-gritó, sorprendiendo al mayor -"...tu no"-
