- puedes dormir aquí... si está bien para ti por supuesto.
Dijo Josh mientras dejaba una vela en el piso del cuarto y le mostraba la cama.
Tyler se recostó delicadamente en tal y vio como Joshua se quedaba mirándolo, pero luego de un rato solo se dio media vuelta dispuesto a salir.
- ¿te irás?
Dijo algo asustado el menor, le temía a Sam y no se confiaba de quedarse solo si ese hombre estaba en la misma casa. Josh asintió pero al ver la inquietud del castaño fue hacia este.
- si... supuse que querías dormir solo.
Tyler negó callado, mirando con esos lindos ojos asustados al mayor. Josh frunció sus labios apenado y se acercó al castaño.
Tyler se acostó mirando la pared y Joshua mirando el techo.
- Joshua... ¿puedo preguntarle algo?
- si Tyler...
- usted...¿quien es realmente?
Un silencio inquietó por un momento a Tyler, quien apretaba entre sus pequeñas manos las sábanas, ansioso de la respuesta.
- yo..., no lo sé.
Tyler suspiró cerrando los ojos.
Pasaron unos minutos largos. Ambos solo pensaban aún despiertos. Tyler se apegó más a Joshua queriendo sentirlo, no quería sentirse tan solo aún aunque esté acompañado.
- usted...,¿me puede abrazar?
Ante esas palabras Joshua no dudó en abrazarlo por la espalda. Tyler sentía la respiración del mayor en su nuca.
Joshua se sentía apenado, no quería que Tyler se enterara como realmente vivía... que hacía, quien era pero al parecer ya lo sabía todo.
Porque el amaba a Tyler.
Suena loco, pero el cree que lo está, así que no le importa dejar fluir sus sentimientos callado y sigilosamente. Admirando y amando sin decirlo.
Tenía miedo. El no quería que Tyler pensara mal.
[...]
Joshua despertó de golpe y lo primero que vio fue la dulce cara del castaño mirándolo con admiración. Sus mejillas aún mantenían ese color carmesí natural y sus ojos ese brillo encantador.
Que lindo seria ver esa misma cara todas las mañanas.
Tyler se separó rápido al ver que Joshua había despertado.
- buenos días.
Dijo el mayor tomando asiento.
Tyler no dijo nada y se quedó mirando la camisa del mayor. Joshua bajó la mirada y vio que en esta habían machas de sangre seca. Maldeció entre dientes y se paró rápidamente de la cama dejando al menor solo.
Tyler lo siguió hasta afuera y se detuvo al verlo con una cubeta de agua, limpiando su camisa.
- qué sucedió?
Preguntó. Se había dado cuenta de esa mancha la noche pasada pero no quiso decir nada.
- no es de importancia Tyler... ya entra a la casa, tu padre puede que te esté buscando y si te ve volverás con ellos.
Tyler asintió.
Al entrar en la casa vio a Sam sentando en la mesa. Una de sus manos sostenía su cabeza y sonreía de una manera no muy agradable.
- ¡Joshua! ¡Le puedes decir a tu perra que prepare la comida?! ¡Tengo hambre!
Tyler se puso rojo y frunció su ceño ante él sobrenombre que le había puesto Sam.
Solo lo ignoró y se fue al cuarto de Joshua, pero a Sam no le gustaba que lo ignoraran.
Alcanzó al castaño antes que entrara al cuarto y lo acorraló contra la pared.
- hey!, ¿a donde vas? Si te quieres quedar en esta casa debes hacer algo, ¿entendido?
- no haré nada si usted me sigue llamando de esa manera tan vulgar.
- yo te digo como yo quiero porque está es mi casa, así que irás a preparar algo para comer si no quieres una golpiza.
Joshua entró a la casa viendo tal escena.
- Sam ya déjalo.
Josh alejó al castaño del contrario. Tyler como un pequeño niño asustado se puso atrás del mayor mirando con ojos acusadores a Sam.
- solo quiero que haga de comer.
- Tyler no está en condiciones. Viene saliendo de una casa en donde prácticamente lo explotaban con labores, déjalo descansar.
- ugh! ¡Por favor! ¿No está en las condiciones? Míralo! Que ayude en algo!
- Sam por favor, tu no aportas nada.
- sabes que, me voy a alguna caverna en el pueblo, esas apestes son mejores que esta casa.
Y así Joshua y Tyler quedaron solos.
- lo siento... como te pudiste dar cuenta, Sam es un caso muy serio.
- el... ¿por qué tiene ese ojo en la frente?
Josh se puso nervioso. Miró hacia otro lado ignorando la pregunta pero al sentir que el menor lo seguía mirando esperando la respuesta solo suspiró.
- hace... unos años cundo escapé de casa y Sam me dejó quedarme en este campo junto a él ambos estábamos en un momento de rebeldía y curiosidad así que... hicimos un pacto con el diablo.
Tyler se puso pálido. Su corazón comenzó a latir fuerte.
- t-tu..., d-dig-go..., ¿el diablo?
Tartamudeo nervioso el menor mientras se alejaba un poco del mayor.
- si pero fue hace muchos años, y ni siquiera se si realmente lo hicimos... Sam se cortó la frente y yo...
Joshua se levantó la manga de su camisa mostrando una cicatriz de un ojo en su muñeca y al rededor cicatrices pequeñas.
Tyler con miedo acaricio tal cicatriz. Miró fijamente al mayor y con cuidado bajó besando la cicatriz lentamente.
Josh se sintió estremecer.
- qué hizo para conseguir esa mancha roja en su camisa?
Dijo casi en un susurro al menor sin romper el contacto visual y aún muy cerca su banca de la cicatriz.
- si te lo digo... de seguro me temerás más de lo que quizás ya me temes.
- Por favor... quiero saber.
- un hombre fue al bosque... con una hacha y me acuso de brujería. Me iba a golpear con el hacha pero digamos que yo fui más fuerte.
Tyler abrió grande sus ojos color chocolate.
- pero ese hombre quizás tenía razón... usted es aliado del diablo...
- lo se, pero no quería que así terminara todo.
Tyler tembloroso se acercó a los labios del mayor pero se separó casi al tener un poco de contacto avergonzado.
Joshua se acercó rápido y comenzó a besarlo de una manera la cual el menor no podía seguir ya que aún no conocía.
Joshua tomó del cabello del menor tirando de este sin tener mucho cuidado y siendo casi salvaje.
Sus manos tiraron de las prendas del menor, sacándole la camisa dejando ver su suave piel. Tyler entrecerró sus ojos al sentir besos en su pecho.
Quería ser tomado por los besos del diablo.
